Revisiones al alza de Rossignol
El fabricante de material de esquí, ha revisado al alza sus previsiones de ventas para este próximo invierno, y entre otras medidas ha decidido contratar más personal en su fábrica de Francia. Rossignol ya había anunciado hace unas semanas que se traía su producción en Taiwan. Toda la fabricación se centra ahora en Europa.
Buenas noticias para los desempleados franceses, puesto que a los 60 nuevos puestos de trabajo que Rossignol creó hace unas semanas para traerse a Francia los 60.000 pares de esquís que todavía se fabricaban en Taiwan, esta semana ha anunciado que vuelve a incrementar su plantilla de su planta de Sallanches (Haute-Savoie) en 40 personas más, dadas las previsiones de ventas para la próxima temporada de invierno, cuya producción comienza en unas semanas, y se deberá comenzar a entregar a las tiendas a partir del mes de Septiembre. La noticia es doblemente buena, puesto que Rossignol ya tenía previsto contratar a 20 personas más, pero finalmente el número se ha doblado.
De todas maneras, de los 40 nuevos puestos de trabajo, 30 de ellos son temporales, es decir, solo se han contratado para estos meses de alta concentración de fabricación, pero aún así, es la mitad que el año pasado, puesto que se han ido haciendo más contrataciones fijas. La empresa ha afirmado que dará prioridad a quien ya haya estado trabajando en la fábrica.
Uno 200.000 pares se fabrican ahora en esta planta de Francia, que ha entrado en un equilibrio en sus cuentas tras haber estado al borde de la quiebra en 2008, cuando arrojó unas pérdidas de 63 millones de euros y tuvo que despedir al 30% de su fuerza laboral en todo el mundo, además de ajustar otras medidas como fijar su plantilla de competición en un máximo de 200 y reducir a la mitad los salarios de sus corredores, perdiendo de esta manera a Lindsey Vonn, quien era la actual ganadora de la Copa del Mundo con Rossignol.
El Grupo Rossignol, cuya sede se encuentra en la localidad francesa de Saint-Jean-de-Moirans, emplea a 1.233 personas en todo el mundo, 700 de ellas en Francia, y el resto repartido en España, Italia o Estados Unidos entre otros países.