Un estudio alerta sobre la salud de los trabajadores de las diferentes generaciones

La presentación del estudio tuvo lugar en el espacio All in one de Caixabank, en Madrid, durante la celebración de la 5ª edición de ‘Generations Wars’. Considerado como “evento del año sobre diversidad generacional”, este encuentro, organizado por el Observatorio Generación y Talento, ha reunido a directivos de empresas, empleados de las diferentes generaciones y expertos en salud y PRL.
El estudio ‘Salud y Bienestar Intergeneracional en el ámbito laboral’ permite también obtener una visión de los recursos internos y externos que tienen las cinco generaciones de trabajadores, como activos que favorecen la salud de manera positiva. Y también, de los programas que pueden desarrollar las empresas para mejorar la salud y bienestar de sus empleados desde su perspectiva generacional. De hecho, la investigación identifica más de 400 medidas para poner en marcha por las empresas.
Este comité determinó abordar la investigación sobre la Salud y Bienestar Generacional desde el enfoque del modelo Salutogénico. “Este es uno de los aspectos reseñables y diferenciadores del estudio”, según Elena Cascante.
Esta nueva visión promotora de la salud, otorga un enorme rango de actuación en las áreas de recursos humanos, seguridad y salud en las organizaciones, al comprender que la salud es una habilidad que se puede desarrollar, ha explicado José Luis Martínez, vicedecano del área de Psicología de la Facultad de Ciencias Biomédicas y de la Salud, de la Universidad Europea.
Según este modelo, cuantos más recursos externos e internos fuertes tenga cada generación, mayor será su capacidad para generar salud positiva.
Conclusiones del estudio, resumen
Este estudio pone de manifiesto que cuando llegó la pandemia los trabajadores ya venían con una mochila de salud a mejorar, sobre todo con una salud psicológica deteriorada.
Cada generación vive su salud de diferente manera. Por ejemplo, y según este estudio, el gran reto que tienen por delante las generaciones más senior (Generación T y Baby Boomer) tiene que ver con su salud emocional.
Los Tradicionalistas se enfrentan a un nuevo desafío, que es la jubilación, y esto les impacta y genera incertidumbre.
Su salud física es regular, y es una generación que no ha tenido una cultura de prevención como la tienen otras. Son una generación más reactiva ante la enfermedad que orientada hacia la prevención.
“Eso sí, nos encontramos con una generación con una salud mental muy potente, y eso tiene que ver con todas las habilidades que han ido desarrollando a lo largo de su vida. Estamos hablando de los valores, de las tradiciones, de la sabiduría, del compromiso… y también de estabilidad económica. Todo ello les aporta el suficiente equilibrio como para abordar mentalmente bien los retos vitales. Esta generación también le da muchísima importancia a la salud relacional, se apoya muchísimo en la familia y amigos”, explica Elena Cascante.
Quizá la salud laboral es la que viene más afectada. Sienten que de alguna manera no son reconocidos y eso les afecta su autoestima.
En lo psicológico, viven con temor su futuro laboral, lo que les genera un grado de estrés y preocupación.
En lo social, es una generación con un entorno muy estable, que favorece su equilibrio.
“Tenemos que comprender que muchos viven con miedo a no llegar a la jubilación. Sienten que ya no se cuenta con ellos o que no están en los retos más importantes dentro de las organizaciones; que sus carreras han dejado de progresar, y se sienten apartados. También refieren tristeza, porque después de tanto trabajo y sacrificio no tienen el reconocimiento suficiente”, añade Ángeles Alcázar.
La salud psicológica también es el escenario más preocupante de la Generación X. La fuente del estrés que están viviendo tienen que ver con el ámbito laboral. Es una generación con mucha responsabilidad tanto en el ámbito profesional como en el familiar, y no saben cómo armonizar ambos escenarios, y esto les genera frustración y gran ansiedad. La falta de tiempo es su gran demanda.
También les pasa factura la brecha que existe entre las expectativas y la realidad profesional, que repercute sobre la salud laboral. En cuanto a la salud social, valoran su entorno social positivamente, pero su poca disponibilidad temporal, hace que estén limitados en sus relaciones personales.
La Generación Y, por su parte, no manifiesta problemas serios sobre su salud física, simplemente la da por supuesta.
No obstante, manifiestan que el estrés es su principal problema de salud, relacionándolo fundamentalmente con el entorno laboral, elevada carga de trabajo, dificultad para compaginar trabajo, desarrollo profesional y vida personal.
El concepto de equilibrio para ellos es importante, por eso, cuando el tiempo dedicado al trabajo desborda el planificado e invade el resto de su vida, se produce un desequilibrio y deriva en problemas de salud.
Los expertos ven su salud psicología algo más debilitada que la física. Quieren cambiar el mundo y a veces es el mundo quien les cambia a ellos. Viven con poca tolerancia las situaciones que les dificultan su avance profesional y personal, lo que les genera frustración e impaciencia, ya que quieren todo aquí y ahora.
Respecto a la salud social es la más frágil de las tres. Aunque son muy inquietos en sus acciones sociales, en ocasiones chocan con sus empresas ya que no pueden canalizar sus inquietudes sociales por falta de tiempo.
Por otro lado, destaca la alta dependencia de las redes sociales y la falta empatía y conexión con las otras generaciones en la empresa.
