Entrevista a Leo Marques, Business Director de Renishaw Ibérica
La Asociación de Profesionales para la Competitividad del Mecanizado, Aspromec, continúa consolidando su posición como referente en el impulso y desarrollo de la industria del mecanizado en España y así lo demuestra la incorporación de Renishaw como nuevo patrocinador. Una adhesión que permite a Aspromec ampliar su red de colaboradores estratégicos con la misión de fomentar la competitividad, la innovación y la transferencia de conocimiento en el sector de la fabricación mecánica. Leo Marques, Business Director en Renishaw Ibérica, especialista mundial en el ámbito de la metrología, control de movimiento, espectroscopia y el mecanizado de precisión, nos da las claves de este acuerdo.
Aspromec nació con el objetivo de mejorar la competitividad de las empresas mecanizadoras. ¿Cuáles son las soluciones que aporta Renishaw en este sentido? ¿Tanto en control de como de fabricación aditiva?
Diría que, desde el punto de vista tecnológico, Renishaw puede aportar a Aspromec y las empresas mecanizadoras todo su conocimiento en metrología, sea en la máquina-herramienta o fuera de máquina, siempre ligada al mecanizado. Todo lo que hacemos, de una manera u otra, está ligada al mecanizado. Y Renishaw viene a llenar este hueco que, por otro lado, es fundamental. No existe mecanizado sin metrología.
Debo decir que un proceso de mecanizado se puede mejorar de muchísimas maneras. Hay muchos frentes para mejorar un proceso. Desde la gestión del proceso mismo, con mejoras de los softwares de gestión, la logística, la compra de material, el aprovisionamiento… Pero si hablamos del mecanizado mismo, está la máquina, la herramienta, los utillajes o el material, y para entender cómo todo esto se comporta dimensionalmente o cómo se comporta el proceso en sí, necesitas que la metrología audite dicho proceso y determine si está estable o no. La metrología mide el proceso, mide las variables del proceso para determinar si está bien. De modo que juega un papel muy importante en para saber en el mismo momento si estás fabricando bien o mal. Y ahí es donde Renishaw tiene mucho que aportar tecnológicamente.
Pero creo que también, además de la tecnología, hay algo que es intangible. Cuando Renishaw alcanza acuerdos o colabora con otras empresas o entidades, busca un carácter parecido, un estilo —aunque no existe un estilo bueno o uno malo, los hay diferentes— y una manera de hacer parecida al Renishaw. Para nuestra empresa es también importante que las personas congenien y con Aspromec existe esta afinidad.
Hablamos de metrología, pero Renishaw también está presente en el mercado de la fabricación aditiva. ¿No se prevé incorporar también esta experiencia?
Renishaw tiene hasta 14 divisiones de productos y es cierto que de momento estamos hablando con todo lo relacionado con la metrología. Pero si en algún momento quieren abrir la puerta a la impresión 3D en metal, seríamos uno de los jugadores también. Más si tenemos en cuenta que ya se ha superado la idea de que la fabricación aditiva venía a sustituir el mecanizado y, hoy en día, ya se entiende como un complemento, una tecnología más de fabricación y muy dependiente del mecanizado.
Bien, hemos hablado de la aportación de Renishaw a Aspromec pero, al revés… ¿qué supone para la empresa formar parte de la asociación?
¿A Renishaw? Nos permite llegar a más mercados. Nosotros siempre buscamos nuevos caminos y es muy hablar con todo el mundo siempre. Seguro que tenemos muchos clientes potenciales a los que no llegamos. Aspromec viene a ayudar al mecanizador, especialmente al pequeño y mediano mecanizador que a menudo no llega a nosotros. Y no porque tengamos la puerta cerrada, al contrario, pero no coincidimos en ferias, por ejemplo, o no suelen ir a eventos, entre otras razones. Aspromec nos puede ayudar a llegar a ellos, porque tenemos capacidad para atenderlos y mostrarles cómo la metrología les puede ayudar a mejorar su competitividad.
Como empresa multinacional que es Renishaw, conocen bien la situación del mercado mundial. Por su experiencia, ¿cómo definiría hoy la situación del sector industrial en España respecto Europa y el resto del mundo?
