Denuncian "maniobras" de las industrias para bajar el precio de la leche de oveja en el País Vasco
El sindicato EHNE denuncia que la industria quesera “está aprovechando la situación de pandemia” para “maniobrar” con el objetivo de “pagar menos” a los productores de leche de oveja de raza Latxa, a los que además ha “amenazado” con recoger un volumen inferior de litros respecto a la campaña anterior.
En algunos contratos la industria ha propuesto dos precios distintos en función de si la leche es para quesos con denominación de origen u otros y ha establecido un importe del primer 10% o 20% de la producción, un porcentaje que se fija tomando como referencia el volumen del año anterior, mientras el resto del volumen se establece el mismo importe que en 2020. En caso de que haya un exceso de producción respecto a la anterior temporada se pagará igual que el primer tramo, el más barato, señala la organización.

EHNE apunta que la industria ha dirigido estas propuestas “especialmente” a integrantes de la cooperativa Latxa Esnea lo que evidencia, a su juicio, “un intento de ahogar iniciativas colectivas”, con el objetivo de “mantener su posición de dominio a la hora de negociar los contratos”, señala el comunicado.
Asegura asimismo que “existe un acuerdo tácito” entre las industrias por el que “se reparten a los productores” en las tareas de recogida y facturación de la leche, lo que deja “poco margen para negociar a los pastores con otra industria distinta a la que le toca en su ruta de recogida”.
EHNE asegura que la “gran mayoría” de queserías de leche de oveja Latxa, base de la Denominación de Origen Idiazabal y Roncal, han vendido “todo su producto”, por lo que resulta “inverosímil” la reducción de la recogida de leche con el argumento de que hay una menor comercialización y subraya que detrás de esa decisión hay un deseo de “aminorar los costes para obtener un mayor lucro industrial”.