¿Quién dice que no se puede comer sano y rápido en el trabajo?

Se habla de la alimentación sana como una tendencia global en los países más desarrollados pero, después de años, tenemos la esperanza de que sea algo más que eso. Un estilo de vida que ha calado más profundamente en la sociedad y que va más allá de una moda. Las rutinas, prisas y otros factores del día a día nos pueden empujar a comer rápido y demasiado procesado, cosa que normalmente se ha asociado a la obesidad y a otros problemas alimentarios. Pero comer sano no tiene por qué implicar demasiado tiempo en la cocina, un ejemplo es que la red se ha llenado de una gran variedad de recetas de comida sana y rápida, que demuestran que sí es posible la calidad con poco tiempo.

En terreno empresarial, tiene un gran protagonismo el vending: esas máquinas con comida preparada, que acostumbran a tener un porcentaje elevado de grasas saturadas y se relacionan con problemas de sobrepeso. Pero el mercado evoluciona con los estilos de consumo y el negocio del vending cada vez apuesta más por el sector de la alimentación sana. Si bien este mercado está más desarrollado en Estados Unidos (donde la obesidad es un problema alarmante), en España también nos consta que hay un alto consumo de productos de vending y que bastantes empresas ya han empezado a emprender caminos más saludables.



Un dato curios es que el país con más mayor implantación de máquinas de vending (Japón) es también el que tiene el índice de obesidad más bajo según la OMS.

Comer en el trabajo

Si se puede comer bien y rápido en nuestra vida cotidiana, ¿por qué no debería trasladarse este hábito al terreno laboral? En un entorno en el que las máquinas de vending están muy presentes, podremos encontrar también opciones saludables. Como hemos visto, muchas empresas de máquinas expendedoras destinadas a sitios de trabajo ya han empezado a invertir en el sector healthy viendo que su demanda está en aumento. Algunas empezaron ofreciendo trozos de fruta fresca envasada para facilitar a los trabajadores el comérselo (siempre con cuidado de que el alimento sea de calidad y esté en buen estado). Otras empresas han apostado por platos más elaborados, que podrán servir para las comidas del mediodía, como ensaladas muy completas, preparados veganos y más.

La oferta de esas máquinas se ha convertido en algo variado y para todos los gustos. Después de explorar un poco, destacamos algunas ideas que nos han parecido ideales para el picoteo entre horas como el hummus con trozos de zanahoria o la combinación de rodajas de manzana con yogur natural y muesli.

Que no se quede en el vending la cosa

Como hemos dicho anteriormente, cocinar rápido y sano no es un reto tan difícil. De la misma manera, tampoco tiene por qué serlo el picoteo entre horas. No hace falta una máquina de vending en la oficina para tomar conciencia de nuestra alimentación en el horario laboral y mejorarla. Pocas cosas más fáciles y rápidas hay que preparar un bol con fruta o una ensalada.



Algunos expertos en nutrición aconsejan alimentos saciantes y ligeros en pequeñas cantidades como alternativa para picar en el trabajo. A primera hora, tostaditas con pavo o lacón o bien yogur de soja con unos pocos frutos secos. A media mañana, se recomienda una o dos raciones de fruta: se dice de las fresas que ayudan a mantener el cerebro en forma. A algunos lo que más nos preocupa son aquellas horas de la tarde en las que nos entra un hambre que se hace hasta molesto pero tampoco podemos comer mucho porque ya se acerca la hora de cenar. Para este caso, un yogur o un puñado pequeño de frutos secos nos pueden ayudar a aguantar bien hasta la cena. Y, si os apetece, hasta unos trozos de apio o zanahoria crudos.

Con un poco de voluntad encontraremos alimentos ligeros y rápidos para comer bien en un momento determinado. No sólo es una cuestión de voluntad nuestra, claro, sino también por parte de las empresas responsables, que quieran ayudar a sus empleados a mantener esas buenas costumbres.