Por último, el estudio percibe la salud global de la Generación Z como buena, pero con matices. Su salud física es bastante buena, no solo por su edad, sino porque potencian sus hábitos saludables y quieren alcanzar el canon físico socialmente establecido.
En cuanto a la salud psicológica está más debilitada, por su dependencia de las redes sociales, una búsqueda constante de aceptación y el vivir entornos cambiantes y de gran incertidumbre. Además, se percibe como excesiva la protección de los progenitores que, en muchas ocasiones, provoca inseguridad ante la realidad social y laboral y un desequilibrio en su interacción personal.
Por último, la salud social se balancea en la zona de buena, ya que es una generación muy motivada socialmente y comprometida con su entorno ambiental y social.
¿Qué recursos favorecen la salud de los trabajadores?
Generación Tradicional
- Recursos externos: la familia, a la que le dan mucho valor, es uno de sus recursos fuertes. También tienen mucho significado para su vida, el apoyo social, el ocio, las condiciones laborales y la capacidad económica.
- Recursos internos: esta generación tiene muy interiorizados los valores, la ética y la religión, la resiliencia, la disciplina, la capacidad de esfuerzo y sobre todo el compromiso con la empresa.
Generación Baby Boomer
- Recursos externos: la solvencia económica, la pareja y familia, los amigos, las costumbres y tradiciones y su red de contactos.
- Recursos internos. Destacan como sus recursos fuertes: la resiliencia, el compromiso, la capacidad de trabajo, su experiencia, la sabiduría, la serenidad, su escala de valores y su compromiso con la empresa.
Generación X
- Recursos externos: el recurso externo de la familia y los amigos da sentido y estabilidad a sus vidas y les beneficia ante las situaciones de estrés que manifiestan, potenciando así su salud y bienestar positivo. Por otro lado, el recurso de la experiencia es un valor importante que les ayuda a minimizar el estrés que les genera la exigencia laboral y a equilibrar su vida familiar.
- Recursos internos: el recurso interno de esta generación más positivo es su conocimiento, sumado a sus habilidades sociales. Además, valoran la inquietud y la gran responsabilidad en su trabajo y en su vida como componentes importantes en su crecimiento personal y profesional.
Generación Y
- Recursos externos: identifican el tiempo como el principal recurso para favorecer su salud, dado que su principal problema es el estrés. Valoran también como fortalezas: amigos, familia, trabajo y educación.
- Recursos internos: es una generación espiritual —que no religiosa—, ética y moral, pero no valora la libertad como una fortaleza.
Generación Z
- Recursos externos: las habilidades tecnológicas y el manejo de las redes sociales son sus recursos fuertes para afrontar su vida. Esta generación da mucha importancia a la formación y el conocimiento en su desarrollo personal y profesional, siendo una generación muy bien preparada y cualificada.
- Recursos internos. Los más fuertes son: su capacidad de adaptación a las situaciones que están viviendo profesional y personalmente, la colaboración constante y la creatividad e innovación como apoyo para enfrentarse a este nuevo mundo. También es muy importante la conciencia social, moral y ética.
Generation Wars, “el evento del año sobre salud y bienestar generacional”
Durante Generations Wars 5, Anna Quirós, directora de Cultura y Desarrollo de Caixaban, subrayó la importancia de colocar a la persona en el centro y trabajar la cultura de la diversidad.
La expresidenta de Aespla, Conchita Martín de Bustamante, ejerció de maestra de ceremonias y remarcó el valor diferencial de este estudio y su aportación a las políticas de PRL y RRHH de las empresas.
Según Elena Gazapo, rectora de la Universidad Europea de Madrid: “Este estudio va a ayudar a mejorar la calidad de vida y la salud de las personas en el entorno laboral, por eso, es tan importante”. “La Universidad le aporta el rigor científico y el académico”.
Generations Wars 5 se articuló en torno a 3 mesas de debate: una con expertos, otra con directores de PRL y la tercera con empleados de las diferentes generaciones.
En la primera, representantes de las 5 generaciones que conviven en la empresa —empleados de Correos, Secot, Mapfre, Sandoz y Generali— mantuvieron un diálogo sobre los recursos internos y externos que favorecen la salud y el bienestar de los trabajadores de cada generación, moderador por Javier Dols, médico autor de ‘Tu mejor medicina eres tú’.
En la segunda mesa, directores de PRL de Caixabank (Irene Mariegas), Enagás (Susana Toril) y Generali (Fco. Javier Zubicoa), valoraron el diagnóstico de los expertos sobre la salud y el bienestar generacional, moderada por Antonio Díaz, presidente de Aespla.
Por último, la mesa del Comité de Expertos ha reflexionado sobre cuáles son los objetivos y programas de salud más prioritarios para prevenir y potenciar la salud de cada generación en el ámbito laboral. Moderada por Maite Sáenz, socia directora del Observatorio RH, participaron en esta mesa: Mª Jesús Terradillos, directora de la Escuela Nacional de Medicina del Trabajo - Instituto de Salud Carlos III, y Antonio Cirujano, director técnico del área de prevención de FREMAP.
Por parte de la Universidad Europea, han presentado las conclusiones del estudio los profesores: José Miguel Cachón y Juan Luis González. El profesor Alberto Bellido, por su parte, recordaron los resultados de un segundo estudio sobre el impacto de la pandemia en la salud psicológica y emocional de las diferentes generaciones.