Pimecava, Corpinnat y Clàssic Penedès, juntos por primera vez
Vitivin celebró el pasado 13 de marzo la primera de las cinco jornadas técnicas que se llevarán a cabo este 2019 por varias zonas vitícolas catalanas. Esta primera jornada tuvo lugar en Sant Sadurní d’Anoia, feudo de producción cavista, y se centró en la reflexión sobre los modelos actuales de Denominación de Origen.
Tras una gran temporada de desencuentros, durante los últimos años el sector del cava se ha revolucionado con la creación de Clàssic Penedès y Corpinnat, desbancándose ambas instituciones de la DO Cava. Por primera vez, Vitivin logró reunir a representantes de los tres entes en una misma mesa redonda.
Como era de esperar, el encuentro fue tenso, pero con cierto aire de conciliación. Josep Maria Albet i Noya, presidente de la DO Penedès y de Clàssic Penedès, Pere Guilera, presidente de Pimecava, y Xavier Gramona, miembro de Corpinat, protagonizaron una mesa redonda moderada por Joan Miquel Canals, decano de Enología de la Universitat Rovira i Virgili y presidente del Col·legi de l’Associació d’Enòlegs de Catalunya. Xavier Ybargüengoitia, exCEO d’Estates & Wines y de Moët-Hennessy Group, también estuvo presente con aportaciones que no dejaron indiferentes a nadie.
Con un afán de cooperación común, las tres entidades afirmaron que ya se han dado los primeros pasos para generar un futuro cooperativo en el Cava, pero reconocieron que todavía queda mucho camino por recorrer. Albet y Noya abrió la lata recordando que una “DO debe representar a todos sus miembros, incluidos los viticultores, pues todos son propietarios de la marca que representan”.
Y es que precisamente este hecho es el que ha sembrado la guerra en el cava, pues muchas bodegas no se sentían representadas con lo que defienden las siglas DO Cava que, por ejemplo, no permite que Corpinnat aparezca en la etiqueta. En este sentido, el presidente de Corpinnat reconoció que antes de crear esta nueva marca, se reunieron con la DO Cava para llegar a un acuerdo común, pero no vieron voluntad, algo que también sucedió con los Classic Penedès: “Ante esto, nacimos con el objetivo de revolucionar el sector y lo hemos logrado, pero necesitamos revertir esta situación o será espantoso para todos”, indicó Gramona.
Ybargüengoitia defendió la necesidad de redefinir los objetivos de las denominaciones de origen ya que deben defender un territorio y, en el caso del cava, no lo están haciendo: “Las bodegas grandes pueden defender su propia marca y no necesitan una DO, pero las pequeñas sí y por eso hay que replantearse sus funciones”, subrayó.
Ene ste sentido, recordó que “las decisiones de la DO Cava están en manos de dos grandes empresas -Freixenet y Codorníu- que durante estos años se han centrado en el volumen y no en la marca, y ahora resulta que ya no son ni de aquí. ¿Por qué los nuevos propietarios van a cambiar lo que les ha funcinado hasta ahora? Las decisiones van a tener que tomarlas las bodegas más pequeñas”.
Aunque todos estuvieron deacuerdo en que el futuro es incierto y genera preocupación, Pere Guilera reconoció su parte de culpa y afirmó que las cosas empezarán a cambiar: “La DO está en marcha y no vamos a dejar que pare”, concluyó.
