InMat by Ciare analiza los retos de la construcción industrializada en nuestro país

El Auditorio de la sede de Cuatrecasas en Madrid fue escenario del 1° Congreso de Construcción Industrializada, organizado por InMat by Ciare. Una doble jornada que contó con la presencia de los mayores expertos del sector, que expusieron los principales retos que debe afrontar la construcción, con casos prácticos e innovadores sistemas para dar respuesta a una demanda cada vez más exigente.

Impulsado por Fernando Catalán de Ocón, presidente ejecutivo de Grupo Ciare, el Auditorio Cuatrecasas de Madrid contó con un aforo completo en la primera edición del Congreso de la Construcción Industrializada que organizó InMat by Ciare. Un punto de encuentro con los expertos y líderes del sector, que ahondaron en la necesidad de acelerar un sector que se encuentra en pleno proceso de transformación, con varios deberes encima de la mesa: dar respuesta a la demanda habitacional, la falta de relevo generacional, una construcción más sostenible…

José María García, viceconsejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, junto a Fernando Catalán de Ocón de Ciare y Julio Brasa, socio director de urbanismo y RE de Cuatrecasas, durante el 1º Congreso de Construcción Industrializada.

“La construcción es un motor de crecimiento y este congreso es una oportunidad única para conocer, de primera mano, las últimas tendencias y avances de la construcción industrializada. La regulación del sector inmobiliario está en constante evolución y adaptándose a la nueva realidad. Estamos en un momento clave para avanzar en esta nueva realidad”, adelantaba Esteban Flores, socio director de urbanismo y 'real estate' de Cuatrecasas, quien estuvo acompañado por Iñaqui Carnicero, secretario general de Agenda Urbana, Vivienda y Arquitectura, y Jorge Rodrigo, consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, junto a Catalán durante la presentación de este evento.

Una doble jornada que contó con interesantes mesas de debate, donde se puso de manifiesto beneficios y necesidades para que la construcción pueda alinearse con el Pacto Verde Europeo. Pese a que existen empresas 100% industrializadas y empresas que apuestan por este sistema, todavía representa un 2% de la construcción total en nuestro país.

De este modo, en la primera mesa redonda ‘Desafíos de esta nueva forma de construcción’ participaron Luis García, director de Operaciones de AEDAS Homes; Luis Ilundain, CEO de VN System; Michel Elizalde, CEO de ACR; Javier de Oro, CEO de AELCA; Antonio Martín, presidente de Grupo Avintia; e Iñigo Eugui, presidente del Clúster de Industrialización en Construcción de Navarra; con Fernando Catalán como moderador.

Durante la exposición, Luis García destacó que “se cree que la industrialización está reñida con el diseño y, además, su coste es más elevado, pero no es cierto. En Grupo Avintia llevamos 7 años y agradecemos iniciativas como las que se han impulsado en la Comunidad de Madrid con el Plan Vive y la actualizado de la Ley Ómnibus, para adaptar el suelo en el desarrollo de este tipo de construcciones industrializadas”.

Por su parte, Íñigo Eugui remarcó que tras la oportunidad con la crisis del 2008 no se han aplicado innovaciones tecnológicas que, sí han sucedido en otros sectores como, por ejemplo, el de la automoción. “Falta inquietud por cambiar, pero estoy convencido que se tiene que transformar”. Hacia esta misma dirección apuntaba Luis Ilundain, uno de los empresarios con una clara visión de futuro, que cuenta con una de las plantas automatizadas más modernas de Europa: “En industrialización tenemos mayor precisión, hablamos de milímetros, espacios sin residuos…, tenemos muchos valores para poner en conocimiento a todos los agentes, así que entre todos nos tenemos que involucrar en este cambio”.

Participantes en la mesa redonda ‘Desafíos de esta nueva forma de construcción’.

