"En un contexto multienergético, el hidrógeno desempeña un papel fundamental en el transporte pesado, la larga distancia y las aplicaciones industriales de alta densidad energética"
Entrevista con Hugo Rigor, director de Transición Energética en el Grupo Petrotec
Hugo Rigor, managing director de Hellonext y director de Transición Energética en el Grupo Petrotec.
En este escenario, el Grupo Petrotec se posiciona como un actor de referencia gracias a su experiencia industrial en el ámbito del downstream y su decidida apuesta por las energías alternativas a través de su filial Hellonext. Con más de cuatro décadas de trayectoria, la compañía ha desarrollado tecnologías propias para estaciones de hidrógeno, como el sistema de control CORE H2 y el dispensador AXON H2, integradas en la nueva HRS de CaetanoBus en Ovar, considerada una de las más avanzadas de Europa. Hugo Rigor, managing director de Hellonext y director de Transición Energética en el Grupo Petrotec, explica en esta entrevista cómo Petrotec está trasladando su conocimiento histórico en combustibles líquidos al diseño de soluciones multienergía que integran hidrógeno, electricidad y combustibles tradicionales para afrontar la movilidad del futuro.
La nueva HRS de CaetanoBus se ha presentado como un hito estratégico para Petrotec. ¿Qué representa exactamente este proyecto dentro del plan de crecimiento del grupo en el ámbito de las energías alternativas?
El Grupo Petrotec, a lo largo de sus 42 años de actividad, ha construido una posición sólida como referencia internacional en el ‘downstream’, mediante el desarrollo y la fabricación de dispensadores de combustible, sistemas de pago, soluciones de automatización y tecnologías de gestión de forecourt y ‘wetstock’. Ese legado de ingeniería e innovación industrial ha sido determinante para la evolución natural del grupo hacia las energías alternativas, manteniendo su compromiso con la excelencia técnica y la fiabilidad operativa.
En los últimos años, siguiendo la transformación estructural del sector energético, el Grupo ha ampliado su portafolio a través de Hellonext, su filial dedicada a la movilidad eléctrica, el almacenamiento de energía y el hidrógeno. Hellonext representa la convergencia entre el conocimiento histórico del grupo y la apuesta estratégica por la descarbonización de la movilidad, integrando tecnología de carga rápida (DC), sistemas de gestión digital y soluciones para el suministro de hidrógeno.
En este contexto, la HRS de CaetanoBus, instalada en Ovar, constituye un hito estratégico y tecnológico para el Grupo Petrotec. Es el primer proyecto que integra de forma completa los dos bloques tecnológicos de desarrollo propio que son esenciales en una estación de hidrógeno: el CORE H2, responsable de las funciones de control, compresión y seguridad del sistema, y el AXON H2, el dispensador que asegura la interfaz directa con el usuario. Ambos fueron concebidos y desarrollados íntegramente por la ingeniería del Grupo Petrotec y fabricados en sus unidades industriales en Portugal, demostrando su capacidad para dominar todo el ciclo tecnológico, desde el diseño y la automatización hasta la producción y la integración en campo.
Por ello, este proyecto tiene un valor simbólico y estratégico muy fuerte. Es la materialización de una estrategia a largo plazo: transformar a Petrotec en un grupo energético integrado que combina su experiencia industrial acumulada en el ‘downstream’ con la innovación necesaria para liderar la movilidad y la energía descarbonizada del futuro.
El proyecto se define como la “culminación de un esfuerzo estratégico”. ¿Qué criterios llevaron a Petrotec a apostar decididamente por el hidrógeno? ¿Cuánto tiempo lleva desarrollando capacidades específicas en este ámbito y cómo se ha estructurado esa inversión tecnológica interna?
La apuesta de Petrotec por el hidrógeno surge de una visión estratégica a largo plazo, orientada a cubrir de forma completa las soluciones de movilidad del futuro. Durante más de cuatro décadas, Petrotec ha construido una sólida reputación en el ‘downstream’, en el desarrollo de tecnologías y soluciones para el ‘retail’ de combustibles, y desde hace varios años ha ampliado esa competencia al ámbito de la movilidad eléctrica, con tecnologías de carga rápida disponibles en el mercado desde hace más de cuatro años.
Sin embargo, creemos que la transición energética no se logrará mediante una sola tecnología o vector energético. No existe una ‘bala de plata’. Al igual que hoy coexisten diferentes combustibles para responder a distintas necesidades de movilidad, entendemos que el futuro será igualmente multifacético. Existen realidades operativas, logísticas y geográficas muy diversas, y precisamente esa complejidad exige múltiples soluciones energéticas complementarias.
En este contexto, el hidrógeno desempeña un papel fundamental, especialmente en el transporte pesado, la movilidad de larga distancia y las aplicaciones industriales que requieren alta densidad energética y tiempos de repostaje reducidos. Por otro lado, la presencia geográfica del Grupo Petrotec en varios mercados fuera de Europa, con diferentes perfiles energéticos, ha reforzado la convicción de que el hidrógeno tendrá un papel relevante en el portafolio de soluciones de movilidad y energía del futuro.
El desarrollo de nuestras tecnologías de hidrógeno comenzó hace más de cuatro años, mediante una inversión completamente orgánica, con capital propio, y una apuesta continua por la cualificación de los equipos, el refuerzo de las competencias internas y el aprendizaje junto a socios tecnológicos de referencia. Fue un proceso estructurado que combinó investigación aplicada, desarrollo experimental y prototipado industrial. El resultado es hoy visible en el lanzamiento de tecnologías propias, como el sistema de control y compresión CORE H2 y el dispensador AXON H2, que representan la culminación de un esfuerzo tecnológico e industrial desarrollado íntegramente por el Grupo Petrotec y preparado para competir a escala internacional.
Han señalado que la instalación de Ovar es una de las más avanzadas de Europa. ¿Podría detallar las características técnicas que la distinguen frente a otras HRS existentes?
La HRS de Ovar se destaca por una arquitectura de seguridad en capas, diseñada para operar en estado seguro por defecto. La lógica de control es redundante y realiza enclavamientos automáticos al detectar desviaciones, aislando bancos de almacenamiento y despresurizando de forma controlada. La detección es multimodal —fugas, gas H₂ y llama— y se coordina con ventilación forzada y procedimientos de degradación segura, reduciendo la dependencia de la intervención humana y elevando el nivel de seguridad operativa.
En el dispensador de última generación (AXON H2), desarrollado íntegramente por el Grupo, la experiencia del usuario y del mantenimiento ha sido tan importante como la precisión metrológica. El equipo está preparado para H35 y H70, admite hasta dos puntos de suministro (hasta cuatro mangueras) y puede integrar gestión térmica con preenfriamiento, garantizando repostajes rápidos, repetibles y sin comprometer la integridad de los depósitos.
Proceso de abastecimiento de hidrógeno en vehículo pesado.
La operación digital se basa en un SCADA con telemetría en tiempo real, autodiagnóstico y análisis de eventos. Esto permite mantenimiento remoto y predictivo (parametrización y firmware ‘over-the-air’ (OTA), alarmas inteligentes, soporte 24/7), mejora los tiempos de respuesta y reduce el Opex al minimizar desplazamientos.
Por último, la modularidad: la estación está organizada por bloques funcionales —compresión, acondicionamiento, dispensado— y por bancos de almacenamiento en cascada. Esta arquitectura permite ampliar capacidad, presión y caudal sin rediseñar la instalación, mientras la lógica de priorización entre bancos reduce ciclos del compresor y pérdidas por ‘venting’.
En suma: seguridad activa y redundante, dispensador de alto nivel, operación digital con mantenimiento remoto y una base modular escalable hacen de la instalación de Ovar un referente en su categoría.
El sistema de control CORE H2 y el dispensador AXON H2 son tecnologías propias. ¿Cómo se desarrollaron internamente y qué ventajas operativas o de mantenimiento ofrecen al operador?
El CORE H2 y el AXON H2 fueron desarrollados internamente por el Grupo Petrotec por equipos de mecánica y fluidos, electrónica, automatización y software, en coordinación con el área de Servicios y Mantenimiento, desde la definición de requisitos hasta las pruebas en campo. La seguridad se abordó desde el diseño —con análisis de riesgos y validaciones de enclavamientos— para garantizar un estado seguro por defecto y una respuesta coordinada ante anomalías.
El AXON H2 es modular y ‘hot-swap’, con acceso frontal que simplifica sustituciones y calibraciones. Su interfaz, basada en comunicación en tiempo real entre dispensador y vehículo y en protocolos estándar de la industria, ofrece una experiencia más interactiva, intuitiva y segura. En operación, el diagnóstico remoto, el registro de eventos y las actualizaciones OTA reducen paradas y sustentan el mantenimiento predictivo.
La arquitectura es escalable: el CORE H2 permite ampliar almacenamiento, compresores y líneas; el AXON H2 admite hasta cuatro mangueras y dos puntos, e integra comunicación mediante protocolos estándar del sector.
¿Qué papel tiene la conectividad remota y el mantenimiento predictivo en la gestión de estaciones de hidrógeno, especialmente en entornos industriales críticos como el de CaetanoBus?
La conectividad remota y el mantenimiento predictivo son hoy el eje central en la gestión de cualquier HRS de referencia. Al transformar la estación en un activo IIoT, todos los subsistemas —compresión, preenfriamiento, almacenamiento y dispensadores— envían telemetría continua (presiones, temperaturas, caudales, ciclos y consumo energético).
Esa información se procesa localmente (‘on the edge’) por los controladores de la propia estación —PLC/RTU/SCADA— para la toma de decisiones de seguridad inmediatas, sin depender de la nube: si surge una anomalía (fuga, sobrepresión, llama o temperatura fuera de rango), la lógica local cierra válvulas, detiene compresores, activa la ventilación y detiene el repostaje en milisegundos.
En paralelo, los datos se envían a la nube para análisis de tendencias, modelos predictivos e informes. Este modelo permite detectar desviaciones tempranas, planificar intervenciones fuera de ventanas críticas y mantener el estado seguro por defecto, aumentando la disponibilidad y reduciendo los tiempos de inactividad.
Además, optimiza el OPEX: los algoritmos ajustan los ciclos de compresión y el T40 a la demanda real (en caso de uso de refrigeración del hidrógeno), a las tarifas energéticas y al nivel de inventario, pudiendo integrarse con BESS para ‘peak-shaving’.
La calidad del repostaje mejora con la verificación continua de conformidad (H35/H70 y perfiles J2601), estabilizando los tiempos de llenado y protegiendo los sistemas de los vehículos.
Operativamente, la conectividad permite actualizaciones remotas con control de versiones y ‘rollback’, integra el software de gestión de mantenimiento con órdenes de trabajo y repuestos correctos, y aumenta el índice de ‘first-time-fix’, todo ello bajo una arquitectura de ciberseguridad industrial.
El resultado: mayor disponibilidad, costes controlados y una operación auditable, escalable y basada en datos, no en suposiciones.
¿Cómo se gestó la alianza entre Petrotec y el Grupo Salvador Caetano y qué aprendizajes deja este trabajo conjunto?
La colaboración nació de una visión compartida sobre la movilidad basada en hidrógeno y de competencias complementarias. Petrotec (a través de Hellonext) aporta la ingeniería de sistemas HRS —control, seguridad, integración y dispensadores— mientras que el Grupo Salvador Caetano aporta la exigencia operativa de un fabricante de autobuses, con cadencias y requisitos de seguridad industrial muy rigurosos.
El proyecto se desarrolló bajo una gobernanza conjunta (equipo integrado, comités técnicos y de decisión), con requisitos claros desde el primer día y ciclos iterativos de desarrollo, prueba y validación en entorno real.
Los aprendizajes son continuos y compartidos por ambos equipos: se han afinado las interfaces, mejorado el mantenimiento y los tiempos de intervención, y ajustado el ‘roadmap’ a medida que llegan los datos de operación real.
Es un trabajo en curso, evolutivo por diseño, que ya está dando lugar a una estación más segura, estable y fácil de escalar.
¿Cómo valora el papel de fabricantes como CaetanoBus en la aceleración de ecosistemas locales de hidrógeno?
Fabricantes como CaetanoBus son determinantes porque conectan la tecnología con la demanda real.
Del lado de la oferta, ponen en el mercado autobuses de hidrógeno maduros e interoperables, reduciendo el riesgo técnico y clarificando los requisitos para la infraestructura (protocolos, preenfriamiento, seguridad).
Del lado de la demanda, la aceleración solo ocurre cuando existen compradores ancla —como operadores o municipios— que agregan volumen y aportan previsibilidad de consumo.
Estos compromisos hacen que las HRS sean financiables (en términos de inversión, localización y dimensionamiento de compresión/almacenamiento), acortan el paso de los proyectos piloto a la escala comercial y crean un referente regulatorio e industrial local.
¿Qué perspectivas comerciales abre esta tecnología para Petrotec? ¿Existen ya conversaciones para nuevas estaciones en España u otros países de la península ibérica?
Esta tecnología nos abre, por un lado, el mercado de la movilidad basada en hidrógeno, a nivel de suministro H35/H70, donde ya tenemos algunos proyectos en fase de confirmación en España y Portugal.
En paralelo (fuera del ámbito de la movilidad), el mismo ‘core’ tecnológico en compresión, control y medición nos permite ampliar competencias y explorar proyectos de inyección de hidrógeno en la red de gas (‘blending’), un mercado adyacente que también estamos desarrollando.
En términos de inversión, la HRS de Ovar supone unos dos millones de euros. ¿Cómo se está configurando el modelo económico de este tipo de infraestructuras? ¿Requieren aún apoyo institucional o ya son viables por sí mismas?
En Europa, el modelo económico de las HRS sigue estando principalmente respaldado por instrumentos públicos.
La inversión inicial suele apalancarse mediante programas europeos (AFIF/CEF), y la operación se beneficia de primas por kilogramo a través del Hydrogen Bank, que reduce la brecha entre el coste del H₂ renovable y el precio asumible por el transporte.
Mientras el coste del hidrógeno verde y la demanda no converjan estructuralmente, el apoyo institucional seguirá siendo la norma; a medida que exista escala y contratos, las HRS podrán ser autosostenibles.
¿Qué tipo de clientes o sectores considera prioritarios para la adopción inicial del hidrógeno: transporte pesado, logística urbana, flotas públicas…?
Si analizamos la península ibérica con pragmatismo, la adopción inicial debe comenzar donde el hidrógeno resuelva un problema operativo real: transporte pesado por carretera y flotas públicas cautivas. Autobuses urbanos, recogida de residuos y servicios municipales operan con rutas predecibles, kilometraje elevado y ventanas cortas de repostaje; es en estos casos donde una HRS H35 (350 bar) con alto caudal y depósito dedicado ofrece disponibilidad, ritmo de suministro y coste por kilogramo competitivo gracias al uso diario.
En paralelo, operaciones portuarias y aeroportuarias (tractores de terminal, equipos ‘off-road’) y bases logísticas con retorno a base presentan perfiles de consumo estables, esenciales para anclar la inversión.
En algunos corredores, líneas ferroviarias no electrificadas e industrias con flota interna pueden acelerar la curva combinando movilidad y uso de proceso para consolidar volúmenes.
Debemos, por tanto, comenzar con un enfoque ‘depot-first’: proximidad a la operación, alta tasa de utilización (kg/día) y control del OPEX. Solo después se deberían abrir nodos de corredor, una vez exista masa crítica de vehículos. Es la forma más rápida y segura de convertir proyectos piloto en economía de escala en la movilidad con hidrógeno en la Península.
¿Prevé Petrotec integrar el repostaje de hidrógeno en estaciones multienergía, junto a combustibles líquidos y eléctricos, dentro de su oferta global de soluciones para la movilidad?
Sí. Nuestra oferta es claramente multienergía y contempla integrar el hidrógeno con combustibles líquidos y carga eléctrica en un mismo activo, siempre que tenga sentido desde el punto de vista de seguridad, licenciamiento y demanda.
Diseñamos ‘layouts H₂-ready’ y operación unificada, aunque el diseño final depende siempre de las características específicas del emplazamiento y de las decisiones estratégicas de cada cliente (perfil de flota, combinación de vectores, fases de inversión y expansión).
Desde su experiencia, ¿en qué horizonte temporal cree que el hidrógeno se consolidará como una opción relevante en la movilidad pesada en la península ibérica? ¿Y qué barreras tecnológicas, normativas o logísticas deben superarse aún para acelerar su implantación real?
En la península ibérica, es plausible que el hidrógeno pase de la fase piloto a una adopción representativa en la movilidad pesada a lo largo de la próxima década, aunque el horizonte es naturalmente incierto y depende de múltiples factores.
La consolidación debería comenzar en los ámbitos de uso más intensivo y previsible —corredores logísticos portuarios, conexiones transfronterizas y servicios públicos regulados por contrato— siempre que tres piezas clave avancen en paralelo:
(i) Reducción del coste del hidrógeno renovable y del TCO de los vehículos de pila de combustible;
(ii) Una red de estaciones de repostaje bien implantada, con una cadena fiable desde el electrolizador hasta el dispensador; y
(iii) Un marco regulatorio ágil y coherente que simplifique licencias y clarifique aspectos de seguridad, metrología y certificación de origen.
El ritmo efectivo dependerá además de la disponibilidad de vehículos por parte de los fabricantes (OEM), de la reducción de costes en equipos críticos (compresión, almacenamiento, preenfriamiento), del acceso a energía renovable competitiva y de modelos contractuales que garanticen volumen y precio.
Solo si estos vectores avanzan de forma paralela, el hidrógeno podrá consolidarse con solidez en los segmentos adecuados y a la escala necesaria.
“Para una implantación exitosa en la península ibérica, la adopción del hidrógeno debe comenzar donde resuelva un problema operativo real”






















