NBM Envases apuesta por la reducción de su consumo energético con la instalación de 960 módulos fotovoltaicos de la mano de EnchufeSolar
La empresa sevillana NBM Envases, dedicada a la extrusión y soplado de plástico para los sectores químico y alimentario, ha apostado por la reducción de su consumo energético con la instalación de 960 módulos fotovoltaicos de la mano de la compañía cordobesa EnchufeSolar.
Ahora, la unión entre estas dos empresas va a llevar a NBM Envases a mitigar la huella ecológica de su producción al autoabastecer mediante energía solar una parte importante de su consumo energético, con vistas ya a ampliarlo en un futuro inmediato.
Porque NBM Envases es un ejemplo de una compañía en la que las máquinas no se han detenido durante el estado de alarma, tal y como explica su gerente, Álvaro Franco, que añade que, por el target de sus clientes -detergentes y desinfectantes y productos de alimentación-, los últimos meses han sido de trabajo incesante para la compañía.
“NBM Envases ya tenía tomada la decisión de invertir en energía solar, pero a la vista del consumo en los últimos meses, la decisión era ya inaplazable por dos motivos: por el ahorro importante de costes y por el ahorro ecológico”, señala Álvaro.
De hecho, la instalación de estos 960 módulos fotovoltaicos, contribuirá a reducir la emisión de un total de 204,75 toneladas de CO2 al año, equivalente a plantar 410 árboles al año.
En el capítulo de ahorro económico, la instalación de este campo solar generará una potencia total de 384.000 Wp y cubrirá prácticamente el 15% del consumo de energía de la planta de NBM Envases en Dos Hermanas, que en estos momentos alcanza los 3.527.708 kilovatios por hora al año.
“Un doble ahorro”, según indica Álvaro Franco, que va a hacer mucho más atractiva la marca NBM Envases ante los clientes nacionales e internacionales con los que trabaja, que ya aprecian otras medidas que toma la compañía como el reciclaje de todos los componentes que entran en la cadena de producción.
De hecho, ya se está proyectando la instalación de un segundo campo de energía solar en una segunda nave, de 5.000 metros cuadrados, con la que cuenta la empresa y que sirve como almacén.
