Entrevista a Juan Pedro Florido, director de Operaciones de ElPozo Alimentación

Juan Pedro Florido.

Efectivamente, el sector cárnico español facturó el año pasado 41.337 millones de euros, lo que supone un crecimiento cercano al 8% respecto a 2023, con unas exportaciones que subieron casi un punto porcentual (+0,8%), hasta los 11.333 millones, según datos de la Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España (Anice). En cuanto a este año, y partiendo de la base de que nuestro sector se caracteriza por un panorama con desafíos y oportunidades también esperamos cierta estabilidad y que los números sigan creciendo, pero con moderación. A pesar de las buenas cifras, el sector se enfrenta a un momento complejo: el coste de las materias primas es elevado, y venimos de una época con unos precios de la energía muy elevados con lo que nuestros márgenes son realmente ajustados.

Estoy completamente convencido de ello, pero de una manera progresiva, dado que en nuestro país existen 3.481 empresas dedicadas al sector cárnico, muchas de ellas de pequeño tamaño pero que basan su actividad empresarial en la especialización y la cercanía.

Evidentemente, el hecho de que algunos países europeos hayan o estén pasando por la PPA, que nosotros no tenemos, nos hace mejorar nuestra posición en el mercado al tener una competencia más reducida.

Completamente de acuerdo con esta afirmación. Sí no se cometieran comportamientos inapropiados, en nuestro país tenemos una barrera natural entre los Pirineos y el mar, que unida a otros muchos factores hace más complicada la expansión de la PPA que en otros.

Nos estamos centrando en exportar nuestras soluciones a otros países del sudeste asiático. Ha tenido ya algún efecto práctico el acuerdo de libre comercio entre la Unión Europea y Mercosur. De momento, la falta de definición del acuerdo está motivando que no estemos notando ninguna incidencia concreta. En medio de la investigación ‘antidumping’, España y China firmaron en abril un nuevo protocolo para ampliar la lista de productos porcinos, entre ellos estómagos de cerdo muy valorado por los consumidores chinos y una demanda histórica del sector cárnico español. Este acuerdo es una buena noticia para ambas partes. Se trata de un acuerdo que nos beneficia a los dos.

A pesar de que nuestra industria convive con un contexto complejo, creo que España ha demostrado sobradamente su capacidad de transformación en todos los aspectos relevantes, lo que le ha permitido liderar el mercado a escala internacional. Por supuesto que la implementación de la tecnología, y en estos momentos de la IA ha ayudado a que podamos decir con la cabeza bien alta que nuestro país en particular y Europa en general cumple con la normativa de gestión más exigente del mundo, lo que le ha permitido desarrollar su actividad empresarial compaginándola con un respecto absoluto al entorno desde el punto de vista medioambiental, económico y social. La evolución a nivel genético se ha dirigido hacia razas pesadas de alto rendimiento en piezas. En cuanto a la economía circular es intrínseca al propio sector agroalimentario que siempre se ha caracterizado por el aprovechamiento de todos los subproductos derivados de la ganadería y la industria. Es cierto que no hemos sabido trasladárselo al consumidor, que desconoce nuestro nivel de eficacia en este sentido. Además, no se nos debe olvidar que el sector cárnico está contribuyendo fuertemente al apoyo de las zonas rurales, creando puestos de trabajo de calidad y ayudando a que lo jóvenes puedan encontrar una oportunidad laboral en sus zonas de residencia sin tener que emigrar a las ciudades.

Nuestro sector reconoce la importancia del bienestar animal por diversas razones: ética y responsabilidad social, la sostenibilidad ambiental, la consecución de una mayor competitividad y eficacia y sobre todo la mejora de la calidad de vida de los animales. En España contamos con los más altos estándares en bienestar animal, gracias a que hemos apostado por protocolos de certificación pioneros y exigentes. Actualmente, prácticamente la totalidad de las granjas nacionales se encuentran certificadas.

El desafío real para ganaderos e industriales, ante esta avalancha legislativa, es conseguir que nos escuchen y convencer a la Unión Europea de las nefastas consecuencias que tendrá su implantación a nivel social y económico. Evidentemente, el sector tendrá que acatar el cumplimiento de esta nueva legislación, si ésta no se modifica, pero estamos convencidos de que implicarán grandes esfuerzos que pueden convertir a la ganadería y a la industria en insostenibles, al no poder ser competitivas con otros mercados.

En este tema sí que tenemos muchos deberes pendientes dado que un sector minúsculo de la población intenta demonizar nuestra función empresarial, fundamental para facilitar a los consumidores alimentos sanos, nutritivos y de calidad, y es cierto que nos hemos mantenido muy callados ante los constantes ataques. Siendo críticos creo que hemos pecado un poco de modestos. Es verdad, que poco a poco y gracias a la actuación de las distintas asociaciones e interprofesionales se están haciendo campañas informativas que ayudan a ganar transparencia al sector, y que los consumidores conozcan fielmente cómo trabajamos y el papel imprescindible que ocupamos en la necesaria alimentación de los habitantes del planeta. Es cierto que tenemos que trabajar en crear una mayor conexión de la realidad del campo. Nuestro sector se sustenta en la dieta mediterránea, la más saludable del mundo, caracterizada por el consumo variado de alimentos, donde la carne y sus derivados tienen una posición determinante para el mantenimiento y refuerzo de la salud. La proteína animal es necesaria para el buen desarrollo fisiológico y cognitivo del ser humano. Debemos dar luz a través del conocimiento, y contrarrestar aquellas afirmaciones que nos atacan sin argumentación científica o a través de falsedades.

“Tenemos muchos deberes pendientes en reputación dado que un sector minúsculo de la población intenta demonizar nuestra función empresarial”

“En España contamos con los más altos estándares en bienestar animal”