Informe UNEF 2025: el estado del sector fotovoltaico en España

El 7 de octubre de 2025, la Unión Española Fotovoltaica (UNEF) presentó su Informe Anual 2025 sobre el sector fotovoltaico en España, en colaboración con la Universidad de Castilla-La Mancha. La jornada, celebrada en la sede de la UNEF en Madrid, reunió a expertos y representantes del sector energético para analizar los logros alcanzados durante 2024 y los desafíos pendientes. Entre los ponentes se encontraban José Donoso y Héctor de Lama, director general y director técnico de UNEF, respectivamente; y María Ángeles Tobarra, investigadora de la Universidad de Castilla-La Mancha.

El sector fotovoltaico sigue siendo un motor clave para la economía española, generando alrededor de 12.000 empleos directos— en producción de energía, desarrollo de proyectos, ingeniería e instalación, según Mª Ángeles Tobarra Gómez, de la Universidad de Castilla-La Mancha. Aunque la huella económica del sector descendió un 2% en 2024, su dinamismo exterior se mantiene, con un aumento del 5% en la balanza fiscal y un esfuerzo notable en innovación: las empresas invirtieron un 3,78% de sus ingresos en I+D+i, triplicando la media de la industria española, que se sitúa en un 1,36%.

En cuanto a capacidad, durante 2024 se instalaron 6 GW de nueva potencia fotovoltaica en suelo, manteniendo la media anual registrada desde 2019. Donoso adelantó que 2025 “puede ser un año récord”. La potencia acumulada ya alcanza 36,9 GW, con 43,6 GW de acceso concedido. Por su parte, el autoconsumo sigue rezagado, con 8,1 GW instalados, lejos aún de los 19 GW previstos para 2030.

El despliegue del almacenamiento se ha convertido en uno de los desafíos más importantes del sector. Donoso defendió que no entiende “una planta fotovoltaica que no vaya de la mano de un  almacenamiento sostenible”, señalando que acompañar la energía solar con soluciones de almacenamiento es imprescindible para garantizar el uso eficiente de la energía y la estabilidad del sistema. Además, insistió en que “la clave está en corregir esos precios altos para mejorar la rentabilidad de las plantas y dar unos precios más bajos a los consumidores”.

La hibridación con baterías se perfila como la solución principal, según declaraciones de Donoso, aunque su avance depende de cambios normativos, como “dotar de personalidad jurídica a estas instalaciones, resolver la suma de potencias y simplificar los estudios de impacto ambiental cuando se ubiquen en plantas ya evaluadas”. La combinación de almacenamiento y generación solar es esencial para que los inversores confíen en el sector, especialmente ante la caída de potencia detrás del contador en autoconsumo, que registró un 34%.

Uno de los problemas más acuciantes del sector fotovoltaico son las denomidas ‘horas cero’ y los vertidos técnicos y económicos. Donoso señaló que “el año pasado terminamos con 696 horas de precios cero. Este año, estamos ya en 759 horas”, y advierte que “las medias siempre son falsas; en la parte norte de la península no hay vertidos, pero en el sur se puede llegar a vertidos del 50%”. Este fenómeno, unido a precios capturados bajos e inestables, evidencia la urgencia de introducir reformas en el sistema de precios eléctricos para avanzar hacia los objetivos de 2030, agregó el director general de UNEF.

Para revertir esta situación, Donoso insistió en que la electrificación de la demanda es una prioridad nacional, y aunque ya existe una demanda importante, teme que alcanzar los objetivos fijados para 2030 pueda suponer un reto complicado: “Es difícil que de aquí a entonces la media pase de los 35 GW, como este verano, a multiplicar por dos esta demanda“. Además, remarcó que “en ese periodo de transición es necesario garantizar la rentabilidad de las plantas, porque si no las inversiones no se van a llevar a cabo”, añadiendo que la falta de seguridad financiera también podría frenar nuevos proyectos.

En este contexto, los concursos de demanda se presentan como una herramienta clave para desbloquear inversiones. Según Donoso, “hay 100 nudos pendientes de concurso” y “nuestra mayor prioridad es que esos nudos de demanda se liciten. Es una oportunidad como país que no podemos desperdiciar”, aunque se mostró expectante de que esto suceda cuanto antes, pues permitiría evaluar la viabilidad técnica y económica de los proyectos, así como identificar los más sólidos e impulsar la industrialización asociada a ellos.

Para Donoso, la fotovoltaica no solo representa una fuente de energía limpia, sino también una palanca de competitividad industrial. “España necesita renovables, de lo contrario, no va a poder ejercer esa ventaja competitiva y esa reindustrialización”, afirmó.

Añadió que “cuando esas condiciones se concreten, hay que tener el sector preparado y listo”, refiriéndose a la existencia de un marco normativo sólido, estabilidad del sistema eléctrico, despliegue de almacenamiento y ejecución de los concursos de demanda. El director de UNEF advirtió, además, que “nadie nos va a perdonar esta oportunidad de reindustrialización, creación de empleo y competitividad si no estamos a la altura de implantar las renovables”.