Precisamente, Javier de Oro añadió que “la industrialización será el futuro natural”, ya que, como se puso de manifiesto, en España se construyen solo 80.000 de las 240.000 viviendas que se requieren para dar respuesta a la demanda. Pese a que la industrialización se erige como alternativa, no existe una industria capaz de dar respuesta a esta demanda y, además, la gran diversidad de sistemas y soluciones abre un nuevo debate entorno a su estandarización, pese a que ”la mezcla entre construcción tradicional y elementos prefabricados es la evolución natural”, reconocía Javier de Oro de AELCA; a lo que Luís García de AEDAS Homes añadía que “la estandarización puede suponer un problema, pero, en nuestro caso, no es así porque damos cobertura a más del 80% de los casos. Para ello, contamos con 14 tipologías de ventanas, para adaptarlas a las diferentes tipologías de edificaciones”.

No obstante, la dificultad que entraña la inversión en digitalizar una fábrica puede repercutir en el futuro. Las empresas están transformando sus procesos de producción de forma muy paulatina y, si la tendencia del sector avanza hacia la industrialización pueden darse cuellos de botella en pocos años. “El coste de la maquinaria es elevado y desde el punto de vista del constructor y/o promotor existe una cultura contraria al cambio. A esto hay que añadir el gran desconocimiento sobre un proceso industrial en el sector”, comentaba al respecto Antonio Martín.

En este sentido, Luis Ilundain, de VN System, es un claro ejemplo de que apostar por la automatización de procesos es una inversión de futuro y, a su vez, una inflexión en la calidad de sus productos –en su caso, las vigas y muros de contención prefabricados–; Ilundain reconocía que “hay mucho desconocimiento sobre la industrialización y se cree que es un formato muy encorsetado, aunque existen muchos casos de éxito”.

Pero, ¿qué opinión tienen los arquitectos ante este nuevo paradigma constructivo? Para saber su respuesta, se celebró una mesa de debate que contó con profesionales de primera línea como Julio Touza, Carlos Lamela, Diego Escario, Juan Trias de Bes, Borja Fernández, Julián Domínguez y Santiago Vela, con Enrique Bardají como moderador.

Lamela fue taxativo al afirmar que “la industrialización es un mantra que está llegando. Esto se acaba cuando la administración invierta en grandes fábricas que se necesitan para producir edificios enteros, como los coches de gran producción. Pero le quedan unos 50 años y, como no haya compromiso de la administración y, sobre todo, de las grandes constructoras, va a costar, aunque se están haciendo cosas importantes”.

La combinación de materiales, entre madera, acero y hormigón, así como la adaptación a sistemas digitalizados ha calado entre los profesionales que han adaptado su forma de trabajar. “No hay un sistema puro, aunque la madera tiene cierta idiosincrasia, aunque el acero siempre tiene que estar en combinación con el hormigón. Debe existir una convivencia entre ellos para garantizar el éxito, especialmente para grandes alturas, como la fachada portante. Así, la industria puede responder a todas las tipologías sea cual sea el tipo de proyecto”, aseveraba Borja Fernández, Senior Project Leader en L35.

La voz de los arquitectos, ante este nuevo escenario constructivo. También participaron en este congreso con Julio Touza, Carlos Lamela, Diego Escario, Juan Trías de Bes, Borja Fernández, Julián Domínguez y Santiago Vela.

En este sentido, Diego Escario, fundador y director de Cano y Escario, reconocía que “el gran cambio no es realmente el paso de la construcción artesana a la industrializada, sino cómo ha entrado la digitalización en este proceso de industrialización”. Y en ello, el diseño juega un papel importante, como explicaba Julio Touza, presidente de Touza Arquitectos: “La belleza no está reñida con el proceso. Para industrializar se deben dar tres condiciones: parametrizar, a partir de elementos de modulación; ejecutar y desarrollar la industria, mediante la repetición del modelo; y, finalmente, acoplar la prefabricación de las piezas. Puertas, o ventanas ya son elementos prefabricados y no están nada reñidos con la belleza. Debe haber un híbrido entre el conocimiento de los arquitectos y el desarrollo industrial”.

Pero, sin duda, el concepto más revolucionario de este nuevo paradigma es la intervención del arquitecto en todas las fases de construcción, en un entorno totalmente colaborativo, como recordaba Juan Trias, fundador y director de TdB Arquitectura: “La participación del arquitecto en todos los procesos industriales abre la puerta a la industrialización; es la gran innovación en un entorno totalmente abierto y participativo”.

