Una tesis señala que los acolchados orgánicos del viñedo aumentan su sostenibilidad
Los acolchados orgánicos en el viñedo, como los residuos de poda, la paja y el compost, representan una estrategia valiosa de manejo del suelo en viticultura, ya que incrementan la sostenibilidad del viñedo, mejoran las propiedades del suelo y reducen las consecuencias del cambio climático en la vid.
Esta es la conclusión de la tesis doctoral de Andreu Mairata, quien ha obtenido el grado de doctor por la Universidad de La Rioja (UR) y en la que ha analizado cómo influye la aplicación de acolchados orgánicos en los viñedos en las propiedades físico-químicas del suelo, el crecimiento y la fisiología de la vid, la calidad de la uva y el vino. La tesis titulada ‘Study of different soil management techniques to improve the cultivation of the vine and encourage its sustainability’ le ha valido a Mairata la calificación de sobresaliente ‘cum laude’ con mención internacional al título.
El doctor Andreu Mairata Pons posa con el volumen de su tesis en un viñedo del ICVV en la finca de La Grajera.
Mairata parte de la hipótesis de que los acolchados orgánicos pueden mejorar las condiciones del viñedo al mitigar los efectos del cambio climático y aumentar la sostenibilidad en regiones vitivinícolas amenazadas. Para estudiarlo, ha realizado un ensayo agronómico de cuatro años donde ha comparado tres tratamientos de acolchados orgánicos –residuos de poda, paja y compost– frente a dos prácticas convencionales de manejo del suelo, como son el laboreo bajo hilera y el herbicida.
Los resultados indicaron que los efectos del acolchado orgánico dependen del tipo de acolchado y de las propiedades del suelo del viñedo. Los acolchados orgánicos, especialmente de paja y compost, aumentan la disponibilidad de agua y nutrientes en el suelo, con lo que proporcionan beneficios a corto plazo; mientras que la paja y los residuos de la vid contribuyen a mejoras a largo plazo.
Asimismo, Mairata ha comprobado que la paja y los residuos de poda actúan como una barrera física que reducen eficazmente la presencia de malas hierbas; y el compost promueve un crecimiento excesivo. En este sentido, el compost mejora el crecimiento de la vid y el rendimiento en viñedos en suelos pobres en nutrientes, sin afectar significativamente el estado hídrico o los parámetros fisiológicos de la vid.
Sin embargo, el compost incrementa la conductividad eléctrica en suelos ricos en nutrientes y con mayor contenido de agua, lo que puede limitar la absorción de agua y nutrientes y agravar el estrés hídrico de la vid.
Respecto a las propiedades físico-químicas de la uva, el mosto y el vino, los acolchados orgánicos, particularmente de compost, aumentan las concentraciones de potasio y elevan los niveles de pH en el mosto.
La tesis de Mairata concluye que los acolchados orgánicos favorecen el desarrollo fisiológico de la vid al aumentar su crecimiento y rendimiento sin comprometer la calidad de la uva y el vino. También aboga por realizar análisis periódicos del suelo para ajustar las estrategias de acolchado a las necesidades específicas del viñedo y garantizar un desarrollo óptimo de la vid y una adecuada calidad de la uva.






















