Embarcaciones de alta velocidad del Servicio Marítimo de Guardia Civil

Las embarcaciones de la clase HS60 son el resultado del trabajo conjunto del astillero gallego Aister y del Servicio Marítimo de la Guardia Civil.

Uno de los principales retos a los que se enfrenta el Servicio Marítimo de la Guardia Civil (SEMAR) es el narcotráfico en el sur de España, el cual, con el paso del tiempo, se ha ido convirtiendo en un problema cada vez más grave y complejo, especialmente en las provincias de Cádiz y Huelva. El Campo de Gibraltar, al representar un enclave geográfico de gran valor estratégico, es el epicentro del narcotráfico, aunque progresivamente se ha ido ampliando el número de corredores por los que se ha detectado la entrada de sustancias ilícitas en España, como medio de acceso a toda Europa.

La forma más común de introducción de la droga en territorio español vía marítima es mediante el uso de embarcaciones semirrígidas de entre 12 y 14 metros de eslora, las comúnmente conocidas como ‘gomas’ o ‘narco lanchas’, capaces de alcanzar altas velocidades debido a que van equipadas con 3 o 4 motores fueraborda para una potencia combinada que se encuentra en el rango de los 1.200 a 2.000 CV.

Desde el SEMAR se ha trabajado durante mucho tiempo en el concepto y posterior desarrollo de una embarcación de interceptación de altas prestaciones que pueda resultar efectiva frente a las embarcaciones de contrabando, teniendo además el hándicap de que los buques y embarcaciones del SEMAR deben cumplir la legislación vigente en cuanto a normativa marítima y convenios internacionales marcados por la Dirección General de Marina Mercante.

Así nació la 'HS60', una embarcación construida en casco completo de aluminio, con propulsión mediante waterjets y equipada con unos sistemas de última generación para dotar de los medios adecuados de seguridad a los miembros de la tripulación.

Características principales de la embarcación

Eslora total (Lt): 17,700 m

Eslora entre perpendiculares (Lpp): 14,770 m

Manga Max. (B): 4,500 m

Puntal (D): 2,400 m

Potencia propulsora: 2 x 1.800 CV

Capacidad de combustible: 2 x 1.750 l

Capacidad de agua dulce: 100 l

Desplazamiento: 26 ton

Las embarcaciones de la Clase HS60 presentan unas dimensiones superiores a las semirrígidas empleadas para tráficos ilícitos. Disponen de un puente interior con cuatro asientos y un puente exterior para una mayor operatividad en situaciones que requieran una visibilidad 360º. El puente exterior dispone de 2 plazas. Para la definición de los asientos se han planteado desde un principio requisitos de máxima seguridad para los tripulantes. A lo largo de la serie se están implementando mejoras en los asientos que van desde la configuración de los mismos hasta el tipo de asiento, reforzado del pedestal soporte, etc.

En lo que se refiere a la propulsión, el sistema empleado son dos motores diésel MAN V12, modelo D2862LE463, con una potencia de 1.800 CV cada uno. Cada motor va conectado a una reductora ZF 3055 y, a través de un eje de transmisión Vulkan Serie 80, a un waterjet Hamilton modelo HTX42.

El casco de la HS60 está fabricado completamente con aluminio de alta resistencia. Las chapas que componen su forro se han calculado en el espesor necesario para soportar impactos de mar a altas velocidades. Su estructura se ha calculado a base de cuadernas transversales con vano de 600 mm, excepto en la zona de proa, la que el vano se aumenta a 750 mm pero con un reforzado mayor en sentido longitudinal y con aumento del espesor de los perfiles estructurales.

Otro de los factores principales para el diseño y la configuración de la patrullera ha sido la distribución de pesos a bordo. Se ha llevado un seguimiento exhaustivo de los pesos a bordo para no penalizar el objetivo de velocidad punta sostenida, así como para optimizar el asiento de la patrullera, el cual es vital de cara a conseguir un correcto trimado durante las fases de aceleración hasta alcanzar el planeo.

