ACN premia al mejor proyecto empresarial desarrollado en un centro de negocios

La II edición de los premios anuales ACN se celebra en el mes de noviembre, en un acto que contará con la participación de destacadas personalidades del mundo de los business centers de toda España. “Los premios ACN se instituyeron en 2008, coincidiendo con el XV aniversario de la asociación y, en ese mismo año, se presentó la primera edición del Premio Nacional Emprendedor 2010, en reconocimiento a los valores emprendedores y las habilidades personales como elementos clave del desarrollo profesional”, nos cuenta María Montaña Redondo. “Esto demuestra el apoyo de ACN a los emprendedores, que son cada vez más numerosos en elegir las instalaciones de los centros de negocios para llevar a cabo su trabajo”, añade. Como muestra de este apoyo, “ACN ha puesto en marcha muchas iniciativas encaminadas a facilitar la creación de nuevos proyectos empresariales en centros de negocios y facilitar el uso de las oficinas en nuestros centros”. Y como colofón, ACN concede el premio ‘Emprende en un centro de negocios’, que pretende “ser un reconocimiento a los valores emprendedores y las habilidades personales como elementos clave del desarrollo profesional”, afirma Redondo.

Asimismo, el centro de negocios que acoge a la empresa ganadora recibirá una mención honorífica, así como la bonificación de la cuota de ACN durante un año.

La última edición de los premios se celebró el 26 de noviembre de 2010, y en ella fueron premiados los centros de negocios Cirilo Amorós Centro Empresarial (Valencia), y Lexington Internacional Business Center; la Business School de la Universidad Antonio de Nebrija y la empresa Daitelmed, S.L.

“El temor al fracaso es uno de los principales motivos que frenan el impulso emprendedor en España. Los centros de negocios son una opción atractiva para los emprendedores y empresarios ya que se adecuan a las necesidades individuales y profesionales de cada uno”, afirma la gerente de ACN. Nadie mejor que los emprendedores sabe las dificultades, sobre todo económicas, con las que se encuentra. “La principal ventaja frente a la opción habitual de alquiler o compra de oficina tradicional es la optimización de costes por la flexibilidad y la integración de servicios e infraestructuras. El ahorro, tanto en el momento de iniciar la actividad como de forma mensual se reduce un 82,4% y un 60,4% respectivamente con relación a los costes de una oficina convencional. Además, la necesidad de una importante inversión inicial se reduce de manera significativa con la alternativa que ofrecen los centros de negocios”, añade.

Además del ahorro económico, “otro aspecto crucial es la inmediatez de la instalación y el consiguiente ahorro de tiempo”, sin contar, obviamente con la flexibilidad: “Los centros de negocios ofrecen distintas opciones de despachos, según las necesidades del empresario, y flexibilidad en los contratos, ya que se puede adquirir un despacho hasta por horas”. Por último, y no por ello menos importante, es que los centros de negocios “albergan empresas de diversa índole, en las que trabajan profesionales de distintas disciplinas y capacidades técnicas y humanas. Por ello, los centros de negocios se consideran foros de cooperación entre empresas y profesionales de muy distintas ramas de la actividad económica, lo que conduce en muchas ocasiones a la creación de sinergias. Un centro de negocios es, por tanto, una excelente alternativa para un emprendedor”.

Y además, “todo lo dicho anteriormente es muy valorado por el emprendedor. El hecho de no tener que invertir en el espacio físico de una oficina facilita el arranque para emprendedores que están despegando”. Otro aspecto a tener en cuenta es el factor ubicación, puesto que la mayoría de business center están situados en zonas céntricas de las ciudades, donde los alquileres de oficinas no suelen estar al alcance de todos los bolsillos.

Y “de enorme interés” es también que un centro de negocios puede hacer las funciones de oficina virtual, “permitiendo la domiciliación de sociedades y la gestión de llamadas y correo. Esto conlleva un importante ahorro tanto de los gastos iniciales como de los de estructura, y permite al emprendedor ofrecer una presencia e imagen desde el primer día de actividad. En definitiva, un centro de negocios facilita muchas gestiones y permite al empresario centrarse exclusivamente en su trabajo, sin tener que dedicarse a otros asuntos logísticos”, explica María Montaña Redondo.

En definitiva, para los emprendedores que inician un proyecto, “los centros de negocios son un salvoconducto en tiempos de crisis porque facilitan la creación, ampliación y diversificación de empresas. Los business centers son siempre una garantía de éxito y constituyen una ventajosa alternativa para aquellos empresarios que quieren poner en marcha un nuevo proyecto y para las organizaciones que se plantean diversificar su negocio o ampliar su actividad. Como ya hemos dicho, es un gran valor añadido el no tener que ocuparse de las gestiones logísticas y de mantenimiento de una oficina, y dedicar todo el tiempo a la empresa, a su crecimiento. Las ventajas que ofrecen con respecto a una oficina tradicional les convierten en la opción principal, no solo para los emprendedores y las pymes sino también, y cada vez más, para multinacionales que buscan instalarse en nuestro país o empresas que quieren abrir delegaciones de forma rápida, flexible y económica”.