El apagón del 28 de abril de 2025 supuso un punto de inflexión para el sistema eléctrico español. Héctor de Lama, director técnico de UNEF, explicó que “todos los informes desmienten las conclusiones iniciales” sobre la causa del incidente, citando estudios del Ministerio de Transición Ecológica, de ENTSO-E y de Red Eléctrica de España (REE). Según De Lama, “hay un consenso generalizado de que fue un problema de control de tensión”: la normativa necesaria para que las centrales fotovoltaicas y otras renovables pudieran gestionar la tensión aún no estaba aprobada, y “las centrales térmicas no dieron la tensión que se necesitaba”.

Durante la mañana del 28 de abril se registraron “incrementos de tensión entre las 9 y las 10:30, que consiguieron controlarse, ya que no se superaron los límites establecidos, aunque a costa de conectar y desconectar líneas”. Héctor de Lama puso el foco en la diferencia con otros países: “En Portugal se permite a las renovables controlar la tensión; en España (como en el resto de la UE) está ligada únicamente a las térmicas”. Como solución, señaló que “el modo seguro es incorporar más grupos térmicos, hasta que las renovables puedan aportar este control de tensión”, aunque señala que esto no es más que un parche temporal hasta que la legislación permita a las renovables intervenir en el control de tensión.

Para solventar esta limitación, el 12 de junio se aprobó el procedimiento de operación 7.4, que permitirá a las renovables establecer un control de tensión, y cuya puesta en funcionamiento está prevista para el primer trimestre de 2026, lo que facilitará la integración de la energía fotovoltaica en la red y una mejora significativa en la estabilidad del sistema. Donoso añadió que “desde 2017, todas las fotovoltaicas han incluido la potencia necesaria, y desde 2019 ha estado durmiendo en un cajón, durante cinco años, hasta el apagón”, denunciando la demora en la implementación de esta normativa. Héctor de Lama mostró cómo un control de tensión eficiente puede estabilizar y descongestionar la red: “Desde el apagón, se ha aumentado en 30 GWh/día la tensión, lo que equivale a 1,25 GWh/hora”.

Uno de los desafíos más urgentes para que la fotovoltaica pueda avanzar y consolidarse es la aceptación social, especialmente en entornos rurales. Donoso subrayó la importancia de la opinión pública en el desarrollo político. “La agenda política puede hacernos cambiar la normativa” y recordó que “cuando una planta fotovoltaica no se hace, siempre hay perdedores”.

“Como vivimos en el mundo de las fake news, vamos a conseguir atajar todo esto. No somos el enemigo del mundo rural, somos su oportunidad”. La experiencia demuestra que, a medio plazo, las plantas se convierten en refugios de la naturaleza, con 61 instalaciones ya certificadas con sellos de excelencia en sostenibilidad. Según un informe publicado en 2024, las plantas “pueden llegar a albergar una diversidad similar e incluso superior a la de su entorno”, destacando sobre todo la presencia de aves esteparias e incluso rapaces, normalmente en vuelo, pero a veces posadas o alimentándose.

La coexistencia entre la ganadería y la energía solar refleja cómo la fotovoltaica puede integrarse en el entorno rural y generar nuevas oportunidades de desarrollo local.

La Universidad Carlos III de Madrid (UC3M) analizó el efecto de la fotovoltaica en municipios rurales en un estudio publicado a comienzos de 2025, titulado ‘Estudio Cuantitativo de los Impactos Socioeconómicos Locales de la Energía Solar Fotovoltaica’, presentado en la sede de Puerta de Toledo de Madrid de la UC3M. Los resultados indican que la implantación de plantas solares contribuye a dinamizar el empleo local, atraer población, estimular el tejido empresarial y aumentar los ingresos municipales.

En términos de empleo, el estudio revela que la construcción de parques solares supone un incremento medio de entre un 7% y un 13% en el empleo en los municipios, especialmente en los de menor tamaño. En cuanto a la demografía, se ha observado un crecimiento poblacional de entre el 3% y el 7% en los municipios con instalaciones fotovoltaicas, y un aumento del 3% en el valor de las propiedades. Además, el número de empresas registradas en los municipios ha aumentado un 2%, especialmente en sectores como la construcción, la hostelería y la agricultura. Los ingresos fiscales municipales han crecido en torno al 11%, y los ingresos medios directos de los residentes han aumentado entre un 0,5% y un 1%

Un caso concreto es el municipio de Belinchón, en Cuenca, que ha experimentado un incremento de su población del 30%, pasando de 300 a 500 habitantes, a raíz de la implantación de una planta fotovoltaica en la región.

El informe de UNEF refleja que, pese a los avances en instalación e inversión económica, el sector fotovoltaico español todavía se enfrenta a retos en autoconsumo, almacenamiento y aceptación social, cuya resolución y puesta en marcha será clave para alcanzar los objetivos energéticos y de reindustrialización previstos para 2030.