Aunque en principio sólo estará operativa durante un mes

“La Refinería Tenerife reiniciará su actividad de refinado de crudo a partir del próximo 25 de noviembre, tras haber parado esta parte de sus operaciones el pasado 20 de julio por motivos económicos”. Con estas palabras Cepsa anunciaba ayer que su instalación tinerfeña retomará su actividad el próximo lunes, cuando comenzarán las tareas de arranque del complejo industrial, que podrían prolongarse durante seis días.

En un comunicado remitido a los medios, la petrolera controlada por Ipic explicó que “el objetivo de esta actividad de refino, que tendrá una duración de entre tres y cuatro semanas, durante las que se procesarán 220.000 toneladas de crudo, es la reducción de los inventarios de esta materia prima, actualmente muy altos, para disminuir sus costes financieros”.

Es decir, que Cepsa no retoma temporalmente la actividad porque se haya producido un incremento de los márgenes de refino, cuya caída provocó la parada de la refinería. De hecho, los citados márgenes “siguen siendo negativos”, explican desde la petrolera.

Eso sí, desde Cepsa matizan que la compañía vigilará diariamente la coyuntura económica para determinar si es rentable reemprender el refino de crudo de manera indefinida una vez se haya reducido el stock de petróleo que se almacena en las instalaciones o si “se para nuevamente, de manera programada, hasta que la situación mejore”.

El comunicado difundido por la petrolera destaca que Cepsa mantendrá informadas a la Administración de los progresos de las operaciones de arranque, “que se realizarán de manera que tengan el menor impacto posible desde el punto de vista medioambiental y visual, así como con las máximas garantías de seguridad”.