Vivienda ecológica en Galamares: un ejemplo de arquitectura ECCN con sello sostenible
Con certificado energético A+ y una eficiencia global del 99%, esta vivienda demuestra que es posible conjugar el confort interior con un mínimo consumo energético, gracias a un diseño bioclimático y al uso coherente de soluciones constructivas que maximizan la eficiencia de la envolvente.
Diseño pasivo y materiales naturales
La casa se integra en el paisaje con una volumetría sencilla y una orientación cuidadosamente estudiada. Los sistemas pasivos son la base de su comportamiento térmico: grandes huecos al sur para captación solar, protección solar en verano y ventilación cruzada natural.
El uso de materiales naturales como el corcho y el cáñamo desempeña un papel decisivo. Ambos son reciclables, renovables y con una baja huella de carbono, además de ofrecer excelentes propiedades térmicas y acústicas. Gracias a su capacidad de regulación higrotérmica, la vivienda mantiene condiciones de confort constantes durante todo el año, reduciendo al mínimo la necesidad de calefacción o refrigeración artificial.
El resultado es un ejemplo de cómo la bioconstrucción y la arquitectura de bajo impacto pueden ir más allá de la teoría para materializarse en un hogar funcional, contemporáneo y eficiente.
La envolvente: el papel decisivo de las ventanas
En una vivienda ECCN, la envolvente térmica actúa como frontera energética. Por ello, cada elemento debe contribuir activamente a reducir pérdidas y optimizar el balance energético. En el caso de Galamares, el fabricante e instalador Best Window seleccionó el sistema Elegant ThermoFibra Infinity de Deceuninck, en acabado antracita, como solución ideal para las carpinterías exteriores.
Esta elección responde tanto a razones estéticas —la continuidad visual entre interior y exterior— como a criterios de eficiencia energética avanzada. Las ventanas incorporan la ThermoFibra, un refuerzo continuo en fibra de vidrio que elimina la necesidad de acero en el perfil, reduciendo el peso y mejorando el rendimiento térmico.
Fabricadas con PVC 100 % reciclable, estas carpinterías alcanzan valores de transmitancia muy bajos y contribuyen a la estanqueidad de la envolvente, un aspecto clave para cumplir con los exigentes estándares de los ECCN y de la normativa europea en materia de eficiencia energética.
Innovación circular y compromiso medioambiental
La elección de materiales sostenibles no se limita al producto final. En el caso de Deceuninck, la sostenibilidad está integrada en su modelo de producción a través de una estrategia circular que prioriza la reutilización y la trazabilidad.
La compañía cuenta con la certificación RecyClass, que garantiza la procedencia y reciclabilidad de sus materiales, y participa activamente en el Consorcio Passivhaus, impulsando edificaciones de consumo casi nulo en toda Europa. Además, su planta de reciclaje en Bélgica, una de las más grandes del sector, permite reincorporar toneladas de PVC posconsumo en nuevos perfiles sin pérdida de calidad, demostrando que la economía circular es una realidad industrial viable.
Este enfoque integral se alinea con la creciente demanda de productos que reduzcan la huella ambiental de los edificios y faciliten su certificación energética y medioambiental, como BREEAM, LEED o VERDE.
Eficiencia energética y confort interior
El comportamiento energético de la vivienda no depende únicamente de la envolvente. El conjunto del diseño arquitectónico está orientado a maximizar la eficiencia mediante un equilibrio entre aislamiento térmico, inercia y control solar.
La combinación de cerramientos de alta hermeticidad, aislantes naturales y ventanas de altas prestaciones garantiza un consumo energético mínimo, mientras que los sistemas pasivos de ventilación y el aprovechamiento de la radiación solar directa aseguran un confort estable y saludable.
El uso de materiales con baja emisión de compuestos orgánicos volátiles refuerza la calidad del aire interior, otro de los pilares fundamentales de los edificios ECCN y de la arquitectura saludable.
Un modelo replicable para la edificación sostenible
Más allá de su singularidad, la vivienda de Galamares constituye un modelo replicable que demuestra la viabilidad de construir con criterios ECCN sin renunciar al diseño ni a la habitabilidad.
Proyectos como este son especialmente relevantes en el contexto actual de rehabilitación energética en Europa. El parque edificatorio existente —responsable de cerca del 40 % del consumo energético total— necesita soluciones técnicas que permitan alcanzar los objetivos del Pacto Verde Europeo y de la Directiva de Eficiencia Energética en Edificios (EPBD).
En este sentido, los sistemas de carpintería avanzados como los de Deceuninck no solo resultan idóneos para obra nueva, sino que también ofrecen una respuesta eficaz en procesos de rehabilitación, al mejorar la envolvente térmica sin alterar la estética original del edificio. La combinación de reciclabilidad, durabilidad y rendimiento hace posible renovar el parque edificado con criterios de sostenibilidad y economía circular.
Sostenibilidad como estrategia compartida
El éxito de la vivienda ecológica de Galamares es el resultado de una colaboración interdisciplinar entre arquitectos, fabricantes e instaladores comprometidos con una misma visión: hacer de la sostenibilidad una práctica real.
Deceuninck, con presencia en más de 90 países y un equipo de más de 3.700 profesionales, continúa consolidando su papel como socio técnico para proyectistas y constructores que apuestan por un futuro más eficiente y responsable.
Su enfoque combina innovación tecnológica, diseño y compromiso medioambiental, aspectos que hoy definen la nueva era de la construcción ECCN y la rehabilitación sostenible.

