Y, como recordaba Julián Domínguez, fundador y director de CIP Arquitectos, el mayor desarrollo se ha impulsado en fachadas, pero también en baños. “La tendencia es hibridar y que cada componente se use de la forma más eficaz. La macrolínea de investigación es la digitalización y que haya una conexión entre el diseño y los programas de fabricación. No hay que ‘casarse’ sino que debe existir una cierta flexibilidad”.

Precisamente, en la mesa ‘Beneficios de la construcción industrializada por componentes’, que contó con la participación de Andrés Maldonado, CEO de INN Solutions; César Frías, fundador y director creativo de Estudio Morph; José Miguel Ángel Olleros, consultor en Seguridad por Diseño en Ángel Ollero Consultoría; Juan Manuel Vázquez, CGM Building Elements & General Aseembly en Sika; Gabriel Martín, subdirector general de Strugal y Pablo Elvira, director comercial en Butech-Porcelanosa Grupo; con Antonio Domínguez, presidente del consejo asesor de InMat by Ciare como moderador.  Una sesión donde elementos clave como la seguridad y la calidad, enfatizan al sector industrial en la construcción. Para Maldonado contribuye a poder “fabricar un traje a medida, además de coordinar los oficios en fábrica, sin necesidad de hacerlo en obra”.

Un sistema de producción que abre las puertas a la innovación y a “poner en valor soluciones conjuntas”, como remarcaba Vázquez. Aunque, para ello, Olleros advertía que “la industrialización propiciará una mayor especialización”. Así que conceptos como la sostenibilidad y la eficiencia energética podrá desarrollarse mejor en entornos industriales, como afirmaba Frías: “Los elementos rentables son los sostenibles. La industrialización debe compensar eficiencia en transporte y estructura auxiliar. Además, nos da control absoluto sobre trazabilidad, materias primas y revelar qué procesos son más sostenibles que otros. Desde la parte técnica industrializar reduce los problemas”.

Una vez más, la colaboración se presenta como una oportunidad para evolucionar en el sector de la construcción 4.0.

Sin lugar a dudas, uno de los temas centrales de este primer Congreso de Construcción Industrializada recayó en la construcción en altura. Como uno de los grandes retos del sector. Para ello, se contó con la presencia de José Manuel Villanueva, CEO de 01h; Luis Ilundain, CEO de VN System; Michel Elizalde, CEO en ACR y Antonio Martín, presidente de Grupo Avintia; con José María Quirós, delegado de industrialización en AEDAS Homes como moderador.

Un desafío que puede resolverse de compartir experiencias y de descubrir qué soluciones han empleado en otros países. Para Villanueva “el desafío es tan grande que cuando más compartamos mejor”, reconocía y admitía que tras su experiencia al frente de Privalia surge la idea de replicar modelo en la construcción, abogando por la estandarización de sistemas y contrubuyendo mediante la industrialización a reducir la huella de carbono en el sector de la edificación.

“La digitalización es el medio, no el fin, porque nos da precisión de ejecución y en la toma de las mejores decisiones para mejorar calidad, la reducción de tiempo y costes. Queremos tener impacto en la construcción en altura, poniendo el foco en la pluralidad. Con el CLT y el entramado ligero podemos hacer edificios de planta baja más 8 y en esa visión de impacto planteamos 011h, para que sea una plataforma abierta, que permita combinar componentes que hay en el mercado”.

José María Quirós (AEDAS Homes) como moderado en la mesa de debate junto a Antonio Martín (Grupò Avintia), José Manuel Villanueva (011h), Luís Ilundain (VN System) y Michel Elizalde (ACR).

En este sentido, Martín reconocía que “el 75% de la obra se puede hacer en fábrica” y pese a que “el 80% que se construye es para Build To Rent, ya que permite unos costes de 700-800€/m², a día de hoy cuesta mucho montar una fábrica. Hay mucha evangelización, por ello necesitamos la implicación de las Administraciones Públicas”.

