Las desigualdades laborales entre géneros se intensifican durante la maternidad
La llegada de los hijos tiene un impacto negativo en la carrera profesional de las mujeres, una realidad que no favorece a la natalidad.
Aunque parezca que nuestra sociedad se dirige a un modelo más igualitario, aún existen importantes diferencias entre ambos sexos. Es el caso de la brecha salarial entre hombres y mujeres. Según la última encuesta cuatrienal elaborada por Instituto Nacional de Estadística (INE), “en el año 2014, el salario anual más frecuente en las mujeres (14.497,9 euros) representó el 87,8% del salario más frecuente en los hombres (16.515,7 euros)".
Por otro lado, el mismo informe destaca que se trata de una tendencia que, además de tener un importante impacto en la vida laboral de las mujeres españolas, las perjudica doblemente en su elección de ser madres. Así, durante las edades en las que, con mayor frecuencia, se opta por la maternidad, las mujeres tienen más dificultades por encontrar empleo.
Esto demuestra que la llegada de los hijos tiene consecuencias negativas en la carrera profesional de las mujeres, una realidad que no favorece a la natalidad en nuestro país, la cual está experimentando una bajada alarmante desde hace una década.
La maternidad da lugar a más diferencias
Mientras que la vida laboral de las mujeres se estanca o disminuye durante el embarazo y nacimiento de los hijos, la trayectoria profesional de los hombres aumenta, según Eurostat. Pero las diferencias no terminan después de dar a luz.
"En 2016, el 92% de las mujeres de 25 a 49 años (con hijos menores de 18 años) cuidaba a sus hijos diariamente, en comparación con el 68% de los hombres"
“En todos los Estados miembros, hay una proporción mucho mayor de mujeres que de hombres que realiza las tareas relacionadas con el cuidado de los niños, las tareas domésticas y la cocina. En la UE en 2016, el 92% de las mujeres de 25 a 49 años (con hijos menores de 18 años) cuidaba a sus hijos diariamente, en comparación con el 68% de los hombres”, señalan las estadísticas del estudio ‘La vida de las mujeres y los hombres en Europa’, elaborado por Eurostat.
La figura de la mujer tiene una menor proyección laboral
Como consecuencia, las mujeres piden más excedencias o reducciones de jornada laboral, lo cual, inevitablemente, fomenta la disminución de su proyección laboral. Así, según otro estudio sobre el mismo tema, publicado por CCOO, en 2017, “el 75% de las personas asalariadas que trabajan a tiempo parcial eran mujeres. La elección de este tipo de jornada no es voluntaria, responde a razones diferentes siendo la primera no encontrar empleo a tiempo completo", señala.
Sin embargo, el mismo estudio destaca que el motivo principal por el que el que las mujeres deciden pedir la media jornada es el cuidado de los hijos. Así lo demuestran el 61% de las mujeres entre 35 y 44 años del informe, junto al 28% de mujeres entre 25 y 34 años.
