El diseño ha contado con una fase de participación ciudadana
El Secarral, un parque fotovoltaico diseñado con el mínimo impacto medioambiental
La compañía de energías renovables Viridi ha presentado la configuración definitiva del parque fotovoltaico El Secarral, situado entre las localidades de Elche, Monforte del Cid y Agost, una vez finalizada la fase de participación ciudadana y escucha de planteamientos. Ha sido un periodo en el que se han mantenido distintas reuniones con la administración local y autonómica, entidades de la zona, agentes y vecinos para debatir el futuro diseño y entorno del parque solar, así como atender a sus sugerencias.
El Secarral ocupará finalmente 240 hectáreas de terreno poco fértil y generará 108 MW de energía limpia y renovable para abastecer a 56.000 viviendas. Este reajuste sobre el proyecto planteado de manera inicial se debe al proceso de escucha tanto a la administración como a la comunidad local iniciado por Viridi, con el fin de implicar a los habitantes, grupos y entidades de estas localidades donde se ubicará el parque y así permitir que este se convierta en un proyecto de la satisfacción de todos y que tenga un impacto minimizado en el paisaje, la flora y la fauna de la comarca sin, por ello, dejar de ser positivo para la región a nivel socioeconómico y medioambiental.
Actualmente, las 240 hectáreas planteadas se consideran suelos aridisoles, pedregosos y poco fértiles que se encuentran en estado de abandono en su mayoría. La instalación de esta planta fotovoltaica ayudará, durante los treinta y cinco años aproximados que dure el proyecto, a que la tierra se regenere y se limpie de restos de fertilizantes y fitosanitarios que pueden ocasionar alteraciones, como la contaminación de las masas de agua subterráneas o la degradación de la estructura del suelo.
El control de la cubierta vegetal exclusivamente mediante desbroce manual, mecánico o pastoreo junto con la ausencia de aplicación de fitosanitarios de ningún tipo al que se verán sometidos los terrenos durante estos años permitirá la regeneración de vegetación autóctona que protegerá al suelo de la erosión y proporcionará un mantillo, aumentando con ello el contenido en materia orgánica del suelo, para que, una vez se finalice esta actividad energética, se pueda recuperar la actividad agraria en un suelo óptimo y de mejor calidad. Esto será posible gracias a que la instalación de las placas solares no alterará de ningún modo el suelo, ya que las estructuras portantes de los módulos solares quedan hincadas directamente en el terreno, sin necesidad de cimentación, y porque se minimizarán los movimientos de tierra, respetándose la orografía natural y vegetación presente en las parcelas de proyecto.
Otro aspecto destacable del parque es su respeto a los hitos visuales, patrimoniales e identitarios de la zona. Esto se traduce en que el proyecto no afecta a ningún espacio de la Red Natura 2000, ni a ningún espacio natural protegido de los incluidos en la Ley 11/1994, de 27 de diciembre, de Espacios Naturales Protegidos de la Comunidad Valenciana; tampoco se afecta a ningún paraje natural municipal. De igual modo, en la superficie de la instalación no hay elementos clasificados como Lugares de Interés Geológico y se han dejado fuera del parque tierras de cultivo, áreas de vegetación, flora, Hábitats de Interés Comunitario y terrenos susceptibles de sufrir inundaciones y erosiones.
Tras varios estudios e informes, se ha resuelto declaración de impacto ambiental favorable en la que se relacionan medidas que permiten preservar la flora y fauna. Entre las condiciones del programa de vigilancia ambiental se incluye un exhaustivo plan de seguimiento específico de fauna que se llevará a cabo anualmente durante toda la vida útil del proyecto, con objeto de verificar el adecuado funcionamiento de las medidas preventivas, correctoras y compensatorias ejecutadas, así como detectar posibles impactos no tenidos en cuenta durante la evaluación ambiental del proyecto. Adicionalmente, los datos obtenidos serán contrastados con parcelas testigo próximas, lo que permitirá comparar la evolución de las comunidades faunísticas en el ámbito del proyecto y tomar medidas adicionales a las indicadas en dicha resolución y en el estudio de impacto ambiental, en caso de ser necesarias.
La implantación de El Secarral se divide entre tres municipios —Elche, Monforte del Cid y Agost—, lo que permite disminuir el impacto directo a cada uno de ellos. Esto, unido al diseño de las interconexiones de los distintos núcleos de generación mediante líneas soterradas, facilita la integración del parque en el paisaje de la zona.
Para Jorge Clavel, director general de Viridi España, "El Secarral es un parque totalmente alineado con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) que plantean las Naciones Unidas, integrando comunidades sostenibles y la producción de energías no contaminantes y asequibles. Además, va a favorecer un crecimiento económico con la generación de empleo de calidad en zonas rurales, apostando así por un futuro más allá de las grandes metrópolis". Se estima que un parque de esta envergadura va a originar en torno a 350 puestos de trabajo entre empleo directo y empleo indirecto en la región.
Finalmente, Viridi está considerando, junto con distintos actores locales y sociales, opciones adicionales a las ya incluidas en el estudio de impacto ambiental, como son la instalación de cajas nido para cernícalo vulgar, mochuelo europeo y quirópteros para incrementar las sinergias entre la comarca, los habitantes y el parque solar, para que estas 240 hectáreas puedan ser aún más positivas tanto para la biodiversidad como para la economía local.