Las razas autóctonas españolas ganan presencia global con ventas de genética a cuatro continentes
Caprigran – Murciano-Granadina
Las exportaciones de genética de la Asociación Nacional de Caprino de Raza Murciano-Granadina (Caprigran) son fundamentalmente de semen, principalmente a países europeos y americanos, como es el caso de Portugal, Italia, Francia, Estados Unidos, México, Brasil, Chile, Guatemala y Venezuela. Además, también se han realizado ventas de animales vivos, con destinos variopintos como Portugal, Italia, Francia, Irán, Arabia Saudí y Venezuela. En total, según datos de la asociación, se trata de más de 8.000 dosis seminales y más de 5.000 animales durante los últimos cinco años.
Estas exportaciones se realizan mayoritariamente a través de convenios con asociaciones de ganaderos en los países de destino para incorporarlos como ganaderos socios de Caprigran. “Nuestro modelo no es vender semen, sino hacer socios a los que acompañar en la gestión de sus granjas. La genética sin gestión no funciona”, explica Javier Fernández, secretario ejecutivo de Caprigran.
Además, Fernández explica el apoyo de instituciones para facilitar las exportaciones: “El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) y las Oficinas Comarcales Agrarias de Granada y Almería en Andalucía han sido cruciales para poder realizar las exportaciones realizadas hasta la fecha. Los controles sanitarios y la documentación que se necesita para realizar una exportación son muy exigentes y, si no lo tienes todo muy bien planificado, directamente no sale la operación. Por ello, el hecho de que una asociación como Caprigran sea capaz de exportar no solo pone de relieve el nivel genético alcanzado por la raza Murciano-Granadina y sus ganaderos, sino también el nivel sanitario de los mismos y de nuestro Centro de Selección y Mejora del Caprino Andaluz, que es donde se elaboran las dosis de seminales de nuestra raza. En este sentido, el apoyo de la Diputación de Granada durante los últimos 25 años ha sido fundamental para poder disponer de unas instalaciones y unos profesionales de primer nivel que nos han ayudado a alcanzar el máximo nivel genético y sanitario”. Además, el secretario ejecutivo de Caprigran resalta las acciones desarrolladas por Livestock Genetics from Spain: “Destacar el papel de LGFS como plataforma de la Rfeagas para la internacionalización de las razas españolas y que nos están brindando una visibilidad y una planificación de ferias nacionales e internacionales que, junto con las misiones inversas apoyadas por el ICEX, nos están permitiendo pasar al siguiente nivel.
Respecto a las limitaciones, una de las mayores es precisamente el aspecto sanitario: “El cuello de botella de las exportaciones es precisamente realizar los condicionados sanitarios (ASE) entre el MAPA de España y los países de destino. Hay muy pocos condicionados sanitarios y en ocasiones nos ha llevado años habilitarlos. En estos momentos estamos pendientes de habilitar varios condicionados sanitarios para poder realizar varias exportaciones de nuestra raza”.
“En Caprigran entendemos que la internacionalización es un objetivo de medio-largo plazo dada la complejidad y diversidad del sector caprino en el mundo. Solo desde el trabajo y buen hacer de nuestros ganaderos y técnicos según nuestro Modelo de Gestión y Programa de Cría podremos hacer ganaderías eficientes y sostenibles que permanezcan en el tiempo. Esa es nuestra misión a nivel nacional e internacional y en ello estamos focalizados los 365 días del año”, concluye.
Cabrama – Malagueña
Las explotaciones integradas en la Asociación Española de Criadores de la Cabra Malagueña (Cabrama) han realizado exportaciones de animales vivos, con destino a países como Italia, Portugal, Emiratos Árabes Unidos y Marruecos. Hay demandas procedentes de otros países, pero lo cierto es que no se han podido llevar a cabo esas operaciones por los requisitos sanitarios exigidos por las administraciones de los diferentes países.
Hasta el momento, se han exportado únicamente animales vivos, estando en trámite la calificación sanitaria del centro de sementales para poder realizar exportación de semen al exterior. En total, en los últimos cinco años se ha enviado alrededor de un millar de animales.
Las exportaciones realizadas han sido a título individual por parte de ganaderos, sin contar con ninguna colaboración institucional.
“La mayor dificultad que encontramos son los diferentes requisitos sanitarios que piden los países de destino, además de las cuarentenas previas a la salida de la partida de ganado”, señala Carmen Lara, secretaria ejecutiva de Cabrama.
Además, la asociación de Cabra Malagueña prevé que en los próximos años pueda haber una aceleración de la exportación de genética al exterior. “Desde el año 2024, formamos parte de Livestock Genetics from Spain (LGFS), la plataforma creada en el seno de Rfeagas, con el objetivo de la venta de animales y material genético de las razas autóctonas. La cabra Malagueña posee una gran rusticidad, lo que le confiere una capacidad de adaptación a los diferentes climas, lo que la hace una raza muy demandada en los diferentes mercados”, apunta Lara.
