El aporte de la investigación privada
El sector hortícola es un gran demandante y a la vez un gran generador de tecnología de avanzada. En particular la modalidad de Horticultura intensiva bajo plástico ha demostrado ser semillero de innovación tecnológica sorprendente. Plásticos, control climático, regadío, fertilización, fitosanitarios, innovaciones técnico-organizativas son los elementos de esos "milagros".
El sector hortícola es un gran demandante y a la vez un gran generador de tecnología de avanzada. En particular la modalidad de Horticultura intensiva bajo plástico ha demostrado ser semillero de innovación tecnológica sorprendente. Plásticos, control climático, regadío, fertilización, fitosanitarios, innovaciones técnico-organizativas son los elementos de esos "milagros" que asombran aun al más insensible de los observadores.
Detonantes de estos procesos son las necesidades sentidas de los mercados; los actores del sector requieren formas más eficientes, más cómodas, más rápidas, de generar su producto y de hacerlos llegar a los consumidores, de acuerdo con las exigencias de los mismos. Los precios relativos de insumos y productos - o sea sus escaseces relativas, si es que hablamos de mercados libres - son los que determinan las prioridades en la generación y adopción de innovaciones. Las exitosas serán aquellas que generen un rendimiento mayor en relación con el esfuerzo y los recursos invertidos en producirlas.
Pero esto no sólo es válido para las innovaciones en sí, sino también para las instituciones en dónde se realizan las actividades de investigación y extensión que las generan. La aparición de nuevas instituciones en el seno de la sociedad sigue las mismas normas: estarán en fuerte demanda aquellas capaces de ofrecer su producto - en este caso, el conocimiento - de forma eficaz y económica.
En los últimos tiempos hemos visto como han surgido, dentro del dinámico sector hortícola, organizaciones privadas comprometidas directamente en el proceso de generación y difusión de tecnología. La necesidad de estar en estrecho contacto con los demandantes de tecnología, de probar las innovaciones en el lugar donde se aplicarán, la presencia en las cercanías de núcleos de técnicos de gran capacidad en universidades y centros de investigación, la ventaja que significa disponer de equipos modernos, éstos son algunos de los motivos que llevan a empresas de tecnología y también a productores a requerir los servicios de agentes investigadores privados. Estos, además, al estar fuertemente arraigados en su zona, tienen una gran capacidad de demostración, lo que permite también acelerar la adopción de la tecnología desarrollada.
Este es el caso de Cifacita, centro privado de investigación que contrata con sus clientes proyectos de investigación y de difusión de tecnología a medida de las necesidades de los mismos.
