Bernard Vallat (director de la OIE) asegura al recoger un galardón que los veterinarios salvan millones de toneladas de producción animal

El doctor Bernard Vallat, director general de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), tras recibir la Medalla de la Organización Colegial Veterinaria Española de manos de su presidente, Juan José Badiola, reivindicó el trascendental papel que tiene el veterinario en la lucha contra el hambre y el acceso de la población de todo el mundo a las proteínas animales.

Las enfermedades animales, dijo el doctor Vallat en su discurso de agradecimiento por el galardón, generan unas pérdidas de más del 20% de la producción mundial. “El veterinario, a través de su acción, salva millones de toneladas. Y esto hay que comunicarlo. El hambre no se puede soportar en nuestro mundo porque hoy sabemos que podemos pararla en todos los países”.

El director general de la OIE lamentó que la mayoría de los ciudadanos ignore que la presencia del veterinario evita los riesgos alimentarios en un 99% de los casos o que no sean conscientes de la labor de esta profesión en la prevención de las zoonosis. Se mostró partidario de la colegiación obligatoria y de la construcción de Colegios Veterinarios independientes y jurídicamente dotados de atribuciones y autonomía para velar por la garantía de acceso a la profesión y el buen ejercicio profesional. Al respecto, adelantó que la OIE trabaja en la actualidad en la implantación de un programa de educación a nivel mundial que comparta en un 50% temas esenciales como las zoonosis, la salud pública alimentaria, la inocuidad alimentaria, el bienestar animal y otros, y tenga otro 50% marcado por los gobiernos de cada país. Recomendó, por último, a todas las organizaciones veterinarias un esfuerzo titánico en materia de comunicación para acercar la profesión a la sociedad.

La Organización Colegial española decidió, por unanimidad, otorgar la más alta distinción de la profesión veterinaria al doctor Vallat por su eficiente labor al frente de la OIE, el organismo más importante para la Veterinaria en el mundo, y su “inestimable aportación a la profesión veterinaria en el curso de las innumerables actividades desempeñadas a nivel internacional”.

Puede decirse sin temor a equivocación -aseguró Juan José Badiola, presidente del Consejo General de Colegios Veterinarios en la presentación del galardonado- que se honra a la persona que ha sido capaz de encontrar para la OIE el lugar que corresponde y que ésta institución supere a otras organizaciones internacionales en materia de sanidad animal. “Esta medalla -añadió- es la más alta distinción que tenemos. Quizás sea modesta, pero su valor estriba en que no se la damos a cualquiera. Creemos que una de nuestras obligaciones es honrar a los veterinarios eminentes, nacionales o no, y el doctor Vallat es uno de ellos”.

El acto de entrega de la medalla se realizó el pasado sábado en el Paraninfo de la Universidad de Castilla-La Mancha, en Toledo, en un acto al que asistieron presidentes de Colegios Veterinarios, miembros de la Asociación del Cuerpo Nacional Veterinario, altos cargos del Gobierno de Castilla-La Mancha y el representante de España ante la OIE.

CURRICULUM DEL DOCTOR VALLAT

Bernard Vallat (casado, padre de tres hijas) nació en 1947. Hijo de ingeniero agrónomo, se licenció en Veterinaria por la Escuela Nacional Veterinaria de Toulouse (1971), se doctoró y realizó dos postgrados: uno en Veterinaria Tropical (1972) y otro en Alimentación Animal (1973) en el Instituto Nacional Agronómico de París. Completó su formación en 1983 con una especialización en Economía y Administración (1987) y obtuvo un DESS (diploma francés de tercer ciclo) por la Universidad de París X.

Ingresó en la función pública en 1973 en calidad de inspector veterinario. Sus 17 primeros años profesionales transcurrieron fuera de Francia, en el marco de la cooperación multilateral y bilateral francesa en varios países de África Central y el Océano Índico.

A su regreso a Francia, reclamado por el Ministerio de Asuntos Exteriores y de la Cooperación, se encargó de las negociaciones internacionales relativas a la elaboración y el seguimiento de proyectos y dispositivos de asistencia técnica en los países en desarrollo, con frecuencia en colaboración con organizaciones internacionales especializadas.

En 1994 regresó al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación para dirigir la misión de coordinación sanitaria internacional de la Dirección General de Alimentación, donde fue ascendido un año más tarde a jefe de los Servicios Veterinarios de Francia (CVO) con el título de director general adjunto de Alimentación.

En 1997 fue elegido presidente de la Comisión del Código Zoosanitario Internacional de la OIE (Organización Mundial de Sanidad Animal), una de las piezas clave de la organización. En mayo de 2000 fue elegido director general de la OIE. En mayo de 2005 fue reelegido para un segundo periodo. Y en mayo de 2010, en votación secreta y por unanimidad, fue nuevamente reelegido para un tercer mandato.

Durante este periodo, las actividades y la influencia de la OIE en el mundo han aumentado de una manera sin precedentes en la historia de esta organización, creada en 1924, hasta convertirse en el primer y más importante referente internacional en el ámbito de la sanidad animal y la Veterinaria.

El doctor Vallat, además de ser inspector general de Sanidad Veterinaria de Clase Excepcional, es titular de varias distinciones honoríficas francesas, como Oficial de la Legión de Honor, Caballero de la Orden Nacional del Mérito y Oficial del Mérito Agrícola. Posee numerosas distinciones de numerosos países y es miembro de varias academias científicas y veterinarias. Pertenece a la Real Academia de Ciencias Veterinarias de Madrid y está en posesión de la medalla de Oro de la Asociación del Cuerpo Nacional Veterinario.