Bruselas apuesta por un etiquetado voluntario del país de origen en los productos lácteos
La Comisión Europea ha defendido la opción de promover el etiquetado voluntario de origen para productos alimentarios no transformados con el objetivo de evitar un aumento del precio de venta y de los costes para las empresas y las administraciones si se promoviera un etiquetado de origen obligatorio, según publica Siglo XXI.
“El etiquetado de origen obligatorio a nivel de la UE y, aún más, a nivel de país, es una tarea muy difícil de aplicar en muchos ámbitos de la alimentación y supone un importante aumento de los costes de producción, que, en última instancia, se repercutiría en los consumidores”, ha concluido el Ejecutivo comunitario en un informe en el que evalúa las opciones de etiquetado de origen para los alimentos no transformados, los productos que constan de un solo ingrediente y los ingredientes que representan más del 50% de un alimento.
En un segundo informe, centrado en la viabilidad de introducir diferentes opciones para un etiquetado obligatorio de origen para la leche, los productos lácteos y carnes mayores, el Ejecutivo comunitario también ha concluido que los beneficios no compensan de forma clara los costes y que el etiquetado de origen voluntario resulta la opción más conveniente.