Nutracéuticos: los alimentos funcionales

El mercado de los ‘alicamentos’, desarrollados específicamente para mejorar la salud, está en constante progresión. Según el informe anual realizado por la Agencia Invest in France, entre 2002 y 2007, el sector de alimentos funcionales generó 200 nuevos proyectos de inversión extranjera en Francia —un 7 por ciento del total - y creó 9.610 empleos— un 5 por ciento de los puestos de trabajo creados en el marco de estos proyectos.

El mercado global de alimentos funcionales supera ya los 100 billones de euros, lo que representa cerca del 5 por ciento del sector agroalimentario. En Francia, este mercado, que generó una facturación de 900 millones de euros en 2006, está creciendo a tasas anuales superiores al 10 por ciento.

Son varios los Clústers franceses que basan su estrategia en torno a los alimentos funcionales: Nutrition Santé Longévité - Nutrición Salud Longevidad en la región Nord Pas-de-Calais, Prod’Innov en Aquitania, Vitagora en Borgoña o Qu@limed en la ciudad de Montpellier. La administraciones públicas apoyan las actividades de investigación mediante un sistema de crédito fiscal, entre los más avanzados de Europa, que contempla la devolución del 50 por ciento de los gastos en I+D (hasta 100 millones de euros) durante el primer año, el 40 y el 30 por ciento de estos gastos en años posteriores.

En este mercado, los laboratorios farmacéuticos son extremadamente activos. Algunas pymes especializadas como Arkopharma (productos basados en plantas) y Juva-santé (complejo vitamínico de belleza Juvamine), lo demuestran a diario. A la frontera entre industria farmacéutica y cosmética, la elaboración de complementos alimentarios conduce a asociaciones entre ambos sectores. Así las firmas Nestlé y L’Oréal han creado la línea de productos Innéov, especializada en alimentos funcionales cosméticos mientras que Novartis y Quaker Oats desarrollan conjuntamente una línea de productos dietéticos, llamada Aviva.

La industria agroalimentaria es otra de las que genera infinidad de proyectos: Danone y Lactalis encabezan el ranking de fabricantes de productos lácteos bioactivos y ligeros enriquecidos con vitaminas o fibra, como el yogur Actimel de Danone que contiene Lactobacillus Casei. Este segmento de mercado genera una facturación de 400 millones de euros. Las compañías estadounidenses y japonesas tampoco se quedan atrás y cuentan con una amplia cuota de mercado: Shiseido está desarrollando un yogur antiarrugas con aloe-vera. Por su parte, Knorr (Grupo Unilever) ha lanzado Knorr Vie, un producto a base de verduras y fruta fresca, así como bebidas y yogures proactivos que reducen el colesterol.

“Es un mercado con un alto potencial de desarrollo que abarca a tres sectores (agroalimentario, farmacéutico y cosmético) en los que Francia goza de una posición privilegiada, al contar con empresas líderes en cada una de ellos,” indica Philippe Favre, Presidente y Director Ejecutivo de la Agencia Invest in France.