Otros temas que se trataron en la mesa iban relacionados sobre si la industria está capacitada para dar servicio al sector –¿qué modelo es el ideal? ¿se apuesta por una construcción híbrida?–. Pero, muy especialmente, se hizo hincapié en una gran preocupación que azota al sector como es la falta de relevo generacional a pie de obra. “La forma de construir va a variar porque no habrá gente para trabajar”, reconocía Ilundain. “La industrialización requiere inversión y hay que atreverse”. Pese a las dificultades que debe superar el sector, como manifestaba Elizalde, “esto ha empezado y tenemos un camino por recorrer. Ya no tiene vuelta atrás. Tendremos piedras en el camino, pero hay que superarlas y trabajar”. A lo que Villanueva apuntaba que “tenemos una gran oportunidad de innovar y de mejora en los procesos, más que una amenaza. Actualmente, nadie va a comprar una vivienda porque sea sostenible, pero si no es sostenible puede ser un problema. Nosotros tenemos la oportunidad de liderar esa evolución”.

De hecho, en nuestro país existen casos de éxito y, sobre todo, disruptivos sistemas constructivos que están provocando este cambio. Algunas de estas soluciones se pudieron ver en la mesa redonda ‘Pioneros de estos sistemas en España y otras alternativas’ que contó con Luis Fernández, director de industrialización en Viuda de Sanz; David Ilundaín, director técnico en VN Systems; Matthieu Filiol, director de marketing y comercial en Hormipresa Living; Sergio Navarro, cofundador y director técnico en Inhaus; Eloi Tarrés, CEO de Evowall Technology; y Angel Alfocea, CEO de WES Panel; con José Ignacio Esteban, director general de Ávita (Grupo Avintia) como moderador. Precisamente, Filiol reconocía que “hay una necesidad de pasar toda nuestra experiencia al sector residencial y crecer en edificación en altura”. Y hacia esta misma dirección apuntaba Tarrés: “Evowall se creó hace 10 años y apostamos por un sistema 2D un poco híbrido, que nos permite tener unas condiciones térmicas similares a la madera. El objetivo está en buscar en cada proyecto cuál es la mejor tecnología”.

Otro de esos casos de éxito está en Navarra. Viguetas Navarra está en la 3ª generación y tras la crisis “tuvimos que salir a Europa, en especial a Francia, por cercanía, y conocimos sistemas constructivos y otra forma de construir muy parecida a una fábrica de coches. Esto nos llevó a montar en Navarra una de las fábricas más robotizadas y digitalizadas de Europa, sistema testado de muro portante, doble muro… La clave está en que antes de fabricar cualquer producto tenemos un gemelo digital y desde el software nos va a decir posibles predicciones antes de trasladarlo al plano real. Esto permite beneficios de optimización y precisión de las piezas”, reconocía David Ilundáin.

No obstante, como admitía Luis Fernández, “la disrupción e innovación lleva riesgos e incertidumbres, pero hay que desarrollar y avanzar en una propuesta mucho más sólida a disposición de mercado”. Para ello, mencionó la reciente 'Guía de la Industrialización impulsado por la asociación OCH', con el objetivo de estandarizar conceptos y sistemas, “para la normalización de la construcción industrializada, tras la creciente demanda”.

Por su parte, Wes, que también cuenta con un sistema patentado propio que le ha llevado a ampliar su planta de producción, ante la creciente demanda existente, remarcaba que "si echamos la vista atrás vemos cómo hemos evolucionado en I+D+i, porque debemos alinearnos al mismo ritmo que el mercado, antes que exista un cuello de botella en la mano de obra. Hay que montar como en una cadena de producción, apostando por la ingeniería”, reconocía Ángel Alfocea.

Si bien estas empresas han invertido en futuro, sí que es cierto que lamentan que, a diferencia de lo que ocurre en polígonos de nuestro país, "en la construcción no se respira industria”, como admitía Sergio Navarro. “Hay que tener en cuenta una gran parte de las viviendas sufre una transformación en los estudios de arquitectura, desde el modelo original, y llegan a fábrica como un producto arquitectónico. No pierden su esencia. La diferencia está en el coste y el tiempo de producción que se cierra antes de iniciar la obra”, añadía. Y, de forma unánime, reconocían que “ya hay un mercado y una demanda, en aras de la sostenibilidad”.

