5 Falsos mitos sobre el Coaching

Artículo gentileza de Humanas

Cuando hablamos sobre el Coaching, incluso dentro de las organizaciones, podemos encontrar todo tipo de ideas e interpretaciones de lo que es. Personas que piensan que el Coaching es Mentoring, otras que creen que son sesiones terapéuticas o como ir a un psicólogo, las que al escuchar “coaching” sienten repulsión porque ahora todo el mundo es Coach, o las que no saben lo que es.

Esto sucede a pesar de que hace ya más de 20 años que aparecieron los primeros “Coaches” en nuestro país. Existe todavía un gran desconocimiento entorno a esta profesión y espero que este post sirva para arrojar un poco más de luz sobre el coaching.

El Coaching es un método por el cual, a través de preguntas de reflexión y preguntas poderosas que realiza el Coach, el cliente o Coachee llega a las soluciones y al objetivo por sí mismo, rompiendo por el camino sus creencias limitantes y tomando consciencia de cuál es su verdadero potencial.

Sócrates ya hacía algo parecido al Coaching con la mayéutica. La mayéutica creía que el alumno, en este caso el cliente, ya tiene la respuesta y la verdad en su interior, sólo tenía que aprender a verla. Esto aplicado al coaching supondría romper creencias limitantes y miedos, para después sacarla hacia fuera que correspondería a pasar a la acción y avanzar hacia el objetivo.

En este proceso de toma de consciencia se produce una verdadera transformación de la persona.

Falsos mitos

Existen varios falsos mitos, sobre lo que es y lo que se consigue con el Coaching que aclararemos a lo largo de este post:

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  El Coaching y el Mentoring son lo mismo:

  
  

En un proceso de Coaching, el Coach nunca le dirá al Coachee cómo debe actuar o qué hacer para lograr su objetivo. Éste llegará solo a la solución mediante la reflexión a las preguntas que realiza el Coach.

Así pues, el Coach es sólo un espejo que refleja las palabras, las emociones o las contradicciones del cliente para que éste pueda tomar consciencia de ellas.

Sin embargo, un Mentor o un consultor proporcionan consejos al cliente sobre cómo actuar para llegar a su objetivo. Hay quien prefiere recibir consejos porque creen que así llegarán antes a su propósito. Al contrario de lo que sucede en el coaching no existirá una transformación profunda de la persona. Por eso cuando una persona inicia un proceso de Coaching es necesario una fuerte dosis de compromiso y estar preparado para esta transformación.

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  El Coaching es una terapia:

  
  

Las personas que acuden a un terapeuta tienen algún tipo de problema, sin embargo, para realizar un proceso de coaching no es necesario tener problemas. Es necesario simplemente querer alcanzar algún objetivo, ya sea profesional o personal.

El Coaching es para personas sanas que deseen mejorar y utilizar todo su potencial,

ya sea como líder en una organización, con sus relaciones, o consigo mismo.

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  Un Coach es un psicólogo:

  
  

La psicología es una carrera universitaria, donde estudian la psique Humana, el comportamiento humano, patologías de la mente entre otros temas.

Una persona con ansiedad, depresión u otras patologías, tendrá que ir a un psicólogo no a un Coach, aunque se pueden complementar. No todos los que nos dedicamos al Coaching somos psicólogos, pero sí coincidimos en que nos gusta trabajar con personas.

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  Cualquiera puede ser Coach:

  
  

Ante esto yo preguntaría. ¿Puede cualquiera ser un gran jefe? Está claro que no. Tener un alto cargo no convierte a esa persona en un gran líder. De la misma forma que no por haber recibido una formación de coaching convierte a la persona en Coach.

El Coaching se ha convertido en algo así como una “moda” y ya sabes que las modas, en el fondo, generan desconfianza. Continuamente se habla de intrusismo en esta profesión lo que termina dañando la imagen de todo lo creado en torno al coaching.

A pesar de haber mucha oferta de formaciones sobre Coaching, sólo unas pocas escuelas están reconocidas con una certificación por la ICF (International Coach Federation). Esta certificación garantiza que esa persona ha recibido una formación y ha sido examinada para ejercer profesionalmente como Coach. A esto añadiría que ser Coach es un estilo de vida, en el que el crecimiento personal propio y el de los demás es el objetivo vital.

Un buen Coach ha tenido que vivir su propia transformación.

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  El Coaching es sólo para empresas:

  
  

Hace 20 años, el coaching estaba sólo al alcance de las empresas y de unos pocos adinerados como deportistas, músicos, políticos... Hoy en día esa situación ha cambiado. Hay mucha más oferta y los Coaches han ido buscando su propio nicho y especializándose en determinados targets, adolescentes, mujeres, de relaciones, de grupo…

Sin embargo, el Coaching ejecutivo y de empresa sigue teniendo gran peso, ya que es una buena manera de conseguir transformaciones profundas dentro de la organización, como:

• Convertir a un jefe en líder, si tiene el don para ello.
• Mejorar las relaciones departamentales mediante el Coaching grupal
• Mejorar la comunicación abierta y sin miedos.
• Utilizar la creatividad innata a través del autoconocimiento.

Espero que te haya parecido interesante el post sobre los falsos mitos del coaching. ¿Te viene a la cabeza algún otro “mito” sobre el Coaching?

“Lo mejor para saber lo que es algo, es probarlo”

Ana Madrazo. Transhumanist Consultant en Humanas Salud Organizacional