Asaja Málaga espera que se anime el consumo para que los citricultores disfruten de una buena campaña
10 de octubre de 2011
Este es el principal temor de los citricultores malagueños, que inician estos días su campaña con buenas perspectivas de calidad y cantidad y que esperan que los consumidores apuesten por el producto local y dinamicen los mercados. “La calidad de los cítricos este año es estupenda. Después de dos años con precipitaciones tan abundantes, los árboles del Guadalhorce, castigados años atrás por la sequía, han recuperado su buen estado fisiológico y están dando unos frutos excelentes”, manifiesta Benjamín Faulí, responsable de la sectorial de Frutas y Hortalizas de Asaja Málaga.
En cuanto a cantidad, este año se espera cosechar alrededor de 170.000 toneladas de frutos, entre limones, naranjas y mandarinas, lo que supone un descenso de entre un 8 y un 10 por ciento con respecto al año anterior. “Aún así, la cantidad es muy buena, habrá suficiente fruta para atender la demanda”.
Respecto a precios, según comentan los citricultores, es muy bajo en el campo, y sólo esperan que esta situación se traslade a los consumidores: “Al menos así se animarán a consumir”, confían.
Algunas recomendaciones
Si de limón se exporta el 80% de la producción, y de naranja el 65%, más de la mitad de las clemenules se saborean en nuestra provincia: “Las mandarinas de Málaga son las mejores que se encuentran en el mercado. Al tener tantas horas de sol adquieren más grados de azúcar y son un auténtico placer para el paladar”, advierte Faulí.
Para rematar la calidad de los productos, los citricultores, al igual que los olivareros y los castañeros, esperan que caigan las primeras lluvias del otoño para que el fruto coja más calibre y color.
Asimismo, Asaja Málaga recomienda a sus agricultores que recolecten el fruto en su punto óptimo de maduración para que la calidad del producto no se resienta. “La constante oleada de robos hace que a veces se recolecte un poco antes para que los ladrones no se lleven la cosecha”, explica Faulí, al tiempo que también pide a los consumidores que compren la fruta en sus puestos de confianza. “Cada vez hay más fruta robada que se vende a bajo precio en rincones de la ciudad”.