La empresa participa junto a Zubicities en el desarrollo de la construcción de un ecobarrio en La Pinada (Valencia)

¿Se puede construir como en el siglo XX, pero dando respuesta a las necesidades del siglo XXI? Para Woodea, empresa especializada en construcción industrializada en madera lo tienen claro. La sociedad ha cambiado y también sus prioridades, favorecido, en gran parte, por el desarrollo de nuevas herramientas tecnológicas que contribuyen, en gran medida, a mejorar las viviendas en términos de sostenibilidad y salubridad. La digitalización ha venido para quedarse y con Woodea Production System se pretende desarrollar un avanzado modelo de producción en el sector de la edificación, más preciso, eficiente y, sobre todo, generando un menor impacto medioambiental, creando una auténtica revolución en el sector.

Woodea surgió para dar respuesta a una nueva necesidad. Por un lado, mejorar los procesos productivos de un sector que acusa la falta de personal cualificado; y por el otro, encontrar alternativas que contribuyan a reducir el impacto medioambiental. La madera se posiciona como el material del siglo XXI por sus altas prestaciones y, muy especialmente, por su circularidad y durabilidad, convirtiéndose en un auténtico aliado del planeta.

“No se trata de cómo tener menor impacto, sino de poder propiciar un impacto positivo y, en este sentido, creemos firmemente que el uso de la madera en construcción conllevará un aumento en las masas forestales de nuestro país, del mismo modo que ocurre en países como Estados Unidos, Canadá, Suecia y Japón. Bosques que asentarán CO₂, atraerán humedad, alojarán biodiversidad, combatirán la desertificación del territorio y asentarán población rural”, reconoce Pablo Saiz, CTO en Woodea.

Esquema constructivo del primer edificio de madera en Valencia de Woodea. Un residencial built-to-rent de cinco plantas en Burjassot, diseñado por el estudio valenciano FVAI.

La búsqueda de una construcción más eficaz, tanto en diseño como en procesos, con un óptimo uso de los materiales y los recursos renovables, como la madera, se pueden culminar las expectativas marcadas con la industrialización. Una postura que debería generalizarse antes de que se agoten los recursos naturales.

Ésta es, sin duda, la filosofía de Woodea, la empresa que apuesta por una construcción sostenible, de impacto medioambiental positivo, mediante la combinación entre construcción industrializada y madera técnica, junto con otros biomateriales, mejorando, así, la calidad, eficiencia y durabilidad de las edificaciones.

Una industrialización efectiva que se completa con una drástica reducción de los residuos generados en obra, pero, sobre todo, apostando por su valorización y circularidad. Sólo así, cobra un mayor sentido la industrialización en la construcción.

La madera, per se, es un material noble, natural y que garantiza una alta resistencia. No en vano, desde la antigüedad se ha construido en madera. A día de hoy, existen notables ejemplos que han perdurado en el tiempo. Catedrales, residenciales, elementos ornamentales... que se han mantenido impasibles al paso del tiempo. Sin embargo, la sociedad y las empresas en particular deben recuperar la confianza en un material que va a ser clave en la nueva constructiva a corto y medio plazo.

Pero también es necesario impulsar proyectos eficaces, sin desperdicio, orientados a fabricación y montaje, lo que se conoce como DfMA. “La metodología Lean Integrated project delivery es un proceso de desarrollo colaborativo de proyectos y construcción, creando un equipo integrado de diseñadores, industriales y constructores que trabajan en conjunto, desde los inicios con el promotor, con el fin de ahorrar costes aumentando el valor de la construcción”, añade Pablo Saiz.

Ésta es, sin duda, la clave de la industrialización en el sector. Múltiples agentes trabajando en paralelo en entornos digitales, de forma colaborativa, con cero errores y reduciendo al máximo los desperdicios 'in situ', a partir de un uso eficiente de los recursos.

“Woodea trabaja desde ese entorno colaborativo, propiciando las metodologías y plataformas necesarias, para que esta dinámica sea posible y, en este sentido, hemos desarrollado nuestra metodología de trabajo, el Woodea Production System, alineada con lo que se está constituyendo como un estándar en construcción industrializada”.

En cierto modo, WPS se alimenta de la filosofía Lean, para una mayor trazabilidad y control de todo el proceso de construcción, desde la fase de diseño hasta su ejecución. Gracias a este modelo productivo se consigue predecir todos los factores implicados en el ciclo de vida del producto: diseño, digitalización, producción, logística y montaje.

