Plantan en el Botánico un descendiente de los últimos cipreses del Sáhara
El Real Jardín Botánico de Madrid cuenta con un ejemplar de una de las especies arbóreas más amenazadas del planeta, un descendiente de los últimos cipreses del Sáhara que quedan en el mundo y que tienen más de 2.000 años de antigüedad.
El árbol, que se encuentra en peligro de extinción, es originario del altiplano de Tassili n’Ajjer, en Argelia, y su edad milenaria hace que se relacione con los bosques anteriores a la llegada del desierto, informa en un comunicado la Fundación Félix Rodríguez de la Fuente como colaboradora del evento.
Esta especie forma parte hoy de una población arbórea única y aislada, dentro de un entorno declarado Parque Natural y Cultural, Patrimonio de la Humanidad y Reserva de la Biosfera.
El ejemplar ha sido donado por el Instituto de Protección de las Plantas (IPP) de Florencia y en su plantación han participado la directora general de la Fundación Félix Rodríguez de la Fuente, Odile Rodríguez de la Fuente, y el director del Departamento de Árboles singulares de la Diputación de Valencia, Bernabé Moya.


