Actualmente, el mecanizado en Europa enfrenta problemas debido a la industria del automóvil, afectando a países como Alemania, Italia y Francia. Sin embargo, en España, los efectos son menos graves en comparación. Esto se debe a varios factores: una mayor diversificación del mercado, una menor dependencia de la automoción y el hecho de que las empresas prestan servicios a la subcontratación general. Además, sectores como la aeronáutica, la defensa y el médico-dental están impulsando el mercado.
Un aspecto importante en España ha sido la entrada del coche eléctrico e híbrido en Europa. Aunque España se ha quedado con las tecnologías más tradicionales de combustión, y partes del híbrido, actualmente estas tecnologías son las que tienen mejor acogida en el mercado. También hay una gran expectativa en el sector de la defensa.
De hecho, Renishaw participó en el último observatorio que Aspromec organizó en Córdoba, justamente dedicado a la defensa. ¿Cómo lo valoran?
Fue muy enriquecedor. Expuso hasta qué punto las empresas necesitan proveedores, desde los que fabrican aviones hasta el productor de vehículos. Existe una cadena de suministro.
En España y Portugal existe una industria del mecanizado muy ligada a la automoción. Son conocimientos y recursos que están pensados para series largas, estables y ahora ven cómo algunas tienen la oportunidad de reconvertirse para atender la demanda del sector de defensa. Y esto se puso claramente sobre la mesa y con franqueza. Se expusieron las complejidades de este mercado, pero también las necesidades que están surgiendo.
Al mismo tiempo, las empresas proveedoras de automoción, por ejemplo, se deben plantear si cambiar por completo o mantener un cierto equilibrio, porque el mercado del automóvil volverá a despegar en algún momento. ¿Cómo harán entonces las empresas de defensa para mantener este proveedor dentro de la cadena? En el observatorio se respondieron muchas dudas y las empresas mecanizadoras pudieron ver cómo tener la tecnología necesaria les puede permitir actuar como proveedor del sector Defensa. Porque algunas cosas sí son intercambiables. Por ejemplo, en el vehículo de combate toda la parte de rodadura es un vehículo, no es distinto. Son tecnologías muy parecidas. Creo que se puso en evidencia que una de las diferencias son las cantidades, las series, además de la seguridad, claro, y toda la parte administrativa y de regulaciones.
Hasta ahora defensa era una industria muy endogámica pero ahora tiene la necesidad de crecer, proveedores y hay que preparar a estos proveedores.
Un nuevo encuentro con el sector será en noviembre con la nueva edición del Congreso del Mecanizado. ¿Han participado como asistentes en las anteriores ocasiones? ¿Cómo lo valoran?
Sí, estuvimos el año pasado porque ya estábamos en fase de ‘enamoramiento’ con Aspromec y fuimos al Congreso. Fue muy interesante y el sitio, Getafe, perfecto.
Como proveedor de tecnología, a Renishaw le interesa el congreso por su función específica de hablar de tecnologías o necesidades de los mecanizadores. El congreso les aporta especialistas para hablar de este asunto. Los congresos están para esto, para hablar de tecnologías y de manera genérica cómo implementarlas, mientras que con los observatorios vamos al detalle, hablando individualmente.
Para finalizar, ¿algún mensaje para los mecanizadores que deben superar retos a diario?
Sí, está claro. Hoy más que nunca, la industria sobrevive invirtiendo en competitividad. Si una empresa no invierte, mañana otro le quita el trabajo. Aspromec creo que más que un sitio para hacer negocios, como podría ser una feria, es un sitio que les da la tranquilidad necesaria para conocer tecnologías, conocimientos y les permite estar en un espacio con intimidad para hablar de ello. Un sitio donde pueden conocer novedades sin compromiso y donde se les escucha a la hora de planificar los temas a tratar. Como he dicho antes, la competitividad o la mejora de un proceso se puede tratar desde muchos aspectos, no solo el mecanizado. Una vez tienes la máquina correcta, la herramienta correcta, la metrología correcta, ¿qué alta? ¡Pues un montón de cosas! ¿Incorporar inteligencia artificial? Si, pero… ¿Cuál? Hay que seleccionar muy bien dónde y en qué invertir, porque dinero mal invertido es un desperdicio brutal. Aspromec es el sitio que permite tomar las decisiones con tranquilidad y darse cuenta de que comparten las mismas problemáticas con otros mecanizadores.
