El nuevo reto de las estaciones de servicio: bienestar animal y movilidad responsable
Ignasi Solana Vinyoles, secretario general Aedpac, fundador de Itvet y consejero delegado de Pets2B
20/11/2025En este nuevo paradigma, las estaciones de servicio se perfilan como un espacio clave para garantizar una experiencia de viaje más segura, saludable y sostenible también para quienes viajan acompañados de sus mascotas hacia una movilidad más humana y respetuosa con el bienestar animal
Un cambio de paradigma en el nuevo perfil del cliente. El usuario interespecie.
En España, hay más de nueve millones de perros y más de siete millones de gatos registrados, una cifra que refleja una realidad demográfica y social consolidada que crece año tras año en todo el mundo. No se trata de una tendencia o una moda pasajera. Más del 40% de los hogares convive con al menos un animal de compañía. Y cada vez son más los que los integran en su vida cotidiana: vacaciones, escapadas o trayectos de trabajo.
La implantación de espacios ‘pet-friendly’ es perfectamente viable si se aborda con criterio y responsabilidad, atendiendo a las obligaciones en materia de prevención de riesgos laborales, higiene, mantenimiento, convivencia y responsabilidad civil.
En la actualidad las principales empresas de transporte, ferrocarriles, líneas aéreas, metros o transporte público e interurbano, han adaptado sus normativas para permitir la admisión de animales de compañía.
Actualmente, en muchos puntos de nuestra red viaria, observamos con frecuencia un panorama poco edificante, cuando no peligroso, cuando los usuarios del automóvil aprovechan la parada para ofrecer un rato de esparcimiento a sus mascotas en cualquier zona dentro del espacio o entorno inmediato a las áreas de repostaje y de las carreteras con el peligro que supone para personas y animales.
Marco normativo y adaptación responsable
Algunas de las normativas que regulan el funcionamiento de las estaciones de servicio —como la ITC MI-IP 04 del Reglamento de Instalaciones Petrolíferas o la normativa de higiene alimentaria (Reglamento CE 852/2004)— fueron redactadas mucho antes de la aprobación de la Ley 7/2023 de Bienestar Animal, y no contemplaban aún la realidad actual de la convivencia con animales de compañía.
En cualquier caso, y como ya ocurre en otros sectores como los hoteles o los centros comerciales, la implantación de espacios ‘pet-friendly’ es perfectamente viable si se aborda con criterio y responsabilidad, atendiendo a las obligaciones en materia de prevención de riesgos laborales, higiene, mantenimiento, convivencia y responsabilidad civil.
Con una gestión adecuada y un diseño de espacios seguro y diferenciado, no existen impedimentos técnicos o legales para avanzar hacia una red de estaciones de servicio más inclusivas y coherentes con la nueva cultura de bienestar animal.
Estas iniciativas, además de mejorar la seguridad y el bienestar animal, amplían el público objetivo de las estaciones de servicio, favorecen la fidelización emocional y refuerzan la reputación de las marcas ante una sociedad cada vez más sensible a la sostenibilidad y la inclusión.
La ausencia de zonas definidas y seguras evidencia la necesidad de una regulación clara y homogénea, como ya ocurre en países más avanzados en materia de movilidad ‘pet-friendly’, como Estados Unidos.
El modelo americano: servicio, fidelización y responsabilidad.
Compañías del sector en Reino Unido, Alemania, Francia, Italia o Estados Unidos han entendido que atender las necesidades de los animales de compañía no es un capricho, sino un factor de fidelización y una extensión natural del servicio al cliente que ha virado el perfil de los ocupantes del vehículo que accede a sus instalaciones.
Además de zonas de paseo valladas (‘dog parks’), incluyen fuentes caninas, dispensadores de bolsas higiénicas (‘doggy bags’) y señalización específica. Estas áreas no solo aportan comodidad al usuario, sino que refuerzan la imagen de marca, la viralización en redes sociales y la vinculación emocional con los viajeros.