En la sesión ‘Beneficios de la construcción industrializada por componentes (parte 2)’, que contó con Begoña López, CEO de Componentes y Unidades Constructivas; Guillermo Hornero, CEO de PAEE; Antonio Domínguez, director de Desarrollo de Negocio en Domo by Indalsu; Koldo Monreal, CEO en Onhaus; Manuel Median, CEO en ISO-Chemie; Salvador Ochoa, CEO en Persax; y Javier Bermejo, director general de Kömmerling; con Jorge Consuegra, CEO de Metápolis como moderador, pusieron las claves de cómo industrializar el sector de la construcción, para no cometer errores y alcanzar el éxito.

“Para fabricar en cualquier industria existe una ingeniería de producto que no implica una ejecución. Un edificio es un producto y, como tal, debe tener una ingeniería detrás. Nos asustan los cambios, pero la transformación no debe ser traumática, y está claro que una de las claves de industrializar es que debemos tener cierto grado de seriación, para la reducción de costes”, explicaba Begoña López.

En este paradigma se introdujo el concepto de ‘Hueco industrializado’ alrededor del cual se busca alcanzar la perfección. En este sentido, Koldo Monreal recordaba que “que construimos para los usuarios y esa es una virtud y una desventaja. Si queremos hacer casas saludables, no podemos repetir los mismos errores que se están teniendo en obra”.

En este sentido, se recordó que la ventana ha sido uno de los primeros elementos constructivos en industrializarse. “Para mí el concepto de colaborar va en el ADN de nuestra empresa, no en vano, la ventana fue uno de los primeros elementos que se industrializó y se retiró un gremio como el persianero, que ahora va conjunto con la ventana. A la hora de colaborar, mis persianas tienen que ser compatibles con todo tipo de ventanas”, analizaba Salvador Ochoa.

Sin embargo, como reconocía Guillermo Hornero, “el problema es que hay poca industria auxiliar. Industrializar es fabricar en masa, pero con grado de customización. Para el diseño se necesitan más que un estudio, pero falta ingeniería de proceso, producto, desarrollo comercial…”.

Begoña apuntaba que “la ingeniería de arquitectura lleva muchos años conviviendo. La ingeniería es una herramienta que tiene la arquitectura. No existe ningún producto que se fabrique industrialmente para el que no haya una ingeniería detrás. Para hacer industrialización hay que pensar de otra manera y olvidar todo lo aprendido. No se puede diseñar un proyecto con conceptos manuales y meterlo por un embudo en un proyecto industrializado. El proceso de producción hay que diseñarlo industrializado desde el principio”.

De hecho, Monreal afirmaba que no solo ingeniería y arquitectura debían convivir en este nuevo paradigma constructivo, sino que no vale solo industrializar el componente sino también el proceso y la forma de relacionarse”.

La primera jornada del congreso se cerró con dos casos de éxito. Por un lado, la promoción en Alcalá de Henares impulsada por AEDAS Homes, que contó con la participación de David Ilundáin (VN System), José María Quirós (AEDAS Homes) y Luis Picazo (GP17).

Participantes en el caso de éxito de AEDAS Homes en Alcalá de Henares.

Se trata de 184 viviendas “que cuentan con una estructura convencional de pilares y vigas que se tuvo que convertir en muros de carga”. Para ello, ha sido vital el desarrollo de VN System que, con una alta precisión, ha permitido industrializar esta promoción de 12.200 m² destinada al BTR.

“El sector de la construcción ha descendido en productividad en los últimos años respecto a otras industrias. Y eso es porque se siguen haciendo edificios ladrillo a ladrillo, pero con nuevas exigencias constructivas”, reconocía David Ilundain. Tanto los sistemas de vigas y muros portantes, como las soluciones en los balcones de estas viviendas, son algunas de las características de esta primera colaboración entre AEDAS Homes y VN System, empresa que acumula más de 1.000 obras, de las cuales 84 se están realizando durante este 2024 en Francia.

El otro caso de éxito está impulsado por Culmia y contó con la participación de José Ignacio Esteban (Ávita – Grupo Avintia), Andrés Rituerto (Culmia) y Jerónimo Junquera (Junquera Arquitectos), acerca de las 488 viviendas en San Sebastián de los Reyes, donde gracias la industrialización “podemos agilizar plazos, pero sobre todo damos al mercado un producto de gran calidad en vivienda social”, admitía Rituerto.

