“Es esencial avanzar en unas reglas de juego homogéneas y justas para el comercio internacional"
Entrevista a Cecilio Peregrín, presidente de Fepex
Coordinador de las áreas de Horticultura y Distribución Hortofrutícola · Interempresas Media
24/06/2025
El máximo representante de la patronal nacional del sector hortofrutícola, la Federación Española de Asociaciones de Productores Exportadores de Frutas y Hortalizas, elegido el 18 de diciembre de 2024, analiza la situación del sector hortofrutícola y sus retos más inmediatos.
Política comunitaria y española: ¿es posible alinear posturas? ¿Qué tal son las relaciones con el nuevo comisario de Agricultura de la UE?
La política de la UE y de la política de la administración nacional ya están alineadas en la mayoría de los temas. Y es natural, puesto que gran parte de la normativa por la que se rige el sector es de origen comunitario y debe adaptarse por la normativa nacional.
Lo que sí debiera alinearse es la postura de ambas administraciones, la comunitaria y la nacional, con la postura del sector productor y exportador y nuestras demandas. Se deberían tener en cuenta cada vez más porque somos un sector prioritario en la agricultura y economía española y esencial para garantizar la seguridad alimentaria.
El último dato de la importancia del sector, procedente de la Subdirección General de Análisis, Coordinación y Estadística del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación: dentro de la producción vegetal en España, que se obtiene de la agregación del valor de la producción total de más de 250 cultivos distintos, los grupos que alcanzan un mayor valor son los hortícolas, con una producción media de 10.930 millones de euros, y los frutales, con 9.846 millones de euros, representando ambos cultivos el 60% de toda la producción vegetal en el periodo 2020-2022.
En cuanto a las relaciones con el comisario, en general, Fepex mantiene un contacto directo con los responsables de la Comisión de las direcciones generales que más tienen que ver con nuestra labor, como por ejemplo la DGAGRI.
La burocracia administrativa frena al campo. Por ejemplo, la falta de materias activas o cuaderno de campo digital. ¿Qué opina?
Desde luego. El marco normativo debe acompañar al desarrollo del sector y no al contrario. Y para legislar de acuerdo con las necesidades del sector, hay que conocerlo. En el caso de la falta de materias activas, el anterior proyecto de Reglamento de uso de productos fitosanitarios de la Comisión Europea mostraba este desconocimiento porque no se puede ser sostenible sin fitosanitarios que nos permitan acabar con las plagas y asegurar la producción.
En este sentido, desde Fepex valoramos el repliegue de la Comisión Europea respecto al proyecto de Reglamento de Uso Sostenible de Fitosanitarios, presentado en junio de 2022 y retirado en febrero de 2024.
Valoramos también que en el documento sobre la ‘Visión de la Agricultura’, presentado en febrero de este año, en el que se reconoce que la retirada de fitosanitarios sin que haya alternativa, puede afectar a la capacidad de la UE para garantizar la producción de alimentos y se propone que hay que estudiar detenidamente cualquier nueva prohibición de plaguicidas si aún no se dispone de alternativas. Esta medida, si se hace efectiva y se traslada a la práctica, respondería a una de las demandas del sector agrupado en Fepex, que considera que la falta de productos fitosanitarios ya está causando un problema grave en las explotaciones.
En cuanto al cuaderno digital de explotación, de momento su aplicación está en suspenso. El Boletín Oficial del Estado publicó, en enero de este año, el Real Decreto 34/2025, de 21 de enero que elimina el carácter obligatorio de la implantación del cuaderno digital en las explotaciones y establece el carácter voluntario, pero sólo de manera temporal y hasta el próximo periodo de programación del Plan Estratégico de la Política Agraria Común, a partir de 2027.
En Fruit Logistica 2025, se firmó un manifiesto en defensa del sector agrario. ¿Qué avances hay con el Ministerio de Agricultura o Bruselas?
El manifiesto va en línea con lo que mencionaba anteriormente: necesitamos una mayor sintonía de las administraciones con el sector. El manifiesto reivindica una mayor cooperación entre las instituciones europeas y el sector agrario. Demandamos una mayor flexibilización y simplificación normativa en la futura PAC y en la legislación medioambiental, temas muy amplios en los que seguimos trabajando.
¿Qué opina acerca de la necesidad de reciprocidad, cláusulas espejo y la competencia desleal de países terceros a la UE?
Son tres aristas del mismo problema. Las importaciones crecen continuamente. En el último año, en 2024 creció un 6% en volumen y un 12% en valor, respecto al año anterior, totalizando 4,3 millones de toneladas y 5.001 millones de euros.
Sin estar en contra de la globalización y del libre comercio, consideramos que está en juego la competitividad de los productores españoles y comunitarios, puesto que debemos hacer frente a la entrada de frutas y verduras cultivadas en países con unos costes laborales, ambientales y sociales muy diferentes a los europeos. Es esencial, por tanto, avanzar en unas reglas de juego homogéneas y justas para el comercio internacional.
Además, la competencia sigue creciendo: Marruecos, Turquía, Egipto, los países sudamericanos… ¿Qué pasará con Mercosur?
Marruecos es el competidor sistémico de una gran parte de la hortofruticultura española. Por un lado, cuenta con nuestro mismo tipo de producciones, el mismo calendario… y por tanto su competencia nos afecta más a que los productores del norte de Europa. Y por otra, cuenta con un apoyo integral de la Comisión Europea, de muchos gobiernos comunitarios, como el español y el francés.