Pero hay algo más profundo: la inclusión de espacios ‘pet-friendly’ en estaciones de servicio responde también a una visión moderna de la responsabilidad social corporativa (RSC) y de las políticas ESG (Environmental, Social & Governance). Facilitar el bienestar animal forma parte de una gestión más ética del entorno, alineada con el concepto ‘One Health’, que integra la salud humana, animal y ambiental como dimensiones interdependientes.
Los fabricantes de vehículos apuestan por el vigoroso mercado ‘pet-friendly’
En paralelo, varias marcas del sector automovilístico han empezado a diseñar vehículos y accesorios orientados a los usuarios ‘pet-friendly’, conscientes de que viajar con animales de compañía es ya una realidad estructural de la movilidad.
Land Rover y Jaguar, por ejemplo, ofrecen sus conocidos ‘Pet Packs’, con rampas de acceso, fundas protectoras, separadores de carga y cuencos portátiles, mientras que Volvo incorpora en sus ‘accessory packs’ divisores de maletero, arneses de seguridad y alfombrillas impermeables.
Subaru también ha desarrollado versiones de sus modelos familiares con tapicerías lavables, ganchos de sujeción para transportines y sistemas de climatización trasera pensados para animales.
Los principales fabricantes ya integran el bienestar animal como parte del diseño y la experiencia de viaje, una tendencia que las estaciones de servicio deben acompañar con espacios y servicios acordes a esta nueva movilidad.
Bienestar animal y normativa: una obligación creciente
Más allá de la tendencia o la imagen, existe también un componente normativo que las estaciones de servicio deben considerar. La Ley 7/2023 de protección de los derechos y el bienestar de los animales recuerda que los perros no deben permanecer encerrados en vehículos durante periodos prolongados, especialmente en condiciones de calor, ya que puede afectar gravemente a su salud.
Disponer de un área segura donde el animal pueda salir, moverse y beber agua no solo mejora la experiencia del cliente, sino que reduce el riesgo de incumplimientos y sanciones en el marco de la nueva legislación.
Oportunidad para el sector: movilidad más humana y sostenible
Integrar servicios ‘pet-friendly’ en estaciones de servicio no requiere grandes inversiones, pero sí una planificación coherente y un compromiso visible. La creación de zonas caninas delimitadas, con materiales higiénicos, dispensadores, puntos de agua y señalización adecuada, constituye un paso sencillo hacia la certificación ‘pet-friendly’. Una apuesta por una movilidad más humana y sostenible para todos.
Una ‘start-up’ española crea la primera certificación profesional veterinaria para espacios y servicios al viajero ‘pet-friendly’ en el sector de movilidad
En España, ha nacido una iniciativa pionera en Europa, Itvet (Inspección Técnica Veterinaria) que ha desarrollado durante dos años, el primer protocolo de certificación de áreas de descanso y estaciones de servicio ‘pet-friendly’ que cuenta con el respaldo y la colaboración de entidades como la patronal empresarial veterinaria española Ceve, la Facultad de Veterinaria de la Universidad Autónoma de Barcelona, y con la Dirección General de Bienestar Animal en la difusión de la campaña Patrac sobre tenencia responsable y protección animal, entre otras.
Su modelo de certificación, desarrollado por un equipo multidisciplinar de veterinarios, arquitectos y paisajistas especializados, establece criterios profesionales para el diseño, acondicionamiento y supervisión de espacios y servicios destinados al bienestar animal en estaciones de servicio y entornos de transporte.
Gracias a este enfoque integral, ITVET ofrece un sello de calidad que garantiza que las zonas ‘pet-friendly’ cumplen con los principios de bienestar animal, sostenibilidad y movilidad responsable, posicionando a las estaciones de servicio certificadas como referentes de innovación y compromiso social.
La movilidad ‘pet-friendly’ no es una moda, sino una evolución natural del concepto de servicio. En un nuevo contexto en el que las personas viajan con sus animales como miembros de la familia, las estaciones de servicio tienen la oportunidad de ser pioneras en una tendencia que une confort, compromiso social y cumplimiento normativo.
Las gasolineras que apuesten hoy por este modelo estarán mejor posicionadas mañana como espacios de inclusión, bienestar y responsabilidad compartida hacia una movilidad más humana, sostenible y respetuosa con el bienestar animal.






















