La nueva presidenta asegura que en un año quieren ‘lavar la cara’ de la IGP del Lechazo de Castilla y León
Guadalupe Tejero, una ganadera palentina de 43 años, asegura en una entrevista concedida a la Opinión de Zamora, que la IGP del Lechazo de Castilla y Léonlleva muchos años dirigida por los mismos y está anquilosada. En su mandato al frente de esta figura, que estl objetivo principal es lavar la imagen que tiene la IGP del Lechazo y transmitir al consumidor, al ama de casa, ya los comercializadores una trazabilidad, que esto es un producto diferenciado, de calidad y que cumple expresamente con las normas establecidas. “Yo estaba dentro y me repateaba porque hasta ahora no estaba pasando eso, no había más que confusión y parecía que con poner una vitola al lechazo ya todo vale. Y no es eso, tienes que dar calidad. Queremos que cuando una persona vea un lechazo IGP en el mercado tenga la completa seguridad de que es una cría de raza churra, castellana u ojalada que ha cumplido con todos los controles de calidad y la normativa”.
Según ella, estos lechazos t ienen que estar criado con leche materna, no con leche de mamantona y cumplir requisitos de engrasamiento, color... Hay unas condiciones exigentes que estipulan todo para que tenga esa frescura y calidad la carne. No cualquier lechazo vale para la IGP. Además -añade- deben provenir de ovejas que pastorean en Castilla y León porque no es lo mismo sacar un lechazo con una madre alimentada con pienso de fábrica y destinada a producción lechera que sacarlo de una oveja que pasta en el campo.
Anuncia además que se está modificando el mapa de producción, “porque ahora mismo había zonas de Castilla y León que tenían ovejas de estas razas, pero por altitud no entraban. Se han hecho estudios y se ha visto que la altitud no influye en la calidad del lechazo. En el plazo de un año estas zonas podrían estar ya en la IGP con lo cual podría haber más productores en el mercado”.
Y asegura que el mayor problema al que se enfrentan es el precio que muchas veces no cubre costes, por lo que el objetivo de la IGP será dar un valor añadido al producto: no saturar el mercado, sino vender el lechazo de IGP a un precio ajustado con su calidad.