Se presentó la nueva imagen de los envases de las Indicaciones Geográficas Protegidas basada en 'El Valor Humano y la Garantía Técnica'
Defensa de la aceituna manzanilla y gordal por el Consejo Regulador y los agricultores
El Consejo Regulador de las IGP Aceitunas Manzanilla y Gordal de Sevilla defiende la calidad de las Aceitunas Manzanilla y Gordal de Sevilla junto a agricultores, cooperativas, industrias transformadoras y envasadoras, entidades colaboradoras y administraciones públicas, en un evento celebrado en Sevilla.
Más de un centenar de profesionales se dieron cita en Orgullo de origen. Futuro compartido, donde se confirmó la apuesta del Consejo Regulador por un cultivo tradicional clave para el territorio y su tejido socioeconómico.
Juan Luis Oropesa Cáceres, presidente del Consejo Regulador, destacó como “en un contexto marcado por la competencia por el precio, la mecanización intensiva y la entrada de aceitunas procedentes de terceros países, las explotaciones tradicionales de olivares sevillanos ligadas a las variedades Manzanilla y Gordal, siguen apostando por un modelo con mayor valor añadido, fuertemente arraigado al territorio”.
Por lo que, durante la jornada, se destacó el papel fundamental de los agricultores productores, cooperativas e industria transformadora y envasadora, considerándolos verdaderos garantes de un modelo de cultivo tradicional que sostiene miles de puestos de trabajo directos e indirectos en los pueblos de la provincia de Sevilla.
El acto fue, además, el primer gran encuentro público tras la reciente designación del presidente, vicepresidente y miembros del Pleno del Consejo Regulador, elegidos en las elecciones celebradas el pasado 22 de octubre. Una nueva etapa de gobernanza que consolida el proyecto colectivo de defensa y promoción de las IGP.
“Este Consejo Regulador no nace de un despacho, nace del campo, de las cooperativas y de las empresas que se han negado a aceptar que la aceituna sevillana sea un producto más en la estantería. Nuestro reto ha sido poner nombre, apellido y origen certificado a un patrimonio vivo”, señaló Juan Luis Oropesa Cáceres durante el acto.
Rosario Acosta Mateos, secretaria general del Consejo Regulador, subrayó el esfuerzo del sector en los últimos cinco años, así como el tesón demostrado en la década previa, iniciada en 2014, cuando el Consejo Regulador de las IGP Aceitunas Manzanilla y Gordal de Sevilla comenzó a trabajar intensamente en la sensibilización, visualización y formación de estos tradicionales alimentos, “cuando pusimos en marcha toda la maquinaria necesaria para diferenciar y valorizar la aceituna de mesa sevillana tradicional”. “Nuestro objetivo ha sido y sigue siendo claro: devolver a las Aceitunas Manzanilla y Gordal de Sevilla, la reputación internacional que siempre tuvieron en la historia del comercio de los productos sevillanos, desde finales del siglo XIX, cuando salían por el río Guadalquivir hacia los principales mercados del mundo como uno de los emblemas agroalimentarios de la provincia”, ha señalado la secretaria general.
Además, se celebró la mesa redonda 'Futuro compartido', en la que han participado de Jerónimo Nicolás, director manager de Aceitunas Torremar; José Luis, key account nacional de Aceitunas La Sabrosita; Manuel Becerra, secretario general de los Consejos Reguladores de Caballa y Melva de Andalucía y de Mojama de Barbate; Francisco Manuel Fernández, productor de aceituna de mesa de Arahal; y la periodista Fátima Ramírez, como moderadora.
La sommelier y comunicadora, Mónica Rosón presentó la nueva imagen de los envases de las Indicaciones Geográficas Protegidas basada en 'El Valor Humano y la Garantía Técnica', así como el menú diseñado por los alumnos de la Escuela de Hostelería de la Fundación Cruzcampo, en el que las aceitunas fueron incorporadas como parte esencial de cada propuesta.
Sobre el Consejo Regulador de las IGP Aceitunas Manzanilla y Gordal de Sevilla
Los nombres Manzanilla de Sevilla y Gordal de Sevilla aplicado a las aceitunas, son Indicaciones Geográficas Protegidas. Un concepto que nos habla de unas aceitunas ligadas a un origen, a un genuino modo de producción, como es la “elaboración al estilo sevillano”, y en una zona geográfica que comprende la provincia de Sevilla. Un producto especialmente valorado por los consumidores en razón a este origen y a su particular modo de elaboración.


























