Conflicto entre ganaderos de ovino y de vacuno trashumantes en el oeste de la provincia de León
Tres rebaños trashumantes perviven en los puertos pirenaicos la localidad leonesa de Abelgas, donde las ovejas han sido parte importante de la actividad económica de esta zona.
En la provincia de León existen 145 puertos de estío calificados como puertos pirenaicos dentro de los límites catalogados como montes de utilidad pública. Antiguamente, casi el cien por cien estaban dedicados a ganado ovino. Pero las vacas han ido comiendo terreno y actualmente el 55% de los pastaderos de estos puertos de alta montaña alimentan a ganado mayor, vacuno y equino, y el 43,6% por ovejas. Además, hay 15 puertos sin adjudicar. El ganado vacuno y equino aprovecha además pastos sobrantes y terrenos comunales, según publica Diario de León.
La conflictividad se localiza en la montaña occidental pero no porque los ganaderos sean más litigantes, sino porque es en este territorio de las montañas de Babia, Luna y Omaña donde aún resisten el 80% de las ganaderías trasterminantes y trashumantes. En la montaña oriental sólo queda un puerto en Burón para ovino, otros ocho se sitúan en la montaña central y los 46 restantes se concentran en los municipios de Sena de Luna, San Emiliano, Murias de Paredes, Riello y Cabrillanes.
La conflictividad en los puertos pirenaicos es una realidad conocida por el servicio de Medio Ambiente de la Junta de Castilla y León, gestor de estos aprovechamientos junto con las juntas vecinales. La Asociación Ibérica de Pastores Trashumantes, de la que es secretario el ganadero leonés Rubén Valín, acudió este verano a las altas instancias del Seprona de la Benemérita para pedir ayuda en este conflicto. Asimismo, el ayuntamiento de Sena de Luna aprobó un bando a petición de los dos concejales de UPL para que se colocara en todos los pueblos del municipio “para que se respeten los pastos a los ganaderos de ovino que se los comen las vacas y las yeguas”, afirma Efrén García Fernández.