Gaiker desarrolla nuevas tecnologías químicas para reciclar plásticos complejos de difícil tratamiento
El Centro Tecnológico Gaiker, miembro de Basque Research & Technology Alliance (BRTA), avanza en el desarrollo de tecnologías de reciclado químico aplicadas a residuos plásticos complejos como textiles, composites o laminados multicapa, cuya reciclabilidad mecánica resulta limitada. A través del proyecto Complesolv, iniciado en 2024 y financiado por la Diputación Foral de Bizkaia, se investiga la aplicación de procesos de solvólisis y disolución selectiva para convertir estos residuos en nuevos productos de mayor calidad y valor añadido, apostando por un modelo de economía circular.
El proyecto se desarrolla con la colaboración de las empresas Koopera Servicios Ambientales, S.Coop, Mecanizados Martiartu y Trienekens País Vasco, y plantea un enfoque de reciclado avanzado que permita superar las limitaciones técnicas de los métodos convencionales. En lugar de separar los materiales físicos por vía mecánica, el reciclaje químico permite descomponer las estructuras poliméricas y recuperar sus componentes mediante disolventes específicos.
El centro tecnológico Gaiker impulsa nuevas soluciones de reciclado químico para transformar residuos plásticos complejos en materiales de alto valor añadido.
Complesolv se estructura en cuatro fases principales: la caracterización y acondicionamiento de residuos complejos; la investigación de procesos de solvólisis y disolución; la purificación avanzada y control de calidad de los productos resultantes; y, por último, su validación técnica, económica y ambiental. El objetivo es obtener materiales reciclados con propiedades equivalentes al material virgen o incluso con grado alimentario, cumpliendo los requisitos de pureza exigidos por el mercado de materias primas secundarias.
Gaiker defiende que esta línea de trabajo es clave para alcanzar un reciclado infinito de plásticos complejos, reducir la presión sobre los vertederos y minimizar el impacto ambiental de los procesos mediante el uso de disolventes naturales, bajas temperaturas de reacción y aprovechamiento total de productos y subproductos. La iniciativa también contribuirá a generar conocimiento transferible para su futura industrialización, facilitando nuevas soluciones tecnológicas para la valorización de residuos en Euskadi.



























