Las Capitanías Marítimas cumplen 30 años como garantes de la seguridad y la sostenibilidad en el mar
El 1 de agosto de 1995 entró en vigor el Real Decreto que estableció la estructura y competencias de las Capitanías Marítimas, órganos periféricos del Estado dependientes del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, a través de la Dirección General de la Marina Mercante. Tres décadas después, estas entidades celebran su 30 aniversario, consolidadas como símbolo de la descentralización de la Administración marítima en España y en el ámbito europeo.
La directora general de la Marina Mercante, Ana Núñez Velasco, ha destacado que las Capitanías Marítimas “se han configurado como un modelo impecable de gestión territorial y de descentralización de servicios”. En sus palabras, también resaltó su papel durante la pandemia, asegurando que “el comercio marítimo internacional estuvo garantizado gracias al transporte marítimo y a sus gestores”.
España cuenta actualmente con 30 Capitanías Marítimas y 78 distritos marítimos que supervisan y ordenan la navegación y la flota civil, sin menoscabo de las competencias de otros ministerios. Estos órganos se encargan, entre otras funciones, de coordinar emergencias relacionadas con el salvamento de vidas humanas en el mar y de combatir la contaminación marina, en estrecha colaboración con Salvamento Marítimo.
También son responsables de gestionar el rol y despacho de buques, el enrole y desenrole de tripulaciones, la administración de registros de buques y empresas marítimas, así como la tramitación de títulos profesionales y de recreo. Otra labor esencial es la inspección técnica de buques —en construcción o en operación comercial en puertos españoles— para garantizar el cumplimiento de la normativa en materia de seguridad y medioambiente. Estas inspecciones abarcan también mercancías peligrosas y autorizaciones de entrada y salida de buques en aguas bajo jurisdicción española.
Núñez ha subrayado el impacto positivo del trabajo de las Capitanías en la reducción de la contaminación marina procedente de buques en las últimas décadas y en la mejora del salvamento marítimo. “La prevención y la vigilancia son el mejor modo de evitar tragedias en el mar”, afirmó.
Con la vista puesta en el futuro, la directora señaló que estos órganos serán clave en la descarbonización y modernización del sector marítimo, según lo previsto en la Estrategia Marítima de España 2025-2050.
Coincidiendo con este aniversario, está a punto de ponerse en marcha una nueva plataforma electrónica que permitirá agilizar los trámites del despacho y rol de buques mercantes, pesqueros y de recreo, así como el enrole y desenrole de tripulaciones. Esta digitalización busca mejorar la eficiencia para los usuarios y aligerar la carga administrativa de las Capitanías.
Cada Capitanía está dirigida por un capitán marítimo y cuenta con un equipo técnico especializado en seguridad, asuntos jurídicos y administración. Además, colaboran con las autoridades portuarias en la gestión de emergencias y en la emisión de informes clave para garantizar la seguridad y el correcto funcionamiento del tráfico marítimo en zonas portuarias. Su labor también se extiende a la coordinación con otras administraciones locales y entidades sociales del entorno.
Las Capitanías Marítimas celebraron el 1 de agosto tres décadas de compromiso con la seguridad, la sostenibilidad y la eficacia en la gestión del espacio marítimo español.
















