La raza autóctona Xisqueta centra su producción en potenciar la lana de calidad
“Menuda, robusta, con una cabeza pequeña y sin cuernos. Con manchas negras en los ojos (ullerada), las orejas, el hocico y en el extremo las patas”. Así es la raza ovina Xisqueta, un ejemplar autóctono que desarrolla todo su potencial en las comunidades autónomas de Aragón y Cataluña, en las zonas cercanas al Pirineo, en las que es capaz de expresar sus potencialidades. Durante el próximo fin de semana celebrará en la localidad ilerdense de Sort su Concurso Nacional, aunque en los últimos tiempos ha decidido centrarse en el potencial de su lana, un producto que ha conseguido revalorizarse en los últimos años debido a las iniciativas de diferentes grupos.
La asociación sin ánimo de lucro Obrador Xisqueta nació con el objetivo de pagar un precio justo de la lana a los pastores de esta raza autóctona, con el objetivo de revalorizar la producción de lana, mantener viva la tradición de esta producción ovina y adaptarla a los nuevos tiempos mediante técnicas de diseño que exploran su potencial.
La lana de la raza Xisqueta tiene una finura media de las fibras de 28 micras. Un total de diez productores participan en este proyecto.