Grupo Efebé diseña una vuelta al colegio con espacios fluidos de aprendizaje

“Me lo explicaron y lo olvidé; lo vi y lo entendí; lo hice y lo aprendí”. Esta cita de Confucio representa de forma clara cómo entienden los espacios escolares los centros educativos más innovadores. Indudablemente, la actualidad pide una adecuación de los espacios educativos a los nuevos modelos pedagógicos más experienciales, digitalizados y motivadores.

El diseño de los espacios de aprendizaje tiene un efecto directo en la educación de los estudiantes. La empresa Grupo Efebé, especializada en el diseño, la adecuación y el mantenimiento de espacios de trabajo, centros de salud, entornos para personas mayores, centros educativos y oficinas, coordina, de entre otros, proyectos de transformación de espacios educativos, para adecuarlos a las nuevas formas de aprendizaje.

Estos empiezan con un proceso de co-creación personalizado para cada centro, que permite conocer cuáles son las necesidades de los alumnos y del personal docente, y con qué valores se identifican, con el objetivo de transformar los espacios a partir de esta información específica.

Con tal de fomentar un aprendizaje inclusivo, innovador y saludable a través de los espacios, “nos centramos en los alumnos a la hora de tomar cualquier decisión”, comenta Anna Fornt, directora de Grupo Efebé. Las escuelas apuestan por la innovación educativa, y contemplan las tendencias del sector: la digitalización, la integración de la sostenibilidad en el programa pedagógico, edificios enérgicamente eficientes, una experiencia de aprendizaje basada en la experimentación, etc.

Los proyectos de transformación de los centros educativos y el replanteamiento de espacios interiores y exteriores adaptan las nuevas necesidades educativas de la mano de los Espacios Fluidos de Aprendizaje (Espacios FluAp), un concepto holístico de los espacios escolares, validado por el Binomio Tecnopedagogía, el Sello SMART y la Fundación Tr@ms. Se trata de una alternativa sistemática y polivalente, a través de la cual cada espacio permite muchas formas de trabajar distintas.

Consta de diferentes espacios, articulados según los seis procesos de aprendizaje: Debate, Reflexión, Colaboración, Investigación, Experimentación y Creatividad.

´Aspecto de uno de los patios del Colegio Santo Tomás, en Sant Boi de Llobegat, antes y después de la participación de Efebé.

Todo centro educativo tiene que contar con un equipamiento que esté acorde a las nuevas formas de aprendizaje. El catálogo de mobiliario de Grupo Efebé aporta las mejores soluciones pensadas y seleccionadas para garantizar la innovación, la creatividad y la adquisición vivencial.

Con un diseño a la medida de las necesidades de cada escuela, el mobiliario que fabrica la empresa Grupo Efebé cuenta con el sello de garantía de seguridad, salud y creatividad, seleccionado con criterios de sostenibilidad, ergonomía, confort, durabilidad, estética, seguridad e higiene. De hecho, está fabricado con madera de tres capas de abeto, y cuenta con certificación PEFC, materiales de buen envejecimiento y barnices no tóxicos, sin emisiones volátiles.

A través de los proyectos FluAp, se siguen criterios de economía circular para reaprovechar el mobiliario existente y alargar su vida útil. Una manera de optimizar este mobiliario es el Restyling Efebé, aspecto clave en el proceso de equipamiento. Ofrece una nueva vida a los productos mejorando sus características actuales con retoques en el revestimiento y los materiales originales, con el fin de obtener un resultado higiénico, estético y confortable, siempre de acuerdo con la normativa del sector.

Los proyectos de adecuación de los espacios educativos logran reducir el consumo de energía, a través de técnicas y sistemas eficientes que mejoran el entorno pedagógico tanto para los alumnos como para el personal docente. Además, es esencial el uso de materiales naturales, saludables y respetuosos con el medio ambiente.

Así pues, la adaptación sostenible de un edificio escolar, la cual contribuye al ahorro energético, puede llevarse a cabo mediante diversos métodos: aislamientos térmicos, sistemas de renovación del aire para garantizar una buena calidad del aire interior, el aprovechamiento de la luz natural o del agua, etc., todos ellos cada vez más intrínsecos a los proyectos educativos.

Uno de los últimos proyectos del equipo multidisciplinar de Grupo Efebé ha sido la adecuación del patio de parvulario del Colegio Santo Tomàs, en Sant Boi de Llobregat. Reforzando la identidad del centro a través de sus valores y elementos corporativos, la empresa catalana ha creado un entorno exterior didáctico, como si de un espacio de aprendizaje más se tratara. El nuevo patio de 200 m² es un espacio de ocio, en el que se han incorporado elementos simbólicos de juego y de aprendizaje pensados para que los niños y niñas de educación infantil se diviertan, interactúen y aprendan.

Asimismo, consta también de un huerto escolar pedagógico, una herramienta didáctica que permite generar experiencias vivenciales más allá de las cuatro paredes del aula, fomentando de esta forma la educación, la sensibilización y la conciencia medioambiental. Además, potencia la biodiversidad, despierta el interés por la flora y la fauna entre los niños y genera en ellos un sentimiento de pertenencia y responsabilidad.

Siempre se ha entendido el patio como un espacio de recreo; ahora, desde hace ya un tiempo, esta noción ha empezado a evolucionar hacia la innovación, la exclusividad y la seguridad. Educar en un entorno exterior como el patio activa el desarrollo cognitivo de los niños y niñas y ayuda a ampliar su capacidad de observación y de experimentación, a través de un aprendizaje vivencial.

La confianza, la socialización, la comunicación o el trabajo en equipo son algunas de las habilidades que se aprenden en estos entornos dinámicos y abiertos. A menudo sucede a través del juego simbólico, “jugar a ser”, una forma de entretenimiento basada en imitar roles adultos en diferentes acciones cotidianas. Les damos acceso al material y equipamiento adecuados para dejarles experimentar con su imaginación (casitas, coches, cocinitas, etc.), sin estereotipos que les limiten y aprovechando cada uno de los elementos del patio, independientemente del género de cada niño o niña.

Un aspecto imprescindible en los centros educativos es inculcar la salud física y mental a los alumnos. En esta etapa, no son conscientes de la importancia que ambas tienen; por este motivo, deben hacerse ejercicios que se conviertan en rutinas, y que les ayuden a aprender moviéndose, ejercitando el cuerpo y la mente.