La pandemia impulsa el avance de Ceratizit en España

Los numerosos Ertes, las incertidumbres sobre el comportamiento de la economía en los próximos meses e incluso el temor a ponerse en contacto con clientes cuya situación desconocemos están siendo constantes comunes a muchas empresas desde que comenzó la pandemia. Todo ello ha obligado, está obligando de hecho, a las empresas a establecer estrategias de todo tipo, no solo comerciales, sino de la propia organización interna e incluso estrategias encaminadas a fortalecer el espíritu de equipo. Ramiro Bengochea explica que desde el principio quiso centrarse en lo que él llama la generación de una alfombra de confianza en la empresa. El objetivo, tal y como explica, es “protegernos de los efectos devastadores del miedo a perder el empleo o a una bajada importante de los ingresos. Es una iniciativa de cara al equipo. Cuando todo comenzó entramos en estado de shock, tras un periodo, antes del confinamiento, en el que nadie pensaba que íbamos a llegar a esta situación. Pero en pocos días tuvimos que comenzar a teletrabajar y los técnicos comerciales dejaron de hacer visitas”.

En su nuevo cargo de director Sur de Europa División Herramientas de Corte del Grupo Ceratizit ya en los primeros días reunió a todo el equipo de España por skype. Desde entonces en Ceratizit han organizado muchas ponencias, presentaciones y reuniones con el equipo, pero todavía recuerdan lo bien que fluyó aquella reunión, la primera en la historia de la empresa en la que todo el personal de España se reunía por skype. Niños hablando y jugando, mesas y sillas poco habituales en el entorno profesional, bibliotecas, cuadros, fotos personales y sofás en el fondo... ¡El escenario físico era muy diferente al habitual del trabajo! “Creo que todos hemos aceptado esta situación como natural. Ya desde esa primera reunión empecé a tejer la alfombra de la confianza, a poner una serie de premisas que cubrieran las necesidades básicas de las personas de la empresa. Tenía el objetivo claro: no bloquear la creatividad ni la búsqueda de oportunidades ante una crisis que nos iba a venir. Quería eliminar miedos que nos bloquearan”.

En esta vía para cuidar a los empleados el mensaje era claro: “Entramos en un túnel oscuro pero los mismos que entramos somos los que vamos a salir. Nadie va a ser despedido, os lo garantizo. Pero para eso necesito cohesión y vuestra implicación al 100%”. El directivo de Ceratizit está convencido de que “no descapitalizar el talento, nos dará un plus cuando todo se recupere, para ganar cuota de mercado”.

A partir de ahí se fijaron los objetivos más inmediatos: minimizar el daño y reducir costes operativos (por ejemplo con una especial atención a la gestión de impagados) y participación de todo el equipo en la maximización del valor para los clientes, es decir, impedir la devaluación del valor de sus productos y servicios. En otras palabras, se trataba de no reducir el margen y para ello ya en el mes de marzo se comenzó a trabajar como una ingeniería con el fin de los reducir los costes del cliente. El resultado no tardó en llegar en forma de proyectos de optimización de procesos y de investigación de mercados para los clientes, todo ello con personal propio de Ceratizit. “Estos objetivos de incrementar el valor de lo que le damos al cliente y de buscar para él oportunidades fueron fácilmente asimilados por nuestro equipo -continúa Bengochea-. Pero también es cierto que solo cabe salir de esta crisis ganando en cuota de mercado. Esto nos obliga a buscar procesos que se están haciendo con herramientas de otro fabricante y demostrar que podemos ser mejores. También buscamos nuevos mercados y sectores con mucha actividad como las energías renovables, alimentario o farmacia, en los que se están generando oportunidades de negocio”.

Esta estrategia de evitar el “modo miedo” para opera en “modo motivación” ha obtenido también el respaldo de la central y se está utilizando en otros países en los que Ceratizit está implantada. Un ejemplo de nicho al que antes no se le prestaba atención es el de las herramientas para taladrar metacrilato para el cual ha sido muy útil la experiencia de la empresa en el taladrado de fibra de carbono.

Sobrellevando los miedos, al contagio, al rechazo del cliente a una visita, incluso siendo flexibles con las situaciones familiares de los que tienen niños o personas de las que cuidar, la primera semana de mayo ya se dio un primer paso importante y se comenzó a visitar a clientes. Muchas pymes están trabajando, con pedidos que ya existentes antes de la pandemia, si bien es cierto que muchas se están quedando sin trabajo.

Como consecuencia de todo el trabajo o, tal vez, de forma paralela a este esfuerzo, Ceratizit también se ha visto involucrada en diversas colaboraciones para fabricar ventiladores o máscaras. “De hecho, con la fabricación de ventiladores no solo surgieron herramientas especiales sino que las urgencias, además, nos obligaron a fijar plazos de entrega rápidos que ya hemos asimilado. Se ha invertido en incremento del stock de las herramientas catalogadas de mayor consumo y en bajar el plazo de fabricación de herramientas especiales a 3 semanas”.

También ha surgido la idea de realizar un catálogo para el sector médico. Nos ha resultado fácil porque ya teníamos muchas herramientas y materiales certificados, muchos productos aplicándose en el sector médico y probados en prótesis etc. Además, hemos adquirido ya mucha experiencia en el torneado dinámico (FreeTurn) que, por ejemplo en la fabricación de prótesis aumenta mucho la productividad, porque el ángulo de incidencia de la herramienta puede mantenerse constante en superficies esféricas y eso permite realizar un acabado de mayor calidad y en mucho menos tiempo”. Se trata de una tecnología que requiere cooperación entre el fabricante de la máquina, el del control y el del CAM y la nueva situación ha fomentado esta cooperación más que antes.

La nueva situación también a llevado a Ceratizit a completar el catálogo para e-mobility y ha acelerado el uso de ToolScope en clientes que apuestan por ser más competitivos acogiéndose a la transformación digital de sus empresas. Se trata de una herramienta de monitorización de procesos, que encaja perfectamente con la estrategia de reducir costes a los clientes. Como explica Ramiro Bengochea, “todo esto se ha realizado en tiempo récord, nos ha hecho acelerar ideas que teníamos ya muy presentes, pero que no habíamos puesto en marcha. Y lo hemos podido hacer precisamente por esta estrategia de mantener el capital humano, mantener nuestra energía y nuestro talento internos”.

Como dice el directivo de Ceratizit, “el COVID, para bien o para mal, está suponiendo un acelerador de tendencias y por tanto las tecnologías que antes de esta crisis teníamos en proceso de lanzamiento como el FreeTurn o el ToolScope, van a implantarse en los clientes que mejor gestionen esta crisis antes de lo esperado”.