Más de la mitad de los productos con Nutriscore B son ultraprocesados
Según un reciente estudio realizado por El CoCo, la aplicación gratuita que analiza los productos de supermercados para ayudar a las familias a elegir los alimentos más saludables, de todos los productos más vendidos en España se observa que más de una cuarta parte de los productos de alimentación ultraprocesados tienen NutriScore A o B. En concreto, de los productos con Nutriscore B, el 52,27% son ultraprocesados, y el 21,74% con Nutriscore A son ultraprocesados.
Estas cifras representan los hábitos de compra de un gran porcentaje de la población que toma como referencia el sistema NutriScore a la hora de comprar productos que consideran saludables. Es posible que los consumidores adquieran estos productos ultraprocesados en base a una buena clasificación en NutriScore, que lleva a asociar la etiqueta A o B que aparece en los envases, con la opción de elección más sana y menos procesada. De hecho, según una encuesta realizada por El CoCo en el mes de septiembre, más del 35% de los consumidores se preocupan más por la alimentación saludable desde la pandemia de la COVID-19, a pesar de seguir teniendo una cifra inalterable durante dos años, en la que el 63,47% de los productos más consumidos son ultraprocesados.
Este estudio realizado en nuestro país compara el grado de procesamiento mediante el sistema NOVA reconocido por FAO y OMS, y la supuesta calidad nutricional según la clasificación NutriScore en 164 tipos de alimentos y bebidas, que pertenecen a las 48 marcas de gran consumo más vendidas en nuestro país según el ranking Kantar Brand Footprint España 2021.
En este sentido, los principales productos con Nutriscore B y que a la vez pertenecen a la categoría de ultraprocesados son: los conocidos como “refrescos 0”, el agua mineral con sabores, el pan de molde, las “mini” tostadas, las barritas de pescado rebozadas, el cacao instantáneo, las galletas” 0 azúcar “y las cremas de verduras.
“Los productos ultraprocesados están consiguiendo una buena puntuación en NutriScore de forma atípica. Jugando con los ingredientes consiguen obtener del algoritmo de NutriScore la deseada nota en verde, a pesar de seguir siendo elecciones muy poco interesantes o negativas desde el punto de vista nutricional. De esta forma, los consumidores sin ser conscientes y confundidos por estas notas positivas de NutriScore pueden verse tentados a elegir productos que en su gran mayoría no deberían formar parte de una dieta saludable, según las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud”, declaró Bertrand Amaraggi.
Asimismo, el 21,74% de los productos con Nutriscore A; es decir, clasificados aún mejor por su perfil nutricional según NutriScore, son también ultraprocesados. Los encontramos en: el pan de molde, el caldo para paella o para fideuá y las leches con calcio.
“Estos datos, vienen a confirmar una vez más, que el gobierno tiene que revisar el sistema actual de clasificación nutricional de alimentos de NutriScore, y proponer otro sistema que no ofrezca falsas lecturas. Es importante hacer notar que todos estos productos, en relación con aquellos con nota positiva en NutriScore y que al mismo tiempo son ultraprocesados, se podrían publicitar sin ningún tipo de restricción si se llevara a cabo la propuesta anunciada en su día por el ejecutivo de permitir solo la publicidad dirigida a niños, de productos con NutriScore A y B”, concluyó Juan Revenga, dietista-nutricionista y biólogo, miembro de la Academia Española de Nutrición y Dietética.