El consumidor español bebe más vino rosado en casa
Un análisis detallado de las cifras del panel de alimentación que publica el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) permite comprobar que el consumo de vino rosado ha mejorado sensiblemente durante la crisis provocada por la pandemia y los confinamientos ligados a la COVID-19. En los estudios elaborados por el Observatorio Español del Mercado del Vino (OeMv) se comprueba su evolución desde el 2009 hasta junio de este año.
Entre otros aspectos, destaca que el crecimiento reciente de este último año (durante la pandemia) ha sido importante para todos los vinos en el canal de alimentación. Como ya sabemos, el confinamiento y las restricciones a la hostelería han hecho que creciera mucho el consumo en el hogar.
Los españoles beben mucho más vino rosado en sus hogares durante la pandemia. Foto: AESOP. Wines en Unsplash.
De entre todos los vinos que han crecido, el rosado es el que lo ha hecho a mayor velocidad: un 20,4% en valor, hasta los 47,8 millones de euros, y un 36,1% en volumen, hasta los 25,1 millones de litros. Han ido mejor los vinos rosados con denominación de origen en cuanto al valor (+22,4%), pero mejor los rosados sin DOP en cuanto al volumen (+43,9%).
Sigue siendo un consumo inferior al de vinos blancos y tintos, pero estos han crecido el último año a ritmo que, aunque bueno, ha sido muy inferior. Ahora bien, si comparamos esta evolución reciente (TAM) con la variación media anual entre 2009 y 2020 (compound anual growth rate -CAGR- o tasa anual media de crecimiento) vemos que el vino rosado venía cayendo en la última década, siendo el único que presenta tasas negativas, de apenas el -0,4% en valor (básicamente el rosado sin DOP) y del -2,6% en volumen de media anual (también impulsado por la caída del rosado sin denominación de origen, frente a la subida del rosado con DOP).
Esa evolución negativa anterior hizo que perdiera cuota de mercado entre los vinos españoles, tanto en valor (del 6,7% del total al 4,9%), como en volumen (del 8,9% al 5,1%). Pero la recuperación está siendo extraordinaria en tiempos recientes y el crecimiento del 2020 es mucho mejor que el del resto de los vinos.
Esta evolución en periodo más extenso se ve también en el gráfico. Tras una mala evolución hasta el pasado año 2019, la recuperación del consumo del vino rosado ha sido extraordinaria, especialmente en 2020 y suavizándose en 2021.
El único aspecto algo negativo en esta evolución de los rosados es el precio medio. Durante la recuperación del último año vemos que sufre una caída del 11,6% hasta 1,90 €/l de media, particularmente fuerte en los vinos rosados sin denominación de origen (-18,5%) y muy ligero (-2,9%) entre los vinos rosados con DOP.
