Blanco pasa revista a las obras del AVE a Valencia
El Ministro de Fomento, José Blanco, ha comprobado el avance de los trabajos de construcción de la línea ferroviaria de alta velocidad Madrid-Valencia para la llegada de este medio de transporte a la capital del Turia, que permitirá conectar ambas ciudades en un tiempo de viaje de en torno a 1h35’ cuando, a finales de 2010, se ponga en funcionamiento el corredor. A bordo de uno de los trenes laboratorio con los que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias chequea el estado de las vías en sus corredores de alta velocidad, Blanco ha recorrido los 34 kilómetros que separan el túnel de La Cabrera (en Buñol) del Nudo Sur de Valencia, y en cuyas obras de plataforma Fomento ha invertido más de 400 millones de euros. El tramo sobre el que se ha realizado este recorrido consta de doble vía de ancho internacional (1.435 mm, con 4,7 metros de entrevía sobre una plataforma de 14 metros de anchura) y sus características
geométricas permitirán la circulación de trenes a una velocidad máxima de 350 km/h.
Para ello será necesario completar además, y entre otras, las tareas de electrificación de la línea en corriente alterna a 25 kV 50 Hz y las relativas a la instalación de los sistemas de señalización y control de trenes, en particular las del sistema estándar europeo, ERTMS. El tramo que ha recorrido hoy el grupo de expertos encabezado por el Ministro de Fomento es una sección constructivamente complicada, que ha obligado a la perforación de 6 túneles con una longitud total de 7,6 km de túneles, y a la edificación de 13 viaductos que suman 3,7 kilómetros. Ambos tipos de estructuras representan un tercio de la
longitud total del tramo.
Beneficios de la actuación
Los proyectos constructivos y las medidas adoptadas procuran la integración de la Línea de Alta Velocidad en el entorno y el medio ambiente, un principio que inspira todas las actuaciones del Ministerio de Fomento, en las cuales se inscriben también las encomendadas a Adif, que propugnan y promueven el desarrollo de un ferrocarril auténticamente sostenible y respetuoso con la naturaleza. Entre los principales beneficios derivados de la puesta en servicio de
la nueva Línea de Alta Velocidad destacan el aumento del confort, al establecerse unas condiciones óptimas de rodadura y trazado, un incremento de la seguridad, con la adopción de tecnologías punta en los sistemas de conducción automática de trenes y ausencia de pasos a nivel a lo largo de toda la línea, y una reducción del tiempo de viaje entre las ciudades conectadas al permitir conexiones directas entre ellas. A este respecto hay que recordar que con la puesta en marcha de la
conexión Madrid-Levante de alta velocidad, todas las capitales de la Comunidad Valenciana, la Región de Murcia y las castellanomanchegas, así como otras ciudades densamente pobladas, contarán con conexiones de alta velocidad, lo que contribuye a mejorar la vertebración territorial.
Financiación
La nueva Línea de Alta Velocidad Madrid-Castilla La Mancha-Comunidad Valenciana-Región de Murcia se integra en el Plan Estratégico de Infraestructuras y Transporte del Ministerio de Fomento (PEIT) para los años 2005-2020. El Ministerio de Fomento, consciente del papel estratégico y dinamizador de esta línea de alta velocidad, ha destinado ya a su construcción una cifra superior a los 5.800 millones de euros y, sólo entre 2009 y 2010, va a invertir en ella otros 4.355 millones. De hecho, este año se han invertido ya 1.575 millones de euros en su ejecución, y antes de que acabe el ejercicio se licitarán obras por importe de 1.113 millones de euros más.
Cabe resaltar a este respecto que los estudios y proyectos de la nueva línea así como la construcción de la plataforma de varios de sus subtramos han sido cofinanciados por Ayudas RTE-T (Red Transeuropea de Transporte).