La jornada de Unef en la Universidad de Murcia afianza el papel de la agrovoltaica en el futuro agrícola
La Unión Española Fotovoltaica (Unef) celebró el 3 de diciembre en la Universidad de Murcia la jornada ‘Sol, agua y campo: agrovoltaica y solar flotante para un futuro agrícola más rentable y resiliente’, en colaboración con el Gobierno de la Región de Murcia, para analizar cómo la agrovoltaica y la fotovoltaica flotante están abriendo una etapa de mayor rentabilidad y resiliencia para el campo murciano. El encuentro puso de relieve el potencial de la región y la importancia de la investigación para consolidar esta tecnología emergente, según informa la UNEF en una nota de prensa.
José Donoso, director general de UNEF en la jornada ‘Sol, agua y campo: agrovoltaica y solar flotante para un futuro agrícola más rentable y resiliente’ en la Universidad de Murcia.
La jornada, inaugurada por el consejero de Medio Ambiente, Universidades, Investigación y Mar Menor, Juan María Vázquez, puso de relieve el liderazgo de la Región de Murcia tanto en agricultura tecnificada como en desarrollo fotovoltaico. Vázquez subrayó el carácter pionero de la agrovoltaica en el territorio: “Hace tiempo que dejó de ser un concepto abstracto para convertirse en una práctica en marcha, con proyectos contrastados y con una comunidad científica y empresarial que colabora de forma real”. Con más de 3.300 horas de sol al año, añadió, la agrovoltaica “no es una opción, sino una obligación”.
José Donoso, director general de Unef, insistió en que agricultura y fotovoltaica no son modelos en conflicto. “Toda la fotovoltaica prevista en el PNIEC seguirá dejando el 99% del suelo agrario para usos agrarios exclusivos. Ambos usos son compatibles y simbióticos gracias a la agrovoltaica”, recordó.
En la misma línea, el director de Estudios y Medio Ambiente de Unef, Martín Behar, destacó que estas tecnologías contribuyen simultáneamente a la reducción del uso del agua y a los objetivos de descarbonización, reforzando la resiliencia del entorno rural.
Resultados científicos que avalan la vinculación entre agricultura y energía
Los expertos participantes coincidieron en el valor estratégico de la agrovoltaica y la fotovoltaica flotante como herramientas para optimizar el uso del agua, reducir costes y aumentar la productividad del suelo agrario.
La investigadora del CEBAS-CSIC, Micaela Carvajal, afirmó que producir alimentos y energía en un mismo espacio “ya es posible”, y reclamó más investigación para comprender mejor los efectos sobre el microclima, la luz disponible y el rendimiento de los cultivos.
Desde la industria, el product manager de la empresa murciana Soltec, Javier Egea, explicó cómo los seguidores solares permiten ajustar la irradiancia que recibe cada cultivo, mientras que Emilien Simonot, de Lightsource BP, destacó que “estamos viendo cómo la agrovoltaica reduce un 30% la evapotranspiración, y eso es mejora hídrica para las plantas”.
En el ámbito de la PAC, la subdirectora general adjunta de Cultivos Herbáceos, Industriales y Aceite de Oliva del MAPA, Inmaculada Carceller, anunció que el Ministerio trabaja en una normativa que establezca requisitos específicos para garantizar la compatibilidad entre agricultura activa y agrovoltaica, más allá de los proyectos singulares financiados por el Idae “o aquellos que definan las CCAA en sus respectivos territorios”.
Casos de éxito: viñedos y olivares como laboratorios reales
Durante la jornada se presentaron ejemplos de proyectos ya en funcionamiento. Así, la investigadora del Instituto Murciano de Investigación Agraria y Medioambiental (IMIDA), Mª Pilar Flores Fernández-Villamil, destacó la utilidad de estos sistemas para cultivos de secano en zonas áridas, donde aportan beneficios ambientales y económicos y subrayó que “son especialmente relevantes en cultivos de secano de zonas áridas y semiáridas ya que constituyen una oportunidad para generar nuevas actividades socioeconómicas y asegurar la continuidad de la actividad agraria”.
En el ámbito vitivinícola, el profesor titular e Investigador de la Universidad Politécnica de Cartagena, Javier Padilla, explicó que la integración de fotovoltaica en viñedos no ha alterado ni la producción ni la calidad de la uva, mejorando además la retención de humedad del suelo.
Por su parte, el catedrático de Tecnología Electrónica de la Universidad de Jaén, Pedro Pérez, señaló que en olivares se ha logrado compatibilizar la producción agrícola con la generación de energía, alcanzando incluso mejoras del 5% en el rendimiento agrícola. “No solo no disminuye, sino que mejoramos la producción, y además generamos energía”.
Las ayudas públicas impulsan el desarrollo agrovoltaico
El papel de las ayudas del Idae fue otro de los puntos destacados. El jefe del Departamento Solar y Autoconsumo, Carlos Montoya Rasero, presentó los recursos disponibles para proyectos agrovoltaicos y flotantes, detallando que el organismo ha destinado más de 87 millones de euros a 73 proyectos, con más de 164 MWp de nueva potencia fotovoltaica y 187 MWh de nueva capacidad de almacenamiento en baterías dentro de la convocatoria Renoinn.
La última mesa, moderada por Soltec, abordó las ventajas de la fotovoltaica flotante en balsas de riego. “La fotovoltaica flotante nació de necesidades agrícolas para evitar evaporación, reducir algas y controlar los gastos energéticos ante la gran variación de precios”, comentó el CEO de Isigenere, Andrés Franco. Además, el CEO y fundador de Nautracker, Eduardo De San Nicolás, subrayó su potencial para impulsar la electrificación y tecnificación del campo.
El presidente de la Federación de Cooperativas Agrarias de Murcia, Santiago Martínez, valoró la jornada como una mirada a lo que será la agricultura del futuro: “Esto es el futuro para que se evapore menos agua, se aligeren los cultivos, y además se intente de todas las formas respetar el medio ambiente”.
Visita a las instalaciones del IMIDA en La Alberca
Visita a la planta agrovoltaica del IMIDA en La Alberca durante la jornada organizada por Unef.
El acto fue clausurado por el director del IMIDA, Andrés Martínez Bastida, quien insistió en la necesidad de “buscar una renta adicional al agricultor, algo que la agrovoltaica ofrece. Pero para eso hay que estar rápidos y hay que ser activos”.
La jornada concluyó con una visita técnica a las instalaciones agrovoltaicas del IMIDA en La Alberca, uno de los proyectos clave de investigación en la región, centrado en horticultura bajo invernadero. Allí, los asistentes pudieron conocer de primera mano cómo se integran los sistemas fotovoltaicos en invernaderos y cómo están influyendo en la productividad, la eficiencia hídrica y la calidad de los cultivos.
