Aesgan reclama al MITMA medidas para paliar la subida en el precio del gas
Aesgan (la asociación empresarial a pequeña escala del gas natural) ha propuesto declarar el GNL (gas natural licuado) como combustible profesional, para permitir a los transportistas seguir utilizándolo a precios compatibles con el desarrollo de su actividad. Además, han pedido que se defina un tratamiento ventajoso del biometano, con el objetivo de avanzar en la implantación de este combustible 100% renovable y de producción nacional.
Esto es lo que desde la asociación han transmitido al Ministerio de Transportes Movilidad y Agenda Urbana (MITMA). Una propuesta para que el (bio)GNL contribuya a mantener y desarrollar el tejido industrial al mismo tiempo que garantiza el respeto ecológico.
El gas natural y en particular el GNL se ha convertido en los últimos años en una alternativa real, inmediata y accesible a los derivados del petróleo para el transporte por carretera. Desde Aesgan han recordado que, “además de reducir drásticamente las emisiones reguladas y también las de CO2, ofrece el importante valor añadido de crear un parque circulante de vehículos listos para utilizar biometano, la variante renovable del mismo gas, que por su producción a partir de residuos orgánicos contribuye a la economía circular”.
Es importante indicar que el consumo anual de energía de un camión pesado equivale al de 40-50 turismos y así nuestro parque actual de vehículos pesados de GNC/GNL, que alcanza unas 13.000 unidades, está sustituyendo más de 300.000 toneladas de diésel, que ya no consumimos en nuestro país.
“Para el transporte pesado y de larga distancia no hay, en perspectiva realista, una alternativa a corto y medio plazo más que el diésel o el (bio)GNL”, han destacado desde la asociación. La escalada continua en los precios del gas puede generar una situación en la que el transporte pesado se vea obligado a volver a los combustibles Diesel, en contra de las estrategias de descarbonización promovidas por la UE.
Desde la asociación consideran “urgente y necesario paliar los efectos devastadores que la subida del gas está produciendo en el transporte pesado con GNL y esto puede frenar su desarrollo, bloqueando así el futuro inmediato del bioGNL, renovable, neutro en CO2 y de producción nacional”. Y destacan como otros países como Italia o Grecia ya han destinado importantes ayudas directas para los clientes finales del gas natural.
La UE califica al gas natural como combustible verde e imprescindible en la transición hacia la descarbonización. La incorporación de estos gases supone una oportunidad para Europa de paliar la dependencia energética, y alejarse de los efectos adversos de las perturbaciones en el marcado global.