El Acuerdo de Asociación de la UE con Marruecos ha impulsado la exportación hortofrutícola marroquí tanto a la UE como a España. En el caso del tomate, la importación comunitaria procedente de Marruecos ha crecido un 42% en los últimos diez años, pasando de 345.416 toneladas en 2014 a 491.908 toneladas en 2023, (frente a una cuota preferencial de 285.000 toneladas), mientras que, en estos diez años, la exportación española de tomate a la UE ha caído un 43%, descendiendo de 786.598 toneladas en 2014 a 448.004 toneladas en 2023, según datos de Eurostat.
Marruecos cuenta, además, con el apoyo de su gobierno como pone en evidencia el Plan Marruecos Verde, presentado hace años, y que preveía que la superficie de frutas y hortalizas en el Sahara Occidental crecería de las 900 hectáreas actuales a 5.000 hectáreas, lo que supondría un incremento de la producción de las 64.000 toneladas actuales a unas 500.000 toneladas.
En 2020 también se presentó una nueva estrategia de desarrollo agrícola, bautizada como ‘Génération Green 2020-2030’, con la que prevé mejorar Producto Interior Bruto agrícola del país y duplicar la exportación en los próximos diez años, completando el Plan Marruecos Verde.
En cuanto a Mercosur, se considera prioritario, en lo que respecta al sector agrario, un análisis exhaustivo de su impacto sobre los diferentes productos y las zonas o regiones de la UE que resultan más afectadas, estableciendo las medidas económicas compensatorias sobre los mismos.
Nosotros hemos demostrado que podemos competir y mantener buenas posiciones en mercados tan exigentes como Alemania, Reino Unido... Pero las condiciones de competencia deben ser iguales.
Era Trump: ¿cómo afectará al comercio internacional, aranceles…?
En el sector de frutas y hortalizas, el mercado norteamericano es residual. En 2024 las ventas españolas en EEUU se situaron en 32.248 toneladas, el 0.2% del total, situado en 12,3 millones de toneladas y el 0,5% del valor total, que superó los 17.700 millones de euros.
Por productos, el ajo es el principal producto hortofrutícola exportado por España a Estados Unidos en 2024, con 18.015 toneladas, un 4% menos que en 2023, por un valor de 68,6 millones de euros (+2%). Le sigue la cebolla, con 6.381 toneladas y 3,6 millones de euros y el limón, con 2.000 toneladas y 2,8 millones de euros. Destaca también la exportación de caqui, con 1.335 toneladas y 3,1 millones de euros; mandarina, con 1.301 toneladas y 1,4 millones de euros; pimiento con 1.166 toneladas y 3,7 millones de euros y pepino con 1.158 toneladas y 2,4 millones de euros, según datos del Departamento de Aduanas e Impuestos Especiales.
EE. UU. ocupa el puesto número 20 entre los países de destino del sector español. En consecuencia, aunque una guerra de aranceles no es buena para nadie, nuestro sector no es de los que más expuesto está en esa situación.
Y los niveles de exportación son tan bajos porque nosotros ya sufrimos el proteccionismo estadounidense. Para Fepex, la política proteccionista basada en barreras no arancelarias practicada por Estados Unidos ha impedido el desarrollo y consolidación de la exportación española en este mercado, a pesar de su gran potencial de consumo y los elevados precios de las frutas y hortalizas en este país.
Hablemos de relevo generacional...
Un gran problema en general de toda la agricultura, aunque no es el mismo en todos los sectores. En las producciones hortofrutícolas de carácter intensivo nos afecta también, pero yo diría que en menor medida que otros sectores agrícolas. Nosotros, además, generamos empleo no sólo en el campo y en almacenes, sino también incorporando jóvenes profesionales como agrónomos, informáticos, biotecnólogos…
¿Y sobre la escasez de mano de obra?
Es un grave problema, uno de los principales. Por un lado, faltan trabajadores y por otro se está produciendo un crecimiento acelerado de de los costes laborales. Tanto las reiteradas subidas del SMI, como los cambios normativos previstos en los acuerdos de Gobierno afectarán de forma importante a la actividad del sector productor y exportador de frutas y hortalizas y de flores y plantas vivas. Entre estos cambios normativos previstos figuran la reducción de la jornada laboral, la subida del coste del despido vinculándolo a la causalidad y la carta social europea y la revisión del marco normativo de la prevención de riesgos laborales y de salud en el trabajo, medidas que no contemplan adecuadamente la realidad del sector agrícola y está provocando un crecimiento acelerado de costes.
¿La digitalización del campo, la mecanización y la robotización van por buen camino?
Es uno de los retos del sector y en el que ya muchas empresas estamos trabajando. La digitalización ya está incorporada en distintas actividades de la producción y comercialización. La mecanización también, en los procesos en los que es posible y en la robotización estamos dando pasos. Pero requerimos políticas que ayuden a mejorar en estos terrenos puesto que avanzar en ellos requiere mucha inversión y ganas.
A pesar de las lluvias de los últimos meses, no debemos bajar la guardia con la optimización de los recursos hídricos…
Creo que somos especialistas en ahorrar y optimizar los recursos hídricos. Somos los primeros interesados en usar la menor agua posible y obtener la mayor rentabilidad posible. Pero, con el compromiso de todos, es prioritario garantizar la disponibilidad de agua, con un volumen y precio asumible, para mantener la actividad productiva y comercial del sector hortofrutícola.
Un reto permanente sigue siendo promocionar más y comunicar mejor lo que hace el sector. ¿Qué opina?
En ello estamos. Ha habido importantes avances en comunicación en todo el sector en los últimos años. Vemos que, ahora, la mayoría de las asociaciones tienen departamentos de comunicación o agencias externas que colaboran en estos trabajos. Las empresas también le otorgan cada vez más importancia. E incluso, en promoción, nos estamos acostumbrando a ver anuncios televisivos de marcas destacadas del sector, lo que supone una inversión económica importante. En esta línea queremos seguir.



















