Faru: protección del trabajador en atmósferas peligrosas
Redacción Protección Laboral31/03/2017
El INSHT define un espacio confinado como “cualquier recinto con aberturas limitadas de entrada y salida y ventilación natural desfavorable, en el que pueden acumularse contaminantes tóxicos o inflamables, o tener una atmósfera deficiente en oxígeno y que no está concebido para la ocupación continuada por parte del trabajador”. Los lugares más frecuentes suelen ser las arquetas subterráneas, alcantarillas, sótanos, cubas, depósitos, cisternas, pozos, silos, reactores químicos, bodegas de barco, desvanes, furgones, túneles, conductos de aire, galerías de servicios, fosos.
Los riesgos más importantes a los que nos enfrentamos en estos trabajos son la asfixia, incendio o explosión y la intoxicación. Los accidentes que ocurren en espacios confinados tienen consecuencias muy graves, siendo en su mayoría accidentes mortales. Por eso es imprescindible la información y formación de los trabajadores.
Antes de entrar en el espacio confinado debemos realizar una medición para evaluar el ambiente que hay en el interior, y determinar qué medidas de prevención se deben tomar para poder efectuar el trabajo. En Faru disponemos de una amplia gama de detectores para espacios confinados que miden la concentración de oxígeno en el aire, la presencia de gases tóxicos e inflamables, así como otros detectores específicos capaces de detectar una gran variedad de gases (amoniaco, cloro, etc.).
El detector de gases deberá acompañar al trabajador durante todo el tiempo que permanezca en el interior de modo que pueda conocer en todo momento los niveles de gases y oxígeno que hay. Estos equipos tienen establecidos unos niveles de alarma que cuando se alcanzan emiten una alarma de más de 90 dB, el equipo vibra, se ilumina y no se para hasta que el trabajador no se encuentra en una zona sin contaminantes y con suficiente oxígeno.
En función de las mediciones obtenidas determinaremos si es necesario utilizar un sistema de ventilación para asegurar que las renovaciones de aire en el interior son suficientes. Además habrá que tener en cuenta que si en el interior hay gases inflamables el sistema de ventilación debe ser un equipo ATEX para evitar el riesgo de explosión. En nuestra familia de sistemas de ventilación para espacios confinados podemos encontrar tres gamas de producto, una gama estándar con tres motores básicos, una gama profesional con motores de mayor capacidad y mejores prestaciones, y la gama ATEX.
En el caso de que el sistema de ventilación no garantice las renovaciones de aire mínimas, habrá que dotar al trabajador de un equipo de respiración autónoma, el cual permitirá al trabajador respirar aire de una botella asegurándose así de no respirar los posibles gases que haya en el habitáculo. Faru dispone del equipo de respiración autónomo Aeris Confort certificado tanto para uso industrial como para bomberos y equipos de emergencias. El Aeris lleva incluido un silbato que advierte acústicamente cuando a la botella le quedan unos pocos minutos de aire, advirtiendo al trabajador que debe salir de la zona. Existe un capuz accesorio que se acopla al Aeris y que se puede utilizar para aportar aire a un herido en una situación de emergencia y evacuación. Disponemos también de equipos de escape como el BioScape C517 con botella de 15 minutos, y el Oxypro que es un aparato de evacuación de circuito cerrado con un tiempo de servicio prolongado que utiliza super-óxido de potasio para regenerar el aire exhalado.
Otra medida preventiva es el acceso a los espacios de una manera segura, el uso del trípode (certificado siempre como EN 795 B) combinado con un rescatador (certificado bajo la EN 1496), que nos ayudarán a rescatar al trabajador en caso de accidente, permitiendo una evacuación rápida entre puntos a distinta cota.
Los riesgos más importantes a los que nos enfrentamos en estos trabajos son la asfixia, incendio o explosión y la intoxicación. Los accidentes que ocurren en espacios confinados tienen consecuencias muy graves, siendo en su mayoría accidentes mortales. Por eso es imprescindible la información y formación de los trabajadores.
Faru dispone del equipo de respiración autónomo Aeris Confort certificado tanto para uso industrial como para bomberos y equipos de emergencias
Garantía de aire respirable
Antes de entrar en el espacio confinado debemos realizar una medición para evaluar el ambiente que hay en el interior, y determinar qué medidas de prevención se deben tomar para poder efectuar el trabajo. En Faru disponemos de una amplia gama de detectores para espacios confinados que miden la concentración de oxígeno en el aire, la presencia de gases tóxicos e inflamables, así como otros detectores específicos capaces de detectar una gran variedad de gases (amoniaco, cloro, etc.).
El detector de gases deberá acompañar al trabajador durante todo el tiempo que permanezca en el interior de modo que pueda conocer en todo momento los niveles de gases y oxígeno que hay. Estos equipos tienen establecidos unos niveles de alarma que cuando se alcanzan emiten una alarma de más de 90 dB, el equipo vibra, se ilumina y no se para hasta que el trabajador no se encuentra en una zona sin contaminantes y con suficiente oxígeno.
En función de las mediciones obtenidas determinaremos si es necesario utilizar un sistema de ventilación para asegurar que las renovaciones de aire en el interior son suficientes. Además habrá que tener en cuenta que si en el interior hay gases inflamables el sistema de ventilación debe ser un equipo ATEX para evitar el riesgo de explosión. En nuestra familia de sistemas de ventilación para espacios confinados podemos encontrar tres gamas de producto, una gama estándar con tres motores básicos, una gama profesional con motores de mayor capacidad y mejores prestaciones, y la gama ATEX.
En el caso de que el sistema de ventilación no garantice las renovaciones de aire mínimas, habrá que dotar al trabajador de un equipo de respiración autónoma, el cual permitirá al trabajador respirar aire de una botella asegurándose así de no respirar los posibles gases que haya en el habitáculo. Faru dispone del equipo de respiración autónomo Aeris Confort certificado tanto para uso industrial como para bomberos y equipos de emergencias. El Aeris lleva incluido un silbato que advierte acústicamente cuando a la botella le quedan unos pocos minutos de aire, advirtiendo al trabajador que debe salir de la zona. Existe un capuz accesorio que se acopla al Aeris y que se puede utilizar para aportar aire a un herido en una situación de emergencia y evacuación. Disponemos también de equipos de escape como el BioScape C517 con botella de 15 minutos, y el Oxypro que es un aparato de evacuación de circuito cerrado con un tiempo de servicio prolongado que utiliza super-óxido de potasio para regenerar el aire exhalado.
Otra medida preventiva es el acceso a los espacios de una manera segura, el uso del trípode (certificado siempre como EN 795 B) combinado con un rescatador (certificado bajo la EN 1496), que nos ayudarán a rescatar al trabajador en caso de accidente, permitiendo una evacuación rápida entre puntos a distinta cota.