La contaminación lumínica, la asignatura pendiente de las ciudades
La concienciación sobre el medio ambiente es cada día más palpable entre la población y las empresas, por ello, con motivo de la celebración de la ‘Hora del Planeta’, el 30 de marzo, Imaginis, empresa española especializada en sistemas audiovisuales, quiere señalar la importancia de reducir la contaminación lumínica en las ciudades.
Tras dos años de trabajo de I+D, Imaginis ha desarrollado una tecnología de pantallas táctiles que no contamina lumínicamente y consume menos que las pantallas LED.
España es el país de la Unión Europea que más luz consume por habitante y uno de los países con mayor contaminación lumínica por delante de Alemania o Francia. Existe un exceso de iluminación en las calles y hasta ahora las pantallas LED eran la tecnología más eficiente que existía en el mercado, pero las pantallas con tecnología láser compuestas por una lámina difusora con un haz de luz de retro-proyección láser, consumen alrededor de 10 veces menos.
“Aunque los avances tecnológicos en el sector de la iluminación han sido muchos en los últimos años pasando de la bombilla tradicional a los LED, es hora de buscar una forma de alumbramiento más eficiente. Para ello también es necesario concienciar a la sociedad de los efectos negativos que tiene este tipo de luz en su salud”, afirma Alberto Varela, director comercial de Imaginis.
El exceso de iluminación en horas nocturnas afectaría al reloj biológico de la población, según la startup española Imaginis.
La falta de oscuridad en las horas de sueño afecta a la salud
Según la compañía, los tonos azules o blancos son los que más contaminación lumínica producen mientras que los colores más cálidos o anaranjados contribuyen a reducirla, sin embargo, este tipo de iluminación no sólo perjudica al medio ambiente, también a la salud de las personas. El exceso de iluminación en horas nocturnas afecta al reloj biológico de la población produciendo desajustes en la segregación de la melatonina, la hormona del sueño. Estos problemas vinculados a la luz azul emitida por las LED tradicionales pueden provocar alteraciones del sueño o estrés. Este tipo de luz emitida por las pantallas es causante de trastornos del sueño, obesidad y estrés, según datos de la Asociación Médica Americana (AMA).
“Es necesario hacer una revisión del impacto que está teniendo la contaminación lumínica en el planeta y en la salud de la población, en este sentido, las innovaciones tecnológicas deben servir para ayudar a tener un futuro más sostenible en todos los sentidos”, concluye Varela.