“Al igual que los OEM del mundo automovilístico, Woodea trabaja como ensambladora de componentes de diferentes proveedores, teniendo en cuenta la realidad del sector industrial en el que nos situamos y sabiendo que el modelo ideal es un modelo al que hay que tender, a partir de la tecnología, y proveedores de los que podemos disponer hoy en día. Solo a través de un conocimiento real del sector podemos pasar de promesas a logros”, señala Saiz.

Este pensamiento industrial comienza con el diseño, analizando valores y coste, para que sea lo más eficaz posible y desprendiéndose de aquellos elementos que no otorgan valor al producto. Además, los espacios tienen que estar bien dimensionados, limitar las circulaciones, determinar con detalle cada instalación, etc. En definitiva, utilizar una correcta modulación espacial que permita optimizar los materiales y sistemas estructurales y avanzar hacia una cierta estandarización. Es decir, una mayor flexibilidad y personalización con un mínimo de estandarización invisible.

“Para conseguir nuestro reto es necesario combinar las distintas metodologías de la industria y aquí, compañías como Toyota en la producción Lean, Volkswagen en el trabajo bajo plataforma de producto y Mercadona en cuanto a la importancia de la logística como ventaja competitiva en la creación de producto, son nuestros principales referentes”.

La digitalización emerge como el concepto clave que marca la revolución sectorial. Las casas se imaginan en un ordenador y se construyen al milímetro, reduciendo cualquier error en obra. Todo se estudia, se planifica y se exporta ‘in situ’, ya que la industrialización de elementos de construcción contribuye, en gran medida, a facilitar su ensamblaje en obra, mejorando, así, las condiciones laborales de los operarios y, reduciendo, a su vez, plazos de entrega.

En este sentido, las herramientas digitales permitan visualizar, en una etapa temprana, costes, plazos e impacto medioambiental y conectar con agilidad el diseño con los procesos de producción, así como con todos los agentes implicados. Además, el aspecto logístico es crucial en este modelo de construcción industrializada, que va más allá de la organización de camiones hacia la obra. “Para nosotros es uno de los sectores donde vamos a ver mayores avances a corto plazo. De este modo, la obra, junto con la manufactura, se debe organizar a través de las metodologías Lean entre ellas Last planner system con sus consiguientes pull-sesions, o las 5S de organización de obra como si fuese un taller”, concluye Pablo Saiz.

El equipo de Woodea está formado por Octavi Uya, CEO con una brillante trayectoria en el mundo empresarial, la consultoría estratégica financiera y de evaluación de riesgos; Matthieu Heusch, emprendedor en serie IT y managing director en Zubi Labs; Pablo Medina di Fiori, COO, Master en Lean Manufacturing & Supply Chain con experiencia en sectores Lean en automoción; Pablo Saiz, CTO en el ámbito constructivo y arquitectónico, con 15 años de experiencia en el sector de construcción industrializada; y, finalmente, Pablo Moreno, desarrollador BIM con experiencia en sector construcción, logístico y Retail en Mercadona, como responsable de digitalización.

Woodea pertenece al grupo Zubi, creado por el emprendedor Iker Marcaide, un grupo de empresas que buscan un triple impacto, social, medioambiental y económico, y que es promotor del que será el futuro ecobarrio de La Pinada en Paterna (Valencia), un espacio que incorporará la filosofía de la empresa y de la industrialización en la construcción, con una previsión de 1.000 viviendas.

Pero en Woodea no dejan de desarrollar y, actualmente, están trabajando en el primer edificio de madera en Valencia, concretamente en Burjassot. Se trata de un edificio de 5 alturas y 14 viviendas destinado al alquiler, con un proyecto diseñado por el estudio valenciano FVAI, liderado por el Ingeniero y Arquitecto Francisco Valiente, y promovido por Zubicities. En este edificio, Woodea pondrá en práctica su visión holística de la construcción industrializada, como mezcla apropiada de sistemas, materiales y componentes constructivos, para llevar los materiales a su máxima eficacia. Para ello, empleará un sistema de vigas y pilares en madera laminada levantados sobre un podio de hormigón. Componentes lineales y superficiales para la estructura y fachada y componentes en 3D para baños, junto con una coordinación e integración de todas las instalaciones.

Un reto para Woodea que pretende abrir el camino hacia una arquitectura accesible y de impacto positivo a nuestro planeta.