Anice celebra su Junta General y analiza el escenario en el que opera la industria cárnica

La Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España (ANICE) celebró, a finales de marzo, su Junta General anual, la primera tras la integración de las actividades de AICE y ASOCARNE a mediados del pasado año. Se pretendía pues, hacer balance del sector y analizar la situación y perspectivas de la industria cárnica para este ejercicio. Un periodo que presenta igualmente un escenario de costes crecientes, descenso del consumo y problemas de financiación para las empresas.

La Junta, que se desarrolló en la sede de la CEOE en Madrid, contó con la asistencia de un elevado número de empresas asociadas. El presidente de ANICE, Generoso García, repasó la situación del mercado nacional, con descensos en el consumo, elevados precios de los inputs y mantenimiento de los problemas para acceder a las fuentes de financiación. Todo ello, unido al alto nivel de concentración de la distribución, dibuja la dificultad para alcanzar niveles apropiados de márgenes y rentabilidad para las empresas. “Con ese escenario de recesión en el mercado interior, un año más las exportaciones se han convertido en la estratégica tabla de salvación para el sector”, señaló Generoso García.

En efecto, la industria cárnica presentó en el año 2011 un espectacular expediente exterior, con cifras nunca antes conseguidas. El sector cárnico español exportó un total de 1,40 millones de toneladas de productos frescos y 116.000 toneladas de elaborados, lo que representó unas ventas exteriores de algo más de 3.644 millones de euros. Es decir, un 17,1% superiores a los 3.112 millones facturados en el año 2010.

En la junta se hizo balance del sector y se trató el escenario actual, en el que se vislumbran igualmente costes crecientes, descenso del consumo y problemas de financiación para las empresas.

Junto a la necesidad de consolidar las exportaciones, logrando mayor eficiencia como país mediante la unificación de competencias, se analizó en la junta el resto de proyectos de ANICE para este año. Entre éstos, se incluyen el trabajo para favorecer el fortalecimiento de las interprofesionales INTERPORC (porcino blanco) e INTEROVIC (ovino) para la defensa de la imagen y calidad de los productos y el fomento del consumo. También se dejó claro el apoyo a la reautorización de las harinas cárnicas para la alimentos de no rumiantes, superando una situación que ha supuesto un gran coste para el sector, y que permitirá cubrir el déficit de proteínas de la UE.

Igualmente, la Asociación va a insistir en la aportación de ideas y propuestas para la necesaria modernización de la inspección de carnes, para que sea más eficiente y sostenible económicamente, impulsando la cultura de la innovación en el sector. Entre las fórmulas a considerar destaca una posible plataforma tecnológica del sector cárnico.

En el ámbito normativo, resaltan los proyectos para colaborar en las iniciativas legislativas dirigidas a un mejor funcionamiento de la cadena alimentaria, buscando que sea más equilibrada, eficiente y generadora de valor También se busca trabajar en la puesta en marcha del Reglamento de Bienestar Animal en el sacrificio, ayudando a los mataderos en su aplicación y desarrollando esquemas de certificación para las empresas. Y por último, establecer un consenso que permita dar luz verde a la nueva norma de calidad de los productos cárnicos, la revisión de la vigente norma de productos del cerdo ibérico o la defensa del jamón serrano español a través de una Indicación Geográfica Protegida.

En la última parte de la Junta General, Conrado López, asesor laboral de ANICE y miembro de la Comisión de Relaciones Laborales de la CEOE, explicó a los miembros de la Junta General los puntos esenciales de la reciente reforma laboral aprobada por el Gobierno y las novedades de la negociación colectiva que se desarrolla para la renovación del convenio del sector.

Por último, Cándido Muñoz, catedrático de Economía Aplicada de la Universidad Complutense de Madrid, destacó la relevancia socioeconómica y la importancia del sector alimentario, como segundo en importancia a la hora de exportar a otros países, y dentro de éste, el papel de liderazgo del sector cárnico.