La Behobia da la espalda a la crisis en la edición dedicada al público
La Behobia, una de las carreras poulares con más tradición, cumplirá el domingo su edición más multitudinaria e internacional. La carrera nada en la abundancia. Ha abierto sus puertas a 18.444 dorsales, ha incrementado su lista de patrocinadores y el fin de semana movilizará un amplio contingente de aficionados. Los organizadores del Fortuna han querido premiar la fidelidad del público, cuyos ánimos constituyen un ingrediente esencial en el éxito de la carrera popular.
Con la crisis golpeando a diestro y siniestro, la 45ª edición de la reina de las carreras populares vascas llegará el domingo más saneada que nunca. Ha aumentado su número de corredores, pero también de sponsors.
Lo aseguró ayer en la presentación, convocada en el Aquarium, el presidente del Fortuna Enrique Cifuentes: «Nos encontramos inmersos en una crisis económica grave que afecta a personas, empresas, instituciones y a la que prácticamente no escapa nadie. Y sin embargo, nosotros hemos incrementado el número de empresas que nos apoyan. Hemos acusado dos bajas y hemos tenido ocho altas. Hay 65 firmas colaboradoras».
No es lo único que sube. 18.444 dorsales es el nuevo techo de la prueba, tras los 16.254 de 2008. La presencia de mujeres crece un punto, del 14 al 15%, cerca de 3.200. Siguen aumentando los guipuzcoanos (7.381), 2.717 atletas proceden del Estado francés, hay participantes de una quincena de países y «sin hacer campaña» se han triplicado los catalanes (1.522 ).
Para ellos hay novedades. La salida, a las 11.00, se va ampliar por espacio de media hora buscando espacio para el corredor. Hay más avituallamientos (9 puestos), con agua de la red de Txingudi y Añarbe y en vasos de cartón biodegradable. Se añade un puesto de asistencia cerca del Kursaal, un lugar en el que se acusa el cansancio. Las clasificaciones recogerán el tiempo intermedio de los participantes y el dinero recaudado con sus chips va para Ayuda en Acción.
Coincidiendo con la edición dedicada al público «con permiso del cielo, nos gustaría que hubiera más gente que nunca», deseó Cifuentes que confía con una meta especialmente emotiva . La carrera en silla de ruedas, encargada de abrir la fiesta, cumple 25 ediciones. Para celebrarlo estarán 33 sillas y el último podio al completo. El francés Julien Casoli pretende seguir siendo el primero en cruzar la meta. Vuelven Javi Conde, recordman a pie con 1.04 y Joseba Larrinaga o el cantante Serafín Zubiri entre los 36 invidentes.
Javier Imaz, en nombre de Kemen, quiso agradecer al Fortuna su cobertura y sorprendió a Cifuentes con una makila: «Hace años era impensable que personas con discapacidad pudieran hacer deporte en la calle. Desde el punto de vista deportivo es importante, pero desde el terapéutico y social es mucho más».
La Feria del Corredor volverá a instalarse entre viernes y sábado en el Cubo pequeño del Kursaal, donde esperan duplicar las 10.000 visitas del año pasado.