En este sentido, una de las mejoras más destacadas, implementada a partir de la tercera unidad de la serie, es el montaje de deflectores en popa. Como resultado del estudio para conseguir la configuración más eficiente posible, se han instalado dos en las bandas y otros dos en la zona de crujía. Las pruebas de mar han demostrado que los deflectores permiten mejorar el trimado desde la posición de reposo hasta el planeo. Así, se ha comprobado que la embarcación levanta la popa durante la aceleración, permitiendo al patrón disponer de una mayor visibilidad por la proa.

En cuanto a los espacios de habilitación, la patrullera dispone de las comodidades básicas propias de un barco de trabajo de esta eslora. En concreto, equipa una pequeña sala con cocina y una mesa de planeamiento (reconvertible en cama), un aseo básico y un camarote para dos tripulantes.

El modelo HS60 está planteado como una serie de 8 unidades de las que, a día de hoy, han sido entregadas 4 al SEMAR. La obtención de las patrulleras se ha proyectado a través de 3 contratos públicos de suministro adjudicados en los años 2022, 2023 y 2024. Está previsto que estas embarcaciones sustituyan a las antiguas unidades del modelo R55 de Rodman Polyships que actualmente continúan prestando servicio en diferentes demarcaciones periféricas del SEMAR.

Este planteamiento va en línea con el proyecto de renovación de la flota del SEMAR, en este caso, de cara a renovar las embarcaciones de alta velocidad. La principal característica de este proceso es el paso de construcciones en Polietileno reforzado con fibra de vidrio (PRFV) a cascos integrales de aluminio. Por supuesto, esta modernización aporta mejoras obvias en lo referente al incremento de la velocidad, cualidades de maniobrabilidad y aumento de la autonomía.

El primer contrato de adquisición de embarcaciones incluía las 2 primeras unidades de la serie. La primera de ellas fue la ‘Río Flumen’, entregada en marzo de 2023. Operada por el Servicio Marítimo Provincial de Algeciras. La segunda fue la ‘Río Corneja’, entregada en verano de 2023, y operada por el Servicio Marítimo Provincial de Huelva.

El segundo contrato salió a licitación pública para 3 patrulleras. De momento se ha recepcionado la ‘Río Iro’, operada por el Servicio Marítimo Provincial de Cádiz, en servicio desde verano de 2024, y la ‘Río Tiétar’, entregada en diciembre de 2024 al Grupo Marítimo del Estrecho. La última unidad de este contrato, conocida como ‘Río Guadalmedina’, se suministrará en mayo de 2025 y será operada por el Servicio Marítimo Provincial de Málaga.

A futuro quedan las 3 patrulleras correspondientes al tercer contrato de suministro. De las cuales la primera unidad se entregará a finales de 2025 y las dos últimas se irán a 2026.

A medida que se han ido entregando unidades se han ido implementando modificaciones al objeto de pulir los pequeños defectos detectados una vez entregada cada nueva embarcación. Esto está permitiendo obtener un producto final mejorado.

Del mismo modo, en la medida de lo posible, se están aplicando las modificaciones que incorpora cada nueva unidad que entra en servicio a las anteriores de la serie, en un proceso continuo de mejora integral de la misma.

Algunas de las mejoras que se han ido implementando con el progresivo crecimiento de la serie HS60 son las siguientes:

• Modificación de las barandillas de proa para dar continuidad a las mismas por ambas bandas facilitando así el paso de la tripulación.
• Modificación de las torretas de ventilación, haciéndolas más bajas y aerodinámicas. Además, se ha modificado su orientación para reducir el ruido en cubierta.
• Montaje de 4 cáncamos de izado que no interfieren el paso en cubierta y facilitan enormemente las operaciones requeridas para la varada de la embarcación.
• Montaje del arco del radar para hacerlo desmontable.
• Cambio de la ubicación de la batería de emergencia de exterior a un punto más resguardado dentro del puente.
• Incorporación de asientos con altas prestaciones para absorber aceleraciones e impactos.
• Incorporación de deflectores de popa para mejorar la estabilidad en navegación y reducir la velocidad de entrada en planeo.