Todo un reto para promotora, constructora y también para el despacho de arquitectura. En este caso, Junquera Arquitectos ha evolucionado en el proyecto desde el principio, con un control total del proceso: “el motor de toda esta estrategia es la confianza”, reconocía Jerónimo Junquera.

Está claro que cuando se piensa en industrialización, en muchas ocasiones se tiende a pensar en madera. Un material natural, sostenible, flexible, resistente… que para los asistentes a la mesa redonda ‘La construcción industrializada en madera’ –José Manuel Villanueva (011h), Jacinto Seguí (Finsa), Sandra Llorente (Ligntum Tech) y Javier Valladares (Valladares Ingeniería)– presenta importantes beneficios como que “consume un 50% menos de energía. El transporte es inferior por su bajo peso y tiene una gran resistencia. Es un material que tiene muchas posibilidades acústica y térmicamente”, reconocía Valladares.

Si bien se puso de manifiesto la necesidad de optimizar los procesos de producción, Seguí reconocía que “hay que entender que la gestión forestal juega un papel importante que no puede desconectarse del proceso industrial. Debería haber iniciativa público-privada que dé valor a esta industria”.

Fácil reparabilidad, construcción en seco, circularidad o sostenibilidad son unas propiedades técnicas que deben ir en paralelo a una capacidad industrial en un país con materia prima. Existe una cierta frustración sobre que en España no se esté al mismo nivel de producción en madera, como sí sucede en otros países de Europa.

En la segunda jornada del Congreso de Construcción Industrializada InMat by Ciare se afrontaron otros retos ante este nuevo paradigma sectorial. Aspectos como la financiación, las trabas burocráticas, los seguros, así como la implicación pública se expusieron en una mesa de debate que contó con la presencia de María José Piccio-Marchetti, directora general de Vivienda y Rehabilitación de la Comunidad de Madrid; Diego de la Viña, director general de Bruzon Correduría de Seguros; Roberto Rey, presidente y CEO de Gloval; Sebastián Barrio, director del Centro de Negocio Inmobiliario de Banco Sabadell; y Diego de la Viña, director general de Bruzon Financial Services (BFS); con Roberto Campos, director general de Grupo Avintia.

Uno de los temas que se expusieron fueron los cambios normativos en el Plan Vive, mediante la actualización de la Ley Ómnibus, por la cual se aplicaban cambios en el suelo para fomentar la vivienda asequible. En paralelo, la inflación, la crisis de los suministros y los tipos de interés han creado cierta incertidumbre social. Pese a ello, desde la Comunidad de Madrid prosiguen con su política a favor de la vivienda social y también juvenil. “Este 2024 pondremos en marcha una nueva licitación, un nuevo plan ‘Solución Joven’ similar al Plan Vive, destinado a menores de 35 años. Serán viviendas pequeñas de 1 ó 2 dormitorios, que pretenden fomentar la emancipación y será fundamental introducir técnicas de construcción industrializadas, no solo para acortar plazos de construcción, sino ante la falta de mano de obra”, explicaba Piccio-Marchetti.

La clave, según Sebastián Barrio está en “cómo financiar. En primera instancia el promotor debe hacer anticipo al fabricante. Si contamos con un promotor con capacidad financiera el tema está resuelto, pero no siempre está ahí y nos basamos en las garantías que existen entre promotor y fabricante”. Así que el marco regulatorio, unido con la financiación bancaria, debe alinearse ante esta nueva realidad constructiva.

Una jornada donde se expuso otro caso de éxito, en esta ocasión, un hotel de la cadena B&B industrializada, donde se abordó el modelo mixto y que contó con la participación de Juan Núñez (TdB Arquietctura), Joao Bartolo (Grupo Cascais) y Guillermo Jiménez (ACR), para el que se ha empleado el sistema CREE, un panel prefabricado con losas de forjado y elementos estructurales en madera.

“Aunque CREE permite diversos tratamientos de fachada, en este proyecto se utilizó el hormigón en fachada, ventanas con estrictamente la superficie necesaria para ventilación e iluminación y jugar con esa modulación que también nos confieren los baños industrializados: Esto nos permitió que, en tan solo 5 días laborales, se subieran 5 plantas”. Un proyecto donde también se ha industrializado los racs de instalación, mediante modelación BIM.

