Los programas de conservación y selección de razas generan riqueza y mejoran la competitividad

Elena Espinosa, ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, presentó el Programa Nacional de Conservación, Mejora y Fomento de las Razas Ganaderas, y el Plan de Acción para su desarrollo, con el que se pone a disposición de los ganaderos y sus asociaciones, diversos instrumentos para avanzar en los programas de mejora, contribuyendo de manera decidida a generar riqueza y a mejorar la competitividad de los sectores ganaderos españoles.

La ministra ha señalado la necesidad de poner en marcha mecanismos que sirvan para la conservación y el uso sostenible de los recursos genéticos, indicando que en la actualidad el 90% de la producción ganadera mundial se basa en 14 especies animales y recordando las recomendaciones de la FAO, que avisan del peligro de extinción del 30% de las razas ganaderas en el mundo y de la desaparición en Europa, durante un siglo, del 50% de las razas ganaderas, estando en peligro de extinción el 40% de las que quedan.

Si bien en España, ha destacado Elena Espinosa, por sus especiales características climáticas, geográficas y hasta culturales, existe una amplia gama de razas ganaderas de todas las especies, en el Catálogo Oficial de Razas de Ganado de España, figuran 178 razas de diferentes especies, de las cuales 150 son autóctonas y de ellas, 123 se encuentran clasificadas en peligro de extinción, razón por la que se debe buscar un equilibrio entre la conservación y la selección de las diferentes razas ganaderas.

En este sentido la ministra ha explicado que el Plan de Acción busca el equilibrio y la flexibilidad entre el mantenimiento del valioso patrimonio genético en España, y las diferencias de rentabilidad en el uso de determinadas razas ganaderas.

Tras resaltar el grado de competitividad y eficacia de las explotaciones ganaderas y la industria cárnica española, que ha pasado de una producción que no cubría las necesidades de la población a una situación excedentaria que ha permitido fomentar las exportaciones, habiéndose superado en 2008 los 2.800 millones de euros, Elena Espinosa ha subrayado también la capacidad de la ganadería española para adaptarse a las diferentes políticas de la Unión Europea.

En este sentido la ministra ha señalado que la actual PAC, basada en los pagos desacoplados, puede y debe ser una oportunidad importante para una reconversión de la ganadería vacuna de carne, la ovina y caprina, indicando que serán más rentables las explotaciones que presenten beneficios antes de las ayudas, para lo que deben disponer de un buen manejo desde el punto de vista de la alimentación, la sanidad y la calidad genética de sus animales.

Así, ha explicado Elena Espinosa, para evitar una reducción de las mismas por abandono de la producción, son necesarias, entre otras medidas, la mejora del nivel genético de la cabaña de reproductores y el impulso decidido de las asociaciones de criadores, contándose para ello con reglamentación nacional, asignaciones presupuestarias y orientaciones en los próximos años en el marco del chequeo médico de la PAC.

La ministra ha resaltado también la importancia de promocionar un modelo basado en la raza, y en el modelo de explotación relacionándolo con el producto final, como punta de lanza de la política comercial de los productos de origen animal, así como la necesidad de avanzar en la mejora de la selección de las razas como uno de los ejes fundamentales de las diversas políticas con incidencia en el medio rural.

Elena Espinosa ha finalizado su intervención instando a los ganaderos y sus asociaciones a participar para desarrollar una política de integración de todas las razas ganaderas en asociaciones y federaciones.