Gree incorpora refrigerantes con menor impacto ambiental en sus nuevas gamas de producto
Aunque Gree no produce refrigerantes propios, ha optado por integrar en su catálogo tecnologías compatibles con el R-290, empezando por sus modelos portátiles y deshumidificadores, y avanzando hacia gamas más complejas como los sistemas split —con la serie Charmo— o las unidades de aerotermia monobloc —como la Versati—.
En paralelo, el R-32, con un GWP significativamente inferior al del R-410A (aunque ya superado en términos de impacto ambiental), sigue utilizándose en muchas unidades split y sistemas U-Match. Considerándose su empleo todavía adecuado, sobre todo en aplicaciones de climatización industrial o de gran escala, como las soluciones VRF (Variable Refrigerant Flow) del tipo GMV, donde sus características técnicas permiten un equilibrio razonable entre eficiencia, seguridad y sostenibilidad.
El compromiso medioambiental de Gree va mucho más allá, sometiendo sus procesos de fabricación a rigurosos controles de calidad, cumplimiento normativo y consecución de las principales certificaciones. De esta manera, sus nueve centros de producción cuentan con las certificaciones ISO 9001 (gestión de calidad), ISO 14001 (gestión medioambiental) e ISO 45001 (salud y seguridad laboral). Adicionalmente, sus productos están certificados bajo estándares europeos como Eurovent y Keymark, que garantizan un rendimiento energético fiable y una conformidad rigurosa con los requisitos de sostenibilidad del mercado europeo.
Por último, cabe destacar también el reconocimiento de Gree Products con la medalla de bronce de EcoVadis, plataforma que evalúa el desempeño en sostenibilidad de miles de empresas en áreas como medio ambiente, derechos humanos, ética y compras responsables. Si bien aún existe margen de mejora, el posicionamiento actual de la marca refleja una trayectoria clara y coherente hacia una climatización más responsable.






















