Durante la doble jornada se dejó de manifiesto la importancia que las ingenierías tienen en la industrialización de productos para la construcción. Esta fue de las conclusiones de la sesión ‘Las ingenierías y las empresas de projecte management en la construcción industrializada’ a la que participaron Javier Valladares (Valladares Ingeniería), Aurelio Fernández (Almar Consulting), Josep Grimalt (GN Grup), José Manuel Ballesteros (PGI) y Eva Cuesta (Acerta), moderados por Gonzalo Echarri (Ortiz.León Arquitectos).

“El proceso industrializado es holístico. No puede ser considerado como una suma de procesos, cada uno con sus características, sino como un proceso en sí mismo. Así que alguien tiene que gestionar que todo el proceso funcione y esta es la labor del Project Manager”, reconocía Aurelio Fernández. Por su parte, Josep Grimalt añadía que “con la evolución tecnológica natural, no solo se trata de digitalización BIM o 3D, sino también de la automatización de procesos, robotización, impresión 3D; aparte de esto no nos queda otra porque por la legislación europea y por la falta de mano de obra. Es un tren que hay que coger, liderar y ser competitivos”.

Sin embargo, uno de los aspectos que más se debatió en la mesa fue la responsabilidad del proyecto. Valladares admitía que “el arquitecto es el encargado de adaptar los diseños, pero existe un debate muy fuerte en el mercado, ya que la persona que desarrolla un proyecto debe ir a la obra y firmar su responsabilidad, pero es difícil encontrar a profesionales con ganas de implicarse”. A lo que Ballesteros añadía que “si a esto le sumamos la estructura, climatización, fontanería, etc., el problema se dispara. No obstante, la industrialización ha resuelto muchos de los problemas desde la fase de diseño, ya que podemos hacer un 'show drawing' previo”.

Para Grimalt “si atendemos a la jurisprudencia, debe redefinirse y definir las responsabilidades. Debe regularizarse, ya que no se ha adaptado a este nuevo escenario”. Para ello, “solo puede crecer la industria si todos colaboramos. Arquitectos e ingenierías están a favor la industria, viendo una posibilidad para crecer e invertir en I+D”, aportaba Fernández.

Así que a la certificación de calidad, la industrialización debe conllevar una responsabilidad colaborativa, ya que el modelo constructivo se ha transformado en un nuevo paradigma más eficiente desde la fase de diseño, donde todos los agentes participan en un programa abierto y transparente.

Precisamente, este nuevo marco regulativo, que debe definir las nuevas líneas de actuación en el sector, fue el tema de debate en la última mesa redonda de este congreso, bajo el título ‘ESG (environment, social and governance) en la construcción industrializada’, que contó con la participación de Carlos Lasarte, socio finance de Cuatrecases; José María Echevarría, socio tax de Cuatrecases; Julio Brasa, socio de urbanismo de Cuatrecases; Natalia Pifarré, asociada de urbanismo y medio ambiente de Cuatrecases; Joaquim Lozano, asociado de ESG y público de Cuatrecases; y Joaquín Garaulet, socio de inmobiliario de Cuatrecasas; con Elisabeth de Nadal, socia responsable de ESG y Derechos Humanos de Cuatrecasas como moderadora.

La sostenibilidad es uno de los temas trascendentales en la construcción industrializada, ya que no solo apuesta por la elección de materiales menos nocivos para la salud, unos acabados de primera calidad y una reducción de los plazos de entrega, sino que está en el ADN de la industrialización en la construcción. En este sentido, se consigue reducir los residuos en obra y permite que la construcción sea en seco.

“La sostenibilidad marca el nuevo reglamento de taxonomía, donde la UE ha establecido qué actividades son sostenibles, para contribuir a uno de los 6 objetivos que se han definido medioambientalmente y ver si el sector contribuye a la mitigación del cambio climático. Por ello, se va a pedir desde que tenga una demanda de energía un 10% menor hasta la construcción de edificios casi nulos”, comentaba al respecto Joaquín Lozano, quien añadía que “los sellos verdes deben demostrar que lo que se está realizando es sostenible”.