Acriflor – Florida
Las exportaciones realizadas de ejemplares de raza Florida inscritos en Libro Genealógico se han realizado a diferentes destinos como son Portugal, Francia, Italia y Grecia en los tres últimos años. En concreto, el tipo de material genético exportado ha sido tanto de animales vivos, caso de Italia, Francia, Portugal y Grecia, y dosis seminales con destinos a Grecia y a Portugal. Así, el número de ejemplares vivos exportados en los últimos 5 serán rondan en torno a los 1000 ejemplares. Sin embargo, el número de dosis seminales no supera las 300 dosis.
En el caso de animales vivos, las operaciones se realizan en la mayoría de los casos a través de contactos ganaderos principalmente. Sin embargo, en el caso de material genético a partir de dosis seminales, las operaciones se han realizado a través de empresas dedicadas a la comercialización de genética y ganaderos de mayor volumen en el país destino.
Para realizar estas exportaciones se cuenta con el apoyo de diversas instituciones, como refleja María Dolores López Fariña, secretaria ejecutiva de la Asociación Nacional de Criadores de Cabra Florida (Acriflor): “El apoyo recibido ha sido total tanto a nivel de las entidades públicas administrativas como puede ser el MAPA/ICEX y también entidades a las que pertenecemos como es la Rfeagas. Cabe decir que el apoyo ha sido muy necesario, pero es una necesidad que los procedimientos administrativos deben reducirse, ya que supone mucho trabajo y enlentece la exportación del material genético al exterior”.
“La dificultad principal es contar con entidades que conozcan en profundidad los procedimientos y asesoren de los mismos ya que como decía anteriormente, conocer los protocolos administrativos conlleva mucho trabajo y pérdida de tiempo, lo que finalmente conduce a desanimar al cliente y en ocasiones no llegar a finalizar la operación, no dependiendo del trabajo que realizamos desde las asociaciones de criadores”, añade la secretaria ejecutiva de Acriflor.
Actualmente la asociación cuenta con nuevas peticiones de material genético, concretamente de dosis seminales cuyos destinos son Colombia y Panamá.
“Es importante reiterar la necesidad de contar con entidades y personas que conozcan los procedimientos de exportación en su totalidad, así como, minimizar los trámites administrativos para acelerar los tiempos. Todo esto va acompañado de implantar programas sanitarios oficiales en las diferentes comunidades autónomas de España, destinando recursos para avanzar en otras enfermedades de especial importancia en las exportaciones. Esto permitiría contar con mayor número de explotaciones con nivel sanitario que permitan abastecer el mercado el exterior, ya que actualmente desde Acriflor no hemos sido capaz”, asegura López Fariña.
Acrimur – Murciano-Granadina
La Asociación Española de Criadores de la Cabra Murciano-Granadina (Acrimur) ha realizado envíos de animales para vida, embriones y semen a diferentes destinos, englobados en varios continentes. Así, han sido significativas las exportaciones a países asiáticos (Arabia Saudí, Emiratos Árabes Unidos, Qatar y Uzbekistán), africanos (Marruecos, Argelia, Sudán, Guinea Ecuatorial), americanos (Cuba, Venezuela, Perú y México) y europeos (Italia, Francia, Grecia y Alemania). En total, en los últimos cinco años se han enviado un total de 10.120 animales vivos, 1.000 embriones y 500 dosis de semen. En el futuro, se espera poder ampliar a otros países de Oriente Medio y América del Sur, además de determinados destinos al este de la Unión Europea.
Las operaciones se han cerrado con ganaderos individuales de los países de destino, pero también con centros de mejora genética y empresas privadas, e incluso con gobiernos de los diferentes países. Jorge Castillo, secretario ejecutivo de Acrimur, explica los apoyos que tiene en España para realizar las exportaciones: “El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación y Rfeagas nos ayudan a continuar con la expansión de nuestra genética y colaboran en los contactos internacionales. Actualmente estamos en Livestock Genetics from Spain (LGFS), que nos ayudará a nuevas exportaciones”.
Respecto a las dificultades para realizar las ventas, Castillo da su punto de vista: “Necesitamos ayudas para analíticas sanitarias y agilizar los condicionantes sanitarios para nuevos países y que sean menos costosos económicamente a la hora de hacer las pruebas previas a la exportación”.
“La raza Murciano-Granadina tiene un gran potencial productivo y excelente rendimiento quesero óptimo para desarrollar el programa genético en España. Además, los ganaderos puedan utilizar la venta de genética como sostenibilidad de las explotaciones. La exportación de la genética de la cabra Murciano-Granadina nos sirve para seguir siendo una referencia internacional en el sector caprino”, concluye Castillo.
Centro de Sementales de Majorera
La puesta en marcha hace aproximadamente un año del Centro de Sementales de Majorera, ubicado en la isla de Fuerteventura, ha sido un paso muy significativo para esta raza caprina autóctona de Canarias.
Aunque todavía no se ha comenzado la exportación de material genético, lo cierto es que Majorera puede ser otra raza que tenga una vocación internacional. Ahora, con el centro de testaje ya tiene la infraestructura suficiente para arrancar esta nueva perspectiva.








