Saab imprime en 3D el primer fuselaje de avión definido por software junto a Divergent Technologies
Foto: Saab - Divergent Technologies.
Saab ha anunciado el desarrollo del que se considera el primer fuselaje de avión del mundo definido por software, realizado en colaboración con Divergent Technologies. El demostrador consiste en una estructura de cinco metros de longitud formada por 26 piezas fabricadas mediante impresión 3D, y supone un nuevo paso en la digitalización integral del diseño y la producción aeronáutica.
La iniciativa se enmarca en la estrategia histórica de la compañía sueca de priorizar soluciones tecnológicas que permitan mejorar la rapidez de adaptación, la eficiencia y el rendimiento de los sistemas de defensa. Desde la introducción del ciclo OODA (observar, orientar, decidir y actuar) en la década de 1970, este enfoque se ha consolidado como un principio clave en el ámbito militar, donde la capacidad de reaccionar antes que el adversario resulta determinante.
Según explica Saab, este planteamiento ha guiado su evolución desde su fundación en 1937 y se ha materializado recientemente en el desarrollo de su último caza, el Gripen E. En este programa, la compañía ha aplicado de forma pionera métodos de ingeniería basada en modelos (MBE), que permiten a todas las disciplinas implicadas trabajar sobre un gemelo digital común del avión. Este gemelo digital no solo abarca el diseño, sino también la producción, sustituyendo los planos tradicionales en 2D por definiciones digitales en 3D que describen cada componente y cada operación de fabricación.
El uso de MBE ha facilitado la realización de simulaciones tempranas y análisis comparativos entre sistemas, lo que, según la empresa, ha permitido optimizar el diseño desde las fases iniciales y abordar soluciones más complejas y eficientes. Este enfoque digital es el que ahora se traslada al desarrollo del nuevo fuselaje definido por software, donde el diseño, la fabricación aditiva y la integración estructural se conciben como un proceso único y altamente flexible.
En paralelo, el Gripen E ha marcado también un hito en el ámbito de la aviónica, con una arquitectura que separa de forma verificable el software crítico para la seguridad de vuelo del destinado a misiones, y que es independiente del hardware informático. Esta filosofía reduce de forma significativa los tiempos y costes asociados a las actualizaciones tecnológicas, y permite una mayor agilidad operativa. De hecho, el avión ha sido el primero en producción en volar con un agente de inteligencia artificial a bordo utilizando ordenadores de aviónica estándar.