En este sentido, Natalia Pifarré remarcaba que “el proceso constructivo desde fábrica como luego el montaje e incluso los materiales contribuirían a la obtención de certificados, reducir desperdicios, residuos… Otro punto es la automatización de procesos y el ensamblaje por módulos que reducen el grado de error y mejoran su aislamiento térmico y acústico para crear mayor estanqueidad que en otros procesos”.

No obstante, la sostenibilidad ahora mismo no es un concepto vendible ni para promotores-constructores ni para usuario final. No obstante, desde la Administración Pública deben apostar por un sistema que no solo desarrolla materiales tecnológicos más resistentes y eficientes, sino que es fácilmente trazable.

“Legalizar la construcción industrializada supondría un cambio de los proyectos en los que ya trabajamos. La Normativa LOE es del año 99, la ley nunca va a ir por delante de las innovaciones en este campo, por lo que se ha quedado un poco atrás de las necesidades de la construcción industrializada. De este modo, los contratos se basan en el criterio tradicional y, desde un punto de vista de colaboración, se requiere desde el primer momento que incluya ya en el propio diseño al contratista/fabricante de las piezas industrializadas y a los ingenieros y eso propicia la necesidad de modificar los contratos como están planteados actualmente”, remarcaba Lozano. “Hay que tener en cuenta desde el punto de vista jurídico, si no es solo el arquitecto quien está diseñando el proyecto, que hay que saber cómo atribuir la responsabilidad; determinar derechos autor, si BIM ya es un acuerdo contractual, etc.".

Interesante mesa de debate en torno a las nuevas necesidades en materia de ESG de la construcción y la necesidad de la actualización de las normas jurídicas, en la mesa de debate con Cuatrecasas como protagonista.

De este modo, el avance tecnológico entronca con el espectro jurídico, para contribuir en la dinamización de un paradigma constructivo que, al reto del cambio de rumbo que debe experimentar el sector: de la obra a la fábrica; se le unen aspectos legales que deben contribuir a facilitar tanto las fases de ejecución de las obras, como aportar garantías al proceso constructivo en toda su globalidad, determinando los agentes en este entorno colaborativo y sus responsabilidad tanto en producción industrializada como en ensamblaje en obra. “Los costes fiscales de la actividad constructiva van a permanecer invariables, por lo que no considero que tenga que requerir una modificación normativa relevante. Debe haber una introducción de nuevas estructuras de financiación”, reconocía Echevarría.

José María García (viceconsejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid) participó en el acto de clausura de la 1ª edición del Congreso de Construcción Industrializada Inmat by Ciare, destacando que “las Administraciones Públicas debemos ver hacia dónde va el sector y tener una actitud proactiva para avanzar con él. La construcción será industrializada o no será, pero a veces la administración vamos por detrás de las empresas y surge como una oportunidad para dar respuesta al acceso a la vivienda a un precio asequible a partir de la construcción industrializada”.

Y remarcó que “debemos estar todos alineados en ese proceso, para buscar formas de agilidad y seguridad como la tramitación administrativa. Se ha hecho esfuerzo en la Comunidad de Madrid como la Ley Ómnibus, pero tenemos conseguir que el sector reflexione para hacer atractivo cara a la inversión extranjera. Que la administración sea un paraguas donde aterrice esa inversión”.

Y terminó manifestando que “la industrialización es el futuro, pero el proceso de cambio no será sencillo a todos los niveles, como puede ser la legislación estatal y fiscal. Lo difícil es abrir el camino, pero una vez que se ha abierto, no tiene ningún sentido dar marcha atrás”, sentenció.

Una edición que, tras el éxito tanto de asistencia como de participación, augura un futuro de cara a la edición 2025.

Sobre Inmat by Ciare

Inmat es un Punto de Encuentro permanente formado por prescriptores y fabricantes de materiales de construcción, que surge con un compromiso social, como foro generador de oportunidades para el desarrollo de procesos constructivos más colaborativos. Un espacio de divulgación, debate e innovación bajo el paraguas de Ciare (Conocimientos Imprescindibles de Arquitectura y real Estate), con el arquitecto y presidente ejecutivo de la organización, Fernando Catalán de Ocón al frente. Un espacio formativo especializado, donde la totalidad de los docentes son profesionales de reconocido prestigio, que desarrollan su actividad en las principales compañías e instituciones del sector inmobiliario español.