Vidrala mantiene el rumbo: mejora de márgenes y baja deuda pese a la contracción de ventas
El Grupo Vidrala ha cerrado el primer semestre con una evolución del negocio conforme a lo previsto, a pesar de un contexto de demanda global más débil de lo esperado. La compañía ha reforzado las bases de su negocio a través de la diversificación geográfica, el desarrollo estratégico de su posicionamiento comercial y la realineación de su huella industrial, orientada a optimizar su estructura de costes y ofrecer un mejor servicio a sus clientes.
Las ventas reportadas por Vidrala durante los seis primeros meses de 2025 ascendieron a 750,1 millones de euros. Esta cifra supone una variación orgánica del -6,7% sobre el año anterior y una variación en términos reportados de un -9,7%, incluyendo el efecto del cambio de perímetro tras la desinversión del negocio en Italia en 2024.
En lo que respecta al resultado bruto de explotación (EBITDA), el acumulado durante el primer semestre ascendió a 216,1 millones de euros. Esta cifra se mantiene estable a divisa constante y perímetro comparable, registrando una variación en términos reportados del -4,0%. El EBITDA obtenido representa un margen sobre las ventas del 28,8%, lo que refleja una expansión de 171 puntos básicos sobre el año anterior.
El resultado neto atribuible al semestre ascendió a 107,8 millones de euros, cifra que equivale a un beneficio por acción de 3,22 euros y refleja una reducción de un -10% sobre el año anterior.
Respecto a la evolución de la deuda, a 30 de junio de 2025 se situó en 214,8 millones de euros. Este dato representa un ratio de apalancamiento equivalente a 0,5 veces el EBITDA de los últimos doce meses.
Como reflejan los resultados del semestre, Vidrala sigue reforzando su competitividad, poniendo especial énfasis en la gestión disciplinada de costes y el rigor en la asignación de capital. A pesar de las dificultades del entorno macroeconómico, la compañía reitera así las previsiones para el conjunto del ejercicio 2025, que incluyen un EBITDA de 450 millones de euros y una generación sostenida de caja en torno a los 200 millones de euros. Estas cifras están sujetas a desviaciones limitadas, principalmente debido a las fluctuaciones de los tipos de cambio.
Vidrala sigue avanzando y preparando el negocio para los retos futuros, gestionando los costes para mantener la competitividad e invirtiendo con el cliente en la mente. El propósito de la compañía es suministrar envases a sus mercados de la forma más sostenible y rentable posible, fortaleciendo alianzas comerciales y preservando una estricta disciplina financiera. Todo ello, firmemente comprometidos con los pilares estratégicos de Vidrala: cliente, coste